Por VICTORIA MOLNAR.
Consultado sobre qué posibilidades ve para la regasificadora uruguaya, dijo que la idea es establecer “sinergias en la importación” para “comprar mejor (gas licuado), abaratar la logística” y lo que hace “Uruguay es una oportunidad”. Señaló que en los dos bloques que posee en la plataforma marítima uruguaya, “se bajó Shell (que era socio junto a Galp)” y “estamos viendo si podemos subir algún socio más”.
—Los números de YPF muestran un crecimiento de inversiones a partir de su gestión. ¿Qué le aportó la nacionalización y el modelo de empresa mixta con mayoría estatal?
—Los números reflejan un poco la visión inicial de YPF durante esta nueva etapa, que implica una apuesta distinta porque la mayoría de las compañías son nacionales o son internacionales y hay unas pocas que han adoptado el modelo mixto. Siempre hablo de (la noruega) Statoil (como) un ejemplo. Es un modelo que de alguna manera permite llegar mucho más lejos que como una compañía nacional, si es que logras ese virtuosismo entre las partes. Statoil de alguna manera lo ha hecho y tiene un trillón de dólares de fondo y es el fondo con la mejor perfomance del mundo. Nosotros no somos noruegos, somos argentinos y por ahí las cosas acá son un poco más complejas. Pero, si ves la trayectoria de YPF durante los últimos dos años y medio es un ejemplo de que de alguna manera eso se puede lograr. Para implementarlo tuvimos tres ejes: primero adoptar ese modelo y ponerlo en manos de profesionales; segundo que la compañía iba a tener un sentido nacional, es decir alcanzar la independencia energética; y tercero que como empresa mixta todo lo que hacemos tiene como objetivo y resultado el crecimiento pero a través de la generación de valor. Con lo cual hemos completado un ciclo y la próxima etapa tiene que ver con el potencial más importante que tiene Argentina, que es el de los recursos en no convencional. Tenemos tres proyectos, uno con Chevron, otro con Dow y otro con Petronas. El dinero que hemos invertido ahí es bastante importante y parte del desafío es desarrollar el no convencional, reducir más los costos y ser más eficientes desde el punto de vista de la producción. Un poco más allá está el off shore (exploración marítima), donde hay un gran potencial y que es un desafío que también tienen en Uruguay que empezó a mirarlo.
—En la última semana el precio del crudo está en US$ 60. ¿Cómo afecta ese desplome a YPF?, puede restar interés en la exploración de hidrocarburos no convencionales en Vaca Muerta?
—Una bajada importante del crudo como la que ha habido afecta a la industria en general y no somos ajenos a la industria. Los fundamentos, en tanto la oferta y la demanda para negocio petrolero no han cambiado. Y la demanda nosotros creemos que sigue siendo tan fuerte como era antes en cuanto a su proyección y creo que India y China van a seguir empujando la demanda a futuro para arriba y lo que había en seis meses no ha cambiado sustancialmente hoy. Y en la oferta creemos que hay un jugador nuevo que es Estados Unidos que es definitivamente importante porque lo ha hecho de una manera que tiene que ver posiblemente con el camino que tenga la Argentina. Sigo pensando en un precio a futuro que va muy en línea con los precios que teníamos de US$ 80 o US$ 90 pero no de US$ 50. Nuestra visión y norte no ha cambiado en absoluto. Vamos a tener un año más difícil en 2015 que lo que hubiéramos tenido si el precio no hubiese bajado.
—YPF, UTE y Ancap firmaron en noviembre un memorándum de entendimiento. ¿Cuál es el interés que genera Uruguay para YPF?
—Desde que llegamos, tenemos una visión mucho más regional respecto de la participación de YPF. Ancap, Petrobras, YPFB (Bolivia), ENAP (Chile) son para nosotros socios que podrían llegar a ser estratégicos porque tienen el mismo compromiso que tenemos hacia la región y hacia la compañía a la que pertenecen. Con Ancap te diría que es todavía más fuerte la relación porque aparte del hecho de un interés regional en energía —y eso nos lleva a participar—, en lo personal tenemos una muy buena relación con la gente de Ancap. A su vez, tengo una amistad personal con Raúl (Sendic) y también tenemos acá mucho aprecio por José (Mujica). Creo que hay un alineamiento y un sentimiento que estamos tirando todos para el mismo lado. El proyecto con UTE y Ancap tiene que ver con esa visión, firmamos una intención de trabajar juntos y lo primero que hay que hacer es analizar la situación y diseñar. Tanto Argentina como Uruguay hoy son importadores de GNL (Gas Natural Licuado). Estamos interconectados por un gasoducto que hoy no tiene mucha utilización. Si bien la producción de gas en Argentina evoluciona favorablemente —sobre todo la de YPF— pensamos que a mediano plazo podríamos llegar a autoabastecernos y eso permitiría que posiblemente esa interconexión nos permita entregar en el futuro un gas más barato a Uruguay. Pero hasta ese momento vamos a seguir siendo importadores GNL y estamos abiertos a cualquier sinergia desde lo coyuntural o estructural en esa importación para comprar mejor, para abaratar la logística y lo que está haciendo Uruguay es una oportunidad.
—¿Cuál es la intención con la regasificadora en Uruguay?
—Podría ser comprar (gas licuado) en conjunto; podría ser que, en el caso de emergencia, las dos regasificadoras estén conectadas para transferir de acá a Uruguay o de Uruguay para acá. O sea los técnicos ven miles de posibilidades. Pero a esas posibilidades primero hay que analizarlas y ese acuerdo tiende a entender cuáles podrían ser esas potenciales sinergias. Ancap también ha tenido un desarrollo muy importante en biodiesel y ahí también estamos viendo si hay algún tipo de cosa que podamos hacer, porque es un mercado que volvió a resurgir.
—YPF estuvo haciendo trabajos de exploración en el norte de Uruguay y en la plataforma marítima uruguaya tiene dos bloques junto a Shell y Galp. ¿Por qué no se continuó con la exploración en tierra? ¿Cuál es la idea del trabajo a desarrollar en la plataforma marítima?
—El on-shore de Uruguay tiene que ver un poco con la visión del no convencional y en ese sentido nosotros estamos poniendo muchísimas fichas dentro de la Argentina. En el exploratorio (en tierra) tenemos que ver cuáles son los pasos que tenemos que dar en Uruguay y hoy no podría dar una definición. No quiere decir que no haya interés, porque siempre hay colaboración y nosotros nos hemos puesto adelante en todo el ámbito de Latinoamérica en el desarrollo del no convencional. En cuanto al off shore en Uruguay, hay un interés, hemos registrado la sísmica, pero tenemos la coyuntura de que nuestro socio, que es Shell, se ha bajado y en la plataforma marítima hoy estamos en una etapa cuyo desarrollo es muy importante y estamos viendo si podemos subir algún socio más para restablecer la relación que teníamos. Somos operadores y hemos abierto hace poco una búsqueda de socios, aunque claramente el contexto actual no ayuda.
—Exponía que uno de los ejes de YPF era la visión nacional a nivel de lograr la autonomía energética, ¿Uruguay puede jugar algún rol allí?
—Argentina en lo energético está yendo por el camino correcto y va a llevar un tiempo llegar a esa independencia. Lo más importante es que se ha parado la curva hiperbólica de importación en la que veníamos y ahora hay que poner mucha fuerza en reducirla. Creo que con Uruguay siempre va a haber sinergia, que hoy pasa por un proyecto off shore, por cooperar en el desarrollo no convencional y hoy hemos logrado un nuevo nicho de sinergia que pasa por ver si podemos ser más eficientes en esta etapa de importación que ambos países vamos a tener. Hoy el potencial energético de Argentina es mucho mayor que el de Uruguay, lo que no quiere decir que no cambie porque Uruguay tiene un descubrimiento mañana. Por eso celebro la apuesta importante que hizo Ancap, en aquel momento liderado por Raúl (Sendic), en la búsqueda de esa independencia energética que no es fácil porque tenés que traer socios de mucha envergadura para perforar pozos que son extremadamente caros.
PERFIL
Nombre: Miguel Galuccio
Nació: Paraná (Entre Ríos, Argentina)
Edad: 46 años
Otros datos: Ingeniero en petróleo
Experiencia petrolera
Desde mayo de 2012 Miguel Galuccio es el presidente y CEO de YPF, la compañía líder de energía en Argentina, donde su gestión ha logrado los mejores resultados en la producción de petróleo y gas de los últimos 10 años y un acuerdo con Chevron, la segunda petrolera más importante de los Estados Unidos, para desarrollar el yacimiento de Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén. Es ingeniero en petróleo egresado del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA). Inició su carrera profesional en YPF, donde tuvo varios cargos de responsabilidad, incluso en el exterior. Renunció en 1999 a los pocos meses de la adquisición de la petrolera argentina por parte de la española Repsol, debido a sus diferencias con el nuevo modelo de gestión de la compañía. Este año fue nombrado CEO del Año de los BRAVO Business Awards y tiene más de dos décadas de experiencia internacional en la industria petrolera. Fue presidente de Schlumberger Production Management y responsable de su creación y ha dirigido equipos en Estados Unidos, Oriente Medio, Europa.
Un estudio de la ARU señaló que en los últimos años los precios de los combustibles en Uruguay "han mantenido una tendencia algo dispar con el precio del petróleo a nivel internacional". Esa tendencia en particular ha hecho que en el caso del gasoil, la diferencia con el precio de paridad de importación (que incluye impuestos y márgenes de comercialización, es decir el combustible puesto en el surtidor de la estación de servicio) llegó a valores muy importantes.
En ese sentido, agregó que desde mediados de 2008 a octubre de 2014, el precio del gasoil fijado por Ancap fue superior en $ 4,60 por litro al de paridad de importación.