Cristina Kirchner aceleró las polémicas leyes exigidas por China como premio por haber engrosado las alicaídas reservas del Banco Central a través de varios swap de intercambio de moneda.
En la última sesión del año el kirchnerismo aprobó el proyecto para crear una base espacial en la localidad neuquina de Bajada del Agrio, que ya empezó a construirse y Gobierno chino controlará por 50 años.
El proyecto estaba frenado hace meses en medio de denuncia sobre presuntos usos militares de la instalación, pero entró en el último temario de sesión y luego de que el gigante asiático cumpliera con algunos envíos de divisas que tranquilizaron a la Presidenta, que está terminando el año con más que al inicio.
Misterioso convenio
Pero no conforme con este gesto, la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado se reunirá mañana a las 10.30 para aprobar un misterioso convenio de intercambio comercial, que ingresó durante la tarde y los senadores ni siquiera habían leído hasta esta noche.
"Nos llegó en medio la sesión el proyecto y el llamado para sesionar mañana a primera hora. Ