Por: Carlos Burgueño.
La decisión de la Cámara de Apelaciones de Nueva York del 23 de diciembre pasado de habilitar la cláusula Discovery, por la cual jueces de los Estados Unidos pueden identificar activos físicos y financieros de funcionarios, militares y diplomáticos argentinos (para eventualmente avanzar en embargos) podría derivar en un nuevo capítulo en el "juicio del siglo". El fondo buitre NML Elliott buscará acelerar la presentación judicial que hizo en julio pasado, donde apelaba a que cuando la cláusula Discovery estuviera habilitada puedan avanzarse en su aplicación sobre eventuales fondos de YPF y de la petrolera norteamericana Chevron para cobrarse el fallo a favor del juez Thomas Griesa.
Para la Argentina, avalada por la opinión de los abogados Jonathan Blackman y Carmine Bocuzzi del estudio Cleary Gotlieb Steen & Hamilton (CGS&H), la presentación de Elliott sería imposible de tener en cuenta y de fácil apelación. Sin embargo, se sabe, la intención sería complicar aún más la situación del país y hacer las posibles negociaciones de enero más complicadas.
A comienzos de aquel mes, el abogado Ted Olson, que representa al fondo buitre de Paul Singer, había concretado el paso más polémico contra la Argentina y el país, aunque de legalidad dudosa, en los tribunales de California. La intención era que cuando se pudiera legalmente comenzar a investigar los activos del país y eventualmente presentar su publicación, esos datos se los deriven al juez Thomas Griesa para que sea el quien defina si luego esos fondos son o no embargables. Desde la decisión de la Cámara de Apelaciones de Nueva York del martes pasado, Elliott ya está habilitado para presentarse ante la Justicia californiana y avanzar con la cláusula Discovery sobre YPF-Chevron. Si finalmente tiene éxito o no dependerá de los jueces locales. Se verá en los primeros días de enero de 2015, cuando el fondo Elliott presione a la Justicia por una definición. La decisión dependerá del juez Jeffrey Steven White, magistrado de primera instancia del distrito norte de California, donde por sorteo se radicó la denuncia de Elliott.
En la presentación de julio, la intención de máxima de Elliott es que un juez avance hasta las últimas consecuencias y le embargue fondos a Chevron. La de mínima, que haya un juicio nuevo que embarre aún más el desarrollo de las negociaciones con la Argentina. En el medio, Elliott busca afectar las inversiones de cualquier otra compañía norteamericana en el país, ya que de resultar vencedor el fondo buitre en este otro juicio, todas las empresas de ese origen podrían tener dinero embargable.
La embestida de Elliott es en California porque en ese estado tiene su sede Chevron. La empresa es heredera de la Standard Oil-California desde 1911 y tiene su lugar de residencia en San Ramón, un condado cercano a San Francisco hacia el continente alejándose del océano Pacífico; precisamente donde tiene su jurisdicción el Noveno Circuito y donde los abogados del fondo buitre radicaron la denuncia. La presentación fue recibida por la Justicia, a la espera de lo que suceda mañana en el tribunal de Griesa. De avalar los jueces californianos la presentación, comenzaría a considerarse a nivel tribunalicio la alternativa del eventual embargo a Chevron, además de la aceleración del pedido a otros jueces del estado sobre la posibilidad de que existen fondos de la petrolera estatal renacionalizada en ese territorio. Luego, si finalmente algún juez californiano decidiera avalar el pedido de embargos de Elliott, las alternativas serían de avanzar sobre los activos de YPF primero y luego sobre los de Chevron, o sobre ambos a la vez. La Justicia del oeste puede obviamente desechar el intento y considerar los argumentos que seguramente expondrá la Argentina: que YPF es una sociedad separada del Estado y que Chevron es una empresa absolutamente independiente de la Argentina que sólo decidió asociarse con el país para un proyecto concreto: el de Vaca Muerta.
Elliott quiere que la Justicia bucee sobre los activos financieros y físicos que YPF podría tener en California; y, si no los encuentra, que sea entonces Chevron la que responda. Para semejante pedido incluye en las presentaciones judiciales innumerables fallos anteriores tanto en California como en otros estados norteamericanos. Pero lo más fuerte que presenta Elliott son los argumentos derivados de la decisión de la Corte Suprema de los Estados Unidos del 16 de junio pasado, cuando no sólo rechazó la posibilidad de tomar el "juicio del siglo" en tercera instancia (negando también la posibilidad de que opine el Gobierno de Barack Obama), sino que también hizo lugar a la petición de los fondos buitre de obligar a las entidades financieras de ese país (y a cualquier agente económico que considere necesario) que informe a un juez sobre los activos monetarios o físicos si los magistrados así lo ordenan. De esto habla la cláusula Discovery.
La argumentación básica de la presentación de Elliott (realizada a través de la firma de Joshua D. N. Hess) el abogado del estudio de Olson en California, es que los fondos de YPF y, eventualmente, de Chevron, pertenecen a la Argentina; al menos, en el caso de la empresa norteamericana, en lo que tiene que ver con el proyecto de inversión de unos u$s 2.040 ya desembolsados (de un total de u$s 8.000 millones de todo el emprendimiento) en el yacimiento de shale oil en Neuquén. Ese dinero esté en las arcas de la petrolera argentina o de la empresa norteamericana, tendría que ser parte de los millones de dólares con los que el país debería responder por no haber concretado aún el pago de los u$s 1.330 millones del fallo de 2012 (hoy superarían según el cálculo de Elliott los u$s 1.600 millones), en tiempo y forma. Para poder avanzar necesitarían que Griesa determine que ya es tiempo para comenzar a embargar, empezando por los u$s 539 millones que el país ya depositó al Bank of New York Mellon (BoNY) para responder por el vencimiento del 30 de junio pasado por el Discount que debe pagarse como fecha límite el 30 de julio. Obviamente en este caso, para los abogados que representan al país del estudio Cleary Gotlieb Steen & Hamilton (CGS&H), habría más que un argumento sólido para defender la posición del país comenzando por la explicación que YPF es una sociedad anónima independiente del Estado (aunque la mayoría accionaria haya sido renacionalizada) y que es imposible que se avance además sobre una empresa privada norteamericana que sólo se asoció para un emprendimiento particular. Más teniendo en cuenta que el dinero fue de Chevron a YPF y no al revés. Sin embargo, lo que también se reconoce, sería inevitable que el país comience un nuevo juicio contra el fondo buitre. Esta vez sería en la otra costa, la del Pacífico.
Demuestra Elliott con esta embestida muchas cosas. La primera es que el fuerte de este fondo buitre no es la inversión o la capacidad de ganar dinero generando diferencias de rentabilidad en opciones dentro de los mercados de capitales sino que la especialidad de la casa es litigar en cualquier terreno posible. Para esto tienen más especialistas abogados que analistas financieros. Se demuestra también que el "expertice" de Paul Singer y su fondo, es avanzar sobre embargos en cualquier tribunal del globo.
Por Darío Gannio.
El 2014 quedará marcado como el año en que Argentina logró instalar en foros internacionales como el G-20 y la ONU su litigio con los fondos buitre, al develar la estrategia central de empujar al default a los países emergentes, logrando el apoyo global para cambiar la legislación de las próximas emisiones de deuda soberanas.
Desde que la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos dejó firme en junio el fallo del juez neoyorquino Thomas Griesa contra el país, el equipo del ministro de Economía, Axel Kicillof, fue tentado muchas veces a negociar con los demandantes. De esa forma, hubiera podido seguir con su plan de los primeros trimestres de su gestión, en donde la intención era volver, de a poco, a los mercados. “No podemos empezar a prestar plata nosotros”, repetían en el entorno del titular del Palacio de Hacienda mientras se cerraba el acuerdo con el Club de París, la última de las medidas en el frente externo, después de haberles pagado a las empresas que litigaban en el tribunal CIADI, de haberle entregado bonos bien cotizados a Repsol y de programar un entendimiento con el FMI por las estadísticas.
Pero el retorno paulatino a los mercados, que desde el Gobierno insistían que era para desarrollar obras de infraestructura, se convirtió en la búsqueda de dólares para mantener el tipo de cambio. Así, renacieron relaciones con China y Rusia, potenciadas por la visita de los jefes de Estado de esas naciones, las cuales no se hubieran dado si Argentina no hubiese criticado abiertamente a Estados Unidos y a su Justicia. Esto último fue admitido a BAE Negocios por funcionarios del Ejecutivo, que agregaron que, a pesar de que los préstamos de Rusia y el swap de monedas con China sirvieron para aliviar las tensiones cambiarias, “siempre es mejor el mercado tradicional de deuda”.
Pero hasta que Argentina no salga del default técnico no podrá volver a comprometerse a tasas razonables, por lo que el objetivo sigue siendo el de despejar presiones devaluatorias. “Mostrar los dólares” fue la consigna del equipo de Kicillof en el segundo semestre que continuará en los primeros meses del 2015.
Las divisas del campo y nuevos acuerdos bilaterales será la apuesta fuerte de Economía y el Banco Central durante el año de elecciones, ya que la baja del precio del petróleo podría afectar, de mantenerse, los planes de conseguir préstamos a través de YPF.
Es que la petrolera se convirtió en el 2014 en la vía más barata de conseguir dólares, pero para eso deberá mantener el programa de inversiones que su CEO, Miguel Galuccio, había preparado, el cual puede demorarse con la crisis del “oro negro”.
No obstante, lo que en parte marque el último año de la gestión de Cristina Fernández en la Administración Nacional será lo que suceda a partir de las próximas semanas en el despacho del Special Master, Daniel Pollack. Con la caída el primero de enero de la cláusula Right Upon Future Offers (RUFO), que no permite ofrecer un mejor acuerdo a los buitres que a los reestructurados, el mediador que designó Griesa abrirá una ronda de tratativas entre los abogados de Argentina y los holdouts.
Consumo
Más allá de la explicación de por qué faltaron divisas, la economía real vivió uno de los peores años del kirchnerismo. El consumo, la variable vedette desde la recuperación económica, cayó al ritmo del poder adquisitivo, lo que generó suspensiones en fábricas y aumento del desempleo.
La recuperación, entonces, debe venir del consumo interno, lo que explica por qué tanto el Ministro como la Presidenta hayan insistido con que la inflación no fue del 40% y les hayan pedido a los empresarios que digan lo mismo. Econnomía esperan que la infalción en 2015 entre el 22 y el 24 por ciento. Por lo que más allá de lo que suceda en la mesa de Pollack, el Gobierno seguirá apostando al mercado interno.
La Cámara de Apelaciones de Nueva York, en el 2do. distrito judicial estadounidense, habilitó al fondo acreedor holdout NML Elliott a presentarse ante la Justicia de California (USA), el 9no. circuito, y avanzar con la cláusula Discovery aplicable a YPF-Chevron (la petrolera estadounidense tiene su sede en San Ramón, cerca de San Francisco, en California).
Elliott pretende que el juez Jeffrey Steven White indague sobre los activos financieros y físicos que YPF podría tener en California (la cláusula Discovery); y, si no los encuentra, que responda Chevron, porque explota activos que pertenecen a la Argentina: el proyecto de inversión en el yacimiento de 'shale oil' en Vaca Muerta, Neuquén.
Elliott todavía no obtuvo la decisión del juez neoyorkino Thomas Griesa de que ya es tiempo de comenzar a embargar. Pero identificar qué es embargable es el paso previo. Para YPF, que mucho apostó a la participación de Chevron en Vaca Muerta, una situación muy complicada.
A su vez, YPF enfrenta la caída del precio internacional del crudo.
