El petróleo de Texas (WTI) subió hoy un 3,36 % y cerró con un precio de 57,12 dólares el barril, recuperándose de parte de las últimas caídas gracias a los buenos datos económicos en Estados Unidos.
Al término de la sesión de hoy en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del petróleo WTI para entrega en febrero próximo, el mes de referencia, subieron 1,86 dólares respecto al cierre del lunes.
El precio se vio impulsado por la publicación del cálculo de la evolución del producto interior bruto (PIB) en EE.UU., un periodo en el que el país creció a un ritmo anual del 5 %, el más alto en 11 once años.
El gasto de los consumidores y la inversión empresarial propulsaron la economía estadounidense entre julio y septiembre por encima de las expectativas de los analistas, que habían previsto un crecimiento en torno al 4 %.
Precisamente, buena parte de la evolución económica favorable se debe, según los expertos, a los bajos precios del petróleo, que han incentivado el consumo privado.
El barril del WTI lleva cayendo desde septiembre, a partir del máximo anual de 102 dólares alcanzado a finales de junio.
El valor del crudo inició su desplome más fuerte después de que, el 27 de noviembre pasado, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acordara no reducir su producción actual, de unos 30 millones de barriles diarios, a pesar del bajo nivel de los precios.
Hoy, el impacto positivo de los datos de crecimiento estadounidense en el precio del barril de crudo se acrecentó, según los analistas, debido a un nivel de operaciones por debajo de lo habitual como consecuencia del festivo que se celebra en Japón y de la ralentización de otros mercados al acercarse el parón navideño.
Por su parte, los contratos de gasolina para entrega en enero, todavía el mes de referencia, subieron 3,5 centavos hasta 1,57 dólares el galón, mientras que los de gasóleo de calefacción para entrega ese mismo mes avanzaron casi 4 centavos y cerraron en 1,99 dólares el galón.
Finalmente, los contratos de gas natural para entrega en enero, también de referencia, subieron 27 centavos y terminaron en 3,17 dólares por cada mil pies cúbicos.
El petróleo tipo WTI ascendió 3,4% a u$s 57,12 el barril. De está forma logra abandonar, por un rato, la tendencia descendente de las últimas ruedas.
Más temprano se conoció que los inventarios comerciales de crudo, gasolina y destilados en Estados Unidos subieron la semana pasada, según un reporte del Instituto Americano del Petróleo (API).
Las existencias de crudo subieron en 5,4 millones de barriles a 386,5 millones de barriles, que se compara con las expectativas de una caída de 2,3 millones de barriles.
Los inventarios de crudo en Cushing, Oklahoma, punto de entrega del referencial West Texas Intermediate (WTI), aumentaron en 915.000 barriles, según el reporte de API.
La suba del petróleo arrastró a las acciones a l alza y por quinta jornada consecutiva subieron el Dow Jones y el S&P 500. Además, los inversores son optimistas después de que la Reserva Federal al anunciar que no plantea una suba de tasas de interés antes de fines de abril próximo.
El petróleo de Texas (WTI) subió este martes un 3,4% y cerró con un precio de u$s57,12 el barril, con lo que recuperó parte de las últimas caídas gracias a los buenos datos económicos en Estados Unidos.
Al término de la sesión en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del petróleo WTI para entrega en febrero próximo, el mes de referencia, subieron 1,86 dólaresrespecto al cierre del lunes.
El precio se vio impulsado por la publicación del cálculo de la evolución del producto interior bruto (PIB) en EEUU, un periodo en el que el país creció a un ritmo anual del 5%, el más alto en once años.
El gasto de los consumidores y la inversión empresarial propulsaron la economía norteamericana entre julio y septiembre por encima de las expectativas de los analistas, que habían previsto un crecimiento en torno al 4 por ciento.
Precisamente, buena parte de la evolución económica favorable se debe, según los expertos, a los bajos precios del petróleo, que han incentivado el consumo privado.
El barril del WTI lleva cayendo desde septiembre, a partir del máximo anual de 102 dólaresalcanzado a finales de junio (-44%).
El valor del crudo inició su desplome más fuerte después de que, el 27 de noviembre pasado, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acordara no reducir su producción actual, de unos 30 millones de barriles diarios, a pesar del bajo nivel de los precios.
El impacto positivo de los datos de crecimiento estadounidense en el precio del barril de crudo se acrecentó, según los analistas, debido a un nivel de operaciones por debajo de lo habitual como consecuencia del festivo que se celebra en Japón y de la ralentización de otros mercados al acercarse el parón navideño.
Los productores árabes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) esperan que los precios mundiales del crudo reboten hasta un nivel de entre 70 y 80 dólares por barril a finales del siguiente año gracias a una esperada recuperación de la economía, de acuerdo con los delegados de la organización.
Se trata de la primera señal que apunta a una estabilización de los mercados de crudo a medio plazo.
Los delegados, algunos de los cuales pertenecen a los principales países productores de la OPEP en el Golfo Pérsico, dijeron que no veían ahora -y a algunos ni siquiera les gustaría- un regreso a los 100 dólares por barril a corto plazo.
La cota de los 100 dólares, antes considerada "justa" para muchos grandes productores, alienta demasiada producción nueva a alto costo de parte de agentes fuera del cartel exportador, dijeron algunas fuentes.
Pero consideraron que una vez que se ralentice el vertiginoso crecimiento de productores de alto costo -como los enfocados en hidrocarburos no convencionales en Estados Unidos- y los precios bajos comiencen a estimular la demanda, los precios del petróleo podrían encontrar un nuevo equilibrio hacia finales de 2015.
Ello incluso aunque no se produzcan recortes de producción por parte de la OPEP, algo que se ha venido descartando repetidamente.
"La percepción general es que los precios no pueden derrumbarse, los precios pueden tocar los 60 dólares o incluso ser algo más bajos durante unos meses para luego volver a un nivel aceptable de 80 dólares por barril, pero probablemente después de ocho meses a un año", dijo una fuente petrolera del Golfo.
Otra fuente de la OPEP del Golfo Pérsico señaló: "Tenemos que esperar a ver qué pasa. No vemos los 100 dólares el año que viene, a no ser que haya una repentina interrupción de suministro. Pero una media de 70-80 dólares el año que viene, sí".
Estos comentarios son los primeros que indican cómo los grandes productores ven los mercados de petróleo el año que viene, después de que el actual declive llevó a un recorte a la mitad los precios desde junio. El crudo Brent, referencia mundial del petróleo, cerró el lunes en unos 60 dólares por barril.