El 2014 no ha sido un buen año para las exportaciones peruanas. Así, de acuerdo a la Asociación de Exportadores (ÁDEX), se proyecta que ese año cierre con una caída de 10,5% respecto al 2013, empujado por un retroceso en los envíos tradicionales de 16,2%.
Y, pese al leve avance del sector no tradicional -que crecería apenas 5,6%- y de las agroexportaciones -que cerrarían con un aumento de 25%- los despachos nacionales no lograrían desmarcarse como los de peor comportamiento de América Latina y El Caribe.
Según cifras del gremio exportador de enero a octubre, lasexportaciones peruanas se contrajeron 10,6% y superaron así las pérdidas de Argentina, la Comunidad del Caribe (Caricom) y Brasil, que descendieron en 5,2%, 4,3% y 3%, respectivamente. Nuestro desempeño también fue muy malo comparado con el de Colombia (-1,8%) y El Salvador (-1,5%) e incluso Chile, que perdió 6% entre enero y noviembre del 2014.
“El 2014 fue un año malo para las exportaciones peruanas. Los despachos tradicionales se caracterizaron por menores precios y menor producción, se retrasó el inicio o ampliación de importantes operaciones mineras que hubieran permitido compensar en algo la caída”, expreso Gastón Pacheco, presidente de ÁDEX.
REACCIÓN TARDÍA
En opinión de Pacheco, la actual crisis exportadora -que lleva más de tres años- no fue atendida de forma oportuna por el Estado. "El gobierno reaccionó tardíamente y sin la contundencia esperada, y, en este contexto, el MEF decidió, inexplicablemente, recortar el beneficio del drawback, cuando las empresas más requieren sostener su rentabilidad para continuar invirtiendo y apostando por el crecimiento del país", acotó.
En ese sentido, recordó que en el 2009, las exportaciones peruanas cayeron 13% tras una severa crisis financiera internacional y la reacción del gobierno anterior fue elevar temporalmente la tasa del drawback de 5% a 8%, "reconociendo la importancia estratégica de evitar que la crisis destruya la capacidad exportadora de una nación", explicó.
Esta falta táctica tendría como consecuencia la caída del sector confecciones, sidero metalúrgico, minería no metálica y químicos, que bajarían en 13,9%, 14%, 7,4% y 1%, cada uno.
“En líneas generales, todos los subsectores no tradicionales perdieron el ritmo de crecimiento en los últimos tres años, por lo que resulta imperativo que el MEF retroceda en la medida de disminuir el drawback a fin de ayudar al sector que más valor agregado genera, el no tradicional, a fin de que recupere el ritmo de crecimiento de años anteriores”, culminó el presidente de ÁDEX.