Para tener una idea de lo que viene: el príncipe heredero saudita, Salman Ben Abdel Aziz aprobo un presupuesto anual 2015 del Reino con ingresos 140.000 millones de riales menos (US$37.300 millones) con respecto a las previsiones de 2014, a causa del desplome de los precios del petróleo: Arabia Saudita obtiene del crudo hasta el 90% de sus ingresos.
El rey Abdalá pidió al gabinete que "racionalice los gastos" y recomendó "una aplicación precisa y eficaz del presupuesto".
Según un post en el blog del FMI firmado, entre otros, por el economista jefe del organismo, Olivier Blanchard, acerca del alto grado de "incertidumbre" en los precios del crudo, "Los mercados de contratos a futuro sugieren que los precios del crudo subirán pero permanecerán por debajo de sus niveles de los últimos años", aconsejando tomar medidas de previsión al respecto.
En ese escenario (que puede influir en la cotización bursátil y el valor de la deuda de la empresa), el presidente de YPF, Miguel Galuccio, citó a ejecutivos de la empresa a la vez que difundió su exhortación por toda la prensa K.
Por ejemplo:
> “En el exterior hay una tormenta generada por la baja del precio del petróleo. Pero acá, en esta torre de YPF, yo recibo todos los días a grandes empresarios que quieren llegar a acuerdos con nosotros, por ejemplo, por Vaca Muerta. Son acuerdos a 15 años, que no se fijan en lo que pasó en los últimos meses. Ya concretamos varios de esos acuerdos y concretaremos más.”
> “Nuestro plan no está en peligro. Invertiremos US$6.000 millones en 2015, porque estamos respaldados por una estrategia a largo plazo”.
> “los fundamentos que hacen al precio del petróleo a largo plazo no han cambiado, con lo cual lo que hay que hacer es mantener el norte y capear la tormenta”.
> “Este nuevo contexto mundial nos agarra bien parados, bien firmes. Tenemos equipo, así que no veo problemas. Vamos a mantener el nivel de actividad de este año. Cuando uno tiene un proyecto de este tipo, que es recuperar la independencia energética, lo importante es no perder de vista hacia dónde uno va. Por supuesto que en este contexto el mercado refinador puede funcionar, y la industria y la Argentina, en su conjunto, seguir siendo competitivas. Si tenemos suficiente cabeza y somos lo suficientemente inteligentes, vamos a encontrar la solución”.
> “Ha sido un año excepcional para nosotros. Todo lo que nos propusimos, lo alcanzamos. Cerramos acuerdos con Petronas, con Pampa Energía, compramos el área de Petrobras y dejamos lista la instalación de la planta de coque”. (Alcanzamos) “el umbral de US$6.000 millones de inversión, 30% de crecimiento en la producción de gas y petróleo”.
Ya se verá cómo comienza 2015 para YPF pero quizá Galuccio tenga que realizar alguna corrección a sus previsiones...
El fondo buitre NML Elliott buscará acelerar la presentación judicial que hizo en julio pasado, donde apelaba a que cuando la cláusula Discovery estuviera habilitada puedan avanzarse en su aplicación sobre eventuales fondos de YPF y de la petrolera norteamericana Chevron para cobrarse el fallo a favor del juez Thomas Griesa.
Según publica este viernes el diario Ámbito Financiero, esto se debe a la decisión de la Cámara de Apelaciones de Nueva York del 23 de diciembre pasado de habilitar la cláusula Discovery. Según el periodista Carlos Burgueño, por ello jueces de los Estados Unidos pueden identificar activos físicos y financieros de funcionarios, militares y diplomáticos argentinos (para eventualmente avanzar en embargos) podría derivar en un nuevo capítulo en el "juicio del siglo".
Para la Argentina, avalada por la opinión de los abogados Jonathan Blackman y Carmine Bocuzzi del estudio Cleary Gotlieb Steen & Hamilton (CGS&H), la presentación de Elliott sería imposible de tener en cuenta y de fácil apelación. "Sin embargo, se sabe, la intención sería complicar aún más la situación del país y hacer las posibles negociaciones de enero más complicadas", según señala este viernes Burgueño en Ámbito.
El principio del caso
Según ese diario porteño, a comienzos de aquel mes, el abogado Ted Olson, que representa al fondo buitre de Paul Singer, había concretado el paso más polémico contra la Argentina y el país, aunque de legalidad dudosa, en los tribunales de California. La intención era que cuando se pudiera legalmente comenzar a investigar los activos del país y eventualmente presentar su publicación, esos datos se los deriven al juez Thomas Griesa para que sea el quien defina si luego esos fondos son o no embargables. Desde la decisión de la Cámara de Apelaciones de Nueva York del martes pasado, Elliott ya está habilitado para presentarse ante la Justicia californiana y avanzar con la cláusula Discovery sobre YPF-Chevron. Si finalmente tiene éxito o no dependerá de los jueces locales. Se verá en los primeros días de enero de 2015, cuando el fondo Elliott presione a la Justicia por una definición. La decisión dependerá del juez Jeffrey Steven White, magistrado de primera instancia del distrito norte de California, donde por sorteo se radicó la denuncia de Elliott.
En la presentación de julio, la intención de máxima de Elliott es que un juez avance hasta las últimas consecuencias y le embargue fondos a Chevron. La de mínima, que haya un juicio nuevo que embarre aún más el desarrollo de las negociaciones con la Argentina. En el medio, Elliott busca afectar las inversiones de cualquier otra compañía norteamericana en el país, ya que de resultar vencedor el fondo buitre en este otro juicio, todas las empresas de ese origen podrían tener dinero embargable.
La embestida de Elliott es en California porque en ese estado tiene su sede Chevron. La empresa es heredera de la Standard Oil-California desde 1911 y tiene su lugar de residencia en San Ramón, un condado cercano a San Francisco hacia el continente alejándose del océano Pacífico; precisamente donde tiene su jurisdicción el Noveno Circuito y donde los abogados del fondo buitre radicaron la denuncia.
Según explica Burgueño, la presentación fue recibida por la Justicia, a la espera de lo que suceda mañana en el tribunal de Griesa. De avalar los jueces californianos la presentación, comenzaría a considerarse a nivel tribunalicio la alternativa del eventual embargo a Chevron, además de la aceleración del pedido a otros jueces del estado sobre la posibilidad de que existen fondos de la petrolera estatal renacionalizada en ese territorio. Luego, si finalmente algún juez californiano decidiera avalar el pedido de embargos de Elliott, las alternativas serían de avanzar sobre los activos de YPF primero y luego sobre los de Chevron, o sobre ambos a la vez. La Justicia del oeste puede obviamente desechar el intento y considerar los argumentos que seguramente expondrá la Argentina: que YPF es una sociedad separada del Estado y que Chevron es una empresa absolutamente independiente de la Argentina que sólo decidió asociarse con el país para un proyecto concreto: el de Vaca Muerta.
Elliott quiere que la Justicia bucee sobre los activos financieros y físicos que YPF podría tener en California; y, si no los encuentra, que sea entonces Chevron la que responda. Para semejante pedido incluye en las presentaciones judiciales innumerables fallos anteriores tanto en California como en otros estados norteamericanos. Pero lo más fuerte que presenta Elliott son los argumentos derivados de la decisión de la Corte Suprema de los Estados Unidos del 16 de junio pasado, cuando no sólo rechazó la posibilidad de tomar el "juicio del siglo" en tercera instancia (negando también la posibilidad de que opine el Gobierno de Barack Obama), sino que también hizo lugar a la petición de los fondos buitre de obligar a las entidades financieras de ese país (y a cualquier agente económico que considere necesario) que informe a un juez sobre los activos monetarios o físicos si los magistrados así lo ordenan. De esto habla la cláusula Discovery.