El dólar cerró la sesión de este lunes con un avance de $0,90, en su cotización frente al peso chileno.
La divisa estadounidense concluyó el día en el mercado spot en puntas de $616,00 vendedor y $615,50 comprador.
El incremento se vio impulsado por un avance externo de la divisa y una nueva caída del precio del cobre, la principal exportación del país.
Las transacciones electrónicas en el mercado cambiario local llegaron a US$ 985 millones contra los 1.262 millones negociados en la jornada anterior.
El tipo de cambio viró su tendencia y bajó el lunes porque los bancos vendieron dólares ante el vencimiento de contratos a futuro, pese al retroceso de los mercados externos golpeados por la debilidad de los precios del petróleo.
El tipo de cambio disminuyó a S/.2,982, una caída de 0,20% respecto a su cotización de S/.2,988 del viernes, con negocios por US$264 millones, un monto menor al usual transado.
En el mercado paralelo, el tipo de cambio operaba en S/.2,998. En lo que va del 2015, el dólar registra un alza marginal de 0,07%.
"La sesión estuvo muy tranquila, con poco volumen de negociación. Los agentes del mercado siguen esperando nuevas señales (de la economía local y de Estados Unidos) y no se animaron hacer mucho", dijo un agente de cambios.
Sin embargo, algunos bancos vendieron divisas ante el vencimiento de contratos a futuro de venta con inversores foráneos.
Por su parte, el Banco Central de Reserva (BCR) colocó swaps cambiarios por S/.600 millones, una renovación parcial al vencimiento de S/.900 millones de swaps cambiarios que se esperaba en la sesión.
Los operadores coincidieron en que los inversores extranjeros se mantuvieron cautelosos, en medio del retroceso de los mercados externos.
Las acciones estadounidenses profundizaban su caída ya que la debilidad de los precios del petróleo golpeaba al sector energético de cara al inicio de la temporada de resultados corporativos.
En ese contexto, las monedas de la región como el peso chileno y el peso mexicano registraron pérdidas frente al billete verde.
Por Mariano Gorodisch.
El de ayer fue un día totalmente atípico para el submundo cuevero del dólar blue, ya que se interrumpió el servicio telefónico de radio por el cual se interconectan todos los corretas, como se denomina en la jerga a los cambistas del billete informal. Esto ocurrió entre las 12.30 y las 15.30, justo en el momento más caliente de venta de dólares, que se concentra a la una y media del mediodía, en pleno horario de almuerzo.
"Como se cayó la radio, se acabó el mercado. Dicen que se cayó una antena, pero lo cierto es que el bille bajó de $ 13,77 a $ 13,70 porque no había precio. Nadie sabía qué pasaba. Todos nos manejamos con radio porque así tenés la información al instante. De lo contrario, se pierde mucho tiempo", comentan en la plaza financiera.
Estas radios no tienen WhatsApp ni mensajes de texto, por lo que los cambistas debían recurrir a teléfonos de línea, mails o celulares para averiguar precios, pero por miedo a las intervenciones prefirieron esperar a que vuelva el servicio. De hecho, es la primera vez que sucede una cosa así desde que empezó el cepo, a fines de octubre de 2011. Ocurrió que no anduvieran del todo bien durante unos segundos, pero nunca durante tres horas, como ayer.
Plaza seca
Otro de los motivos por los cuales ayer bajó el blue es que el Banco Central sacó una nueva normativa mediante la cual los bancos, casas de cambio y financieras que hayan sido multadas, aunque la decisión de la Justicia no esté en firme, deben previsionarlo en sus balances como pérdidas. Las sanciones suman $ 300 millones, que de alguna manera son pesos que se sacan de la calle.
En la mayoría de los casos, los sumarios financieros son por incumplimiento de los recaudos en la prevención de lavado de dinero relacionados con el principio de "conozca a su cliente", mediante falta de confección de legajos con documentación que sustente declaraciones juradas acerca del origen y licitud de los fondos.
Según describen los principales actores de la City porteña, es una forma de amedrentar al mercado para que las grandes manos se abstengan de operar y, de esta forma, no se realicen transacciones de magnitud y así evitar que suba el dólar paralelo. "Pero lo que no se hace ahí ahora se está haciendo en miles de pequeñas cuevas", revela un mesadinerista. Lo cierto es que, al no estar presentes las grandes manos, el volumen del blue se redujo en forma significativa: de u$s 50 millones diarios, que llegó a transar, cayó a la mitad. Incluso, al haber menos cuevas operando por temor a los controles, se amplió el spread de las puntas entre el precio de compra y el de venta. Por lo pronto, a fuerza de controles, Vanoli logró calmar la "dólar dependencia".
En las mesas sostienen que, para bajar el precio del dólar en todas sus variantes, se debería alentar el ingreso de divisas a la economía. En este sentido, una de las razones por las que hay mucha economía informal es el alto costo de permanecer en blanco. Señalan que no sólo la gente tributa impuesto a las ganancias al generar sus ingresos, sino que debe pagar hasta 1,25% de lo que ahorre y mantenga en su patrimonio. "En un mundo de tasas de interés casi nulas, hace que todos los años te comas parte de tu capital. Este impuesto recauda poco y hace que la gente no exteriorice sus ahorros. Eliminarlo compensaría los impuestos perdidos por la mayor recaudación de ganancias que generaría", afirman en las financieras.