En junio el índice Mensual de Actividad de la Construcción (Imacon), que elabora la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), advirtió por primera vez en el año una contracción del sector, situación que no se registraba desde diciembre de 2009.
Tras ese descenso de mediados de año, los índices siguieron arrojando retrocesos sucesivos.
Ayer el organismo gremial informó que nuevamente en octubre la actividad del sector disminuyó, esta vez un 1,5% respecto del mismo mes del año anterior.
Sin embargo, en términos acumulados para los primeros diez meses de este año la construcción creció un leve 0,4% anual, lo que supone un desempeño muy inferior comparado con el 4,9% de tasa promedio anual histórica.
Estas últimas cifras ratifican "el intenso proceso de desaceleración que experimenta la construcción y es consecuencia de la caída del empleo sectorial, de la demanda de materiales y de la actividad de contratistas generales", explicó al respecto Javier Hurtado, gerente de Estudios de la CChC.
Lo anterior, agregó el ejecutivo, se debe "principalmente al escaso inicio de proyectos de inversión productiva, en particular, en las áreas de minería y energía, ambas muy incidentes en el gasto total en construcción".
Índice desagregado
En el mes informado la contratación de mano de obra en el rubro se contrajo un 0,8% anual lo que, según Hurtado, "significó una pérdida de 5.000 puestos de trabajo en doce meses y un importante deterioro de su calidad, ya que si bien se incorporaron al sector 26.000 trabajadores independientes, en doce meses se perdieron poco más de 31.000 empleos dependientes".
Mientras, la demanda de materiales mantuvo caídas con una importante baja anual del 20,7% en octubre que se explicó, sobre todo, por el escaso dinamismo de los envíos de cementos y barras de acero, a lo que se suman unas ventas reales de proveedores que sólo crecieron un 1,2% en el año.
En contraposición, la aprobación de permisos de edificación en el décmo mes se mantuvo más dinámica al registrar un aumento del 48,3% anual con respecto al mismo lapso de 2013 y un 5% mensual.
Estos buenos resultados obedecen a varias razones: una menor base de comparación, el agotamiento de permisos anteriores y la toma de posición futura, dado que los permisos pueden durar hasta tres años antes de que se ejecuten, comentó Hurtado.
Situación en regiones
La debilidad del sector se evidenció a nivel nacional, en línea con el deterioro del mercado laboral y los menores despachos de materiales de construcción para obra gruesa. "Esta situación es coherente con el debilitado encadenamiento productivo hacia el sector, principalmente en la zona norte debido, entre otros factores, a la maduración del ciclo de inversiones mineras" y "las menores iniciativas de inversión de energía", dijeron.
El sector descendió con fuerza, en especial en Antofagasta, donde la baja fue de 6,7%; O´Higgins, con una contracción del 4,4%; y la Región Metropolitana, con la caída del 3,6%.
Frente a esta coyuntura, Los Ríos mejoró su índice con una alza del 4,3%, seguida de la mejora del 3,4% de La Araucanía.