(Por Daniel Bosque) La crisis de Rusia puede deparar nuevas sorpresas. Por ejemplo, que el gobierno de Vladimir Putin termine adoptando el Patrón Oro para detener la debacle del rublo menos de los analistas. Expertos predicen que no pasará mucho tiempo antes de que Moscú eche mano a las reservas de oro del país con el fin de apuntalar su economía.
En diciembre hubo rumores de que Rusia vendería reservas de oro, pero en lugar de eso, siguió comprando lingotes, lo que alienta la nueva conjetura. La decisión, política, depende de Putin. Según recordó Eric Sepanek en el portal SBC, los bancos rusos pueden comenzar de forma independiente a adoptar el patrón oro, pero la mayoría probablemente sólo lo harán obligados por Putin. El rublo devaluado lleva a Rusia a utilizar el dólar para su comercio exterior. Con el patrón oro Rusia recuperaría términos de intercambios y tendría una mayor independencia
Mudar a un patrón oro puede limitar la moneda disponible de Rusia, pero apunta a fortalecer el rublo. Por medio de mayores compras de oro, Rusia se está asegurando de que tendrá más dinero en circulación si se pasa al patrón oro. Para salir de la crisis, Putin está fortaleciendo estrechos lazos económicos con China, que también se lanzó a comprar más oro, a través de los intercambios comerciales y de divisas.
Si se verifica en los hecho esta decisión rusa, podría constituirse en otro hito de la historia monetaria reciente marcada a fuego por la Guerra Fría, En 1944, en Bretton Woods, 44 países acordaron que sus cuentas internacionales en dólares se podrían convertir al oro a un tipo a US$ 35/oz, canjeable por Estados Unidos que emitiría tantos dólares como oro en el extranjero, con monedas fijadas al dólar, y el dólar vinculado al oro. La FED tenía 574 M oz al final de la Segunda Guerra Mundial, lo que garantizaba el sistema y la expansión y liderazgo estadounidense en el mundo.
Luego, la recuperación de Europa, el desarrollo de Japón, la expansión monetaria y el aumento de la deuda pública de Washington, llevaron a los países europeos a abandonar el Bretton Woods System principios de los ‘70. Finalmente, Richard Nixon decidió terminar con la convertibilidad dólar-oro para evitar una corrida contra su moneda, estabilizar la economía, disminuir el desempleo y de inflación. Había terminado una época en la relación monedas-oro en el mundo.
Premier Medvedev y Lingotes. La tentación del Patrón Oro
Las reservas de oro de Rusia aumentaron de 37.600.000 oz en noviembre a 38,2 millones oz en diciembre, mientras la moneda rusa caía hacia su valor más bajo desde 1998.
El rublo débil es una de las razones por las que la administración Putin compró oro e intentó mantener un tipo de cambio fijo con respecto al dólar, comprando o vendiendo US$ cada vez que el tipo de cambio subiese o bajase hasta límites determinados. Esto situó al rublo en la mira de los especuladores, quienes supieron anticiparse a las intervenciones cada vez mayores del banco central ruso y acabaron jugando al gato y al ratón. Cada vez que el tipo de cambio descendía hasta el piso establecido, el mercado sabía que el gobierno iba a vender US$.
Finalmente, el rublo cayó en picada y el Banco Central tuvo que dejarlo flotar libremente. En 2014, las reservas monetarias de Rusia han perdido US$ 100.000 millones, hasta US$ 380.000 millones. Cuando podría virar Rusia al patrón oro es una incógnita. Pero esto podría elevar los precios del oro.
También haría que Rusia un agente económico cambiará la forma en que muchas naciones manejan el comercio. El nivel de vida y el poder económico de los ciudadanos rusos también aumentaría con la eventual adopción del patrón oro según los mentores de la idea.El Banco Central de Rusia adquirió 150 ton de oro en 2014, según ha dicho su presidenta, Elvira Nabiullina.
El oro constituye alrededor del 10 % de las reservas de oro y divisas del banco y la compra ha duplicado la casi 77 ton en 2013, según cifras del Fondo Monetario Internacional (FMI). Rusia tiene ahora más de 1.100 ton de oro, pero está muy lejos aún de los EE.UU., el mayor tenedor mundial de oro por un amplio margen, tiene más de 8.000 ton.
Pero el deterioro del rublo no es la única motivación de Putin para acelerar su programa de compra de oro. El Banco Central de Rusia se ha visto obligado a absorber la producción nacional de oro. La mayor parte de la producción de oro de Rusia se vende a bancos comerciales nacionales, como Sberbank o VTB, que luego revenden el metal al Banco Central o a los bancos extranjeros. En el año que se fue los bancos extranjeros suspendieron la compra de oro ruso luego de que Occidente aplicara sanciones por la crisis de Ucrania.
Así, el Banco Central no ha tenido más remedio que absorber la producción del metal dorado que no puede ser colocada en el Exterior, y ha absorbido la mayor parte del metal que disponían los bancos comerciales. El Banco Central ruso puede pagar por el oro producido en el país con rublos, siendo la única alternativa para reforzar las reservas sin vender rublos por dólares o euros. Más que una réplica a las sanciones, el gobierno ruso se ve forzado por a actuar frente a sus limitadas circunstancias.
Las cifras oficiales muestran una disminución dramática de las reservas internacionales de Rusia. En octubre 2013 sumaban US$ 524.000 M y en un año el Banco Central (BC) ha perdido US$103.000.
A diferencia otros países, Rusia contabiliza sus dos fondos soberanos de inversión como acciones del BC. Ambos, el Fondo Nacional de la Riqueza y el Fondo de Reserva, están bajo el control del Ministerio de Finanzas, sin que el BC tenga posibilidad de maniobra sobre ellos. Al deducir el Fondo de Reserva, las reservas internacionales de Rusia disminuyen a US$ 192.000 millones. En 2013, las importaciones de Rusia ascendieron a US$ 341.000 millones, que consumieron US$85.000 millones de reservas. A julio del 2014, la deuda externa rusa totalizaba US$ 730.000 millones. Hoy el sector estatal no encuentra refinanciamiento debido a las sanciones, el superávit de la cuenta corriente se reducirá sustancialmente debido a los precios más bajos del petróleo y el sector privado quiere pagar sus deudas en moneda extranjera lo más rápido posible a causa de la caída del rublo, cuyo tipo de cambio se ha desplomado un 30% frente al dólar estadounidense. La situación se parece a un castillo de naipes similar al de 1998. El capital ruso ya tomó nota de las señales y el BC registró una fuga de capital de al menos US$125.000 millones para el 2014.
Otro caso llamativo es el del Banco Popular de China (BPCh) que compró 654 ton de oro en 2009- 2011, otras 388 ton en 2012, y más de 622 ton en 2013. No hay datos oficiales recientes sobre la tenencia china de oro.
La última medida oficial, en abril de 2009, situaba las reservas en 1.054 ton, según un raconto de Jeff Nichols, director de Precious Metals Advisors.
El BPCh no informa periódicamente sobre su compra de oro, como si lo hacen los bancos de otros países.
Las estimaciones sobre la cantidad de oro que podrían acumular los chinos se han convertido en un juego de salón para los analistas de Wall Street y los inversores de oro. Si Nichols está en lo cierto, China se convertirá en el cuarto tenedor de oro del mundo con 2.710 ton, superando a Italia y Francia.
La estrategia de diversificación frente al dólar podría ser la clave en la compra de oro. China ya poseía bonos del tesoro estadounidense por US$1.300.000 millones a comienzos de 2014, según Bloomberg. Según los expertos, el oro y el euro fueron las principales opciones de diversificación para los gerentes de los bancos centrales de China antes de la crisis de la zona euro.
"China diversifica sus tenencias, lejos de dólares hacia euros", explica Nick Brooks, analista de inversiones ETF Securities. "Y luego, estalló la crisis, sembrando dudas sobre la estabilidad estructural o la viabilidad del euro”. Porcentualmente, las reservas de oro chinas son bajas en comparación con otras economías importantes (un 1% del total de reservas en 2009), lo que también podría ser un aliciente para reforzar las reservas de oro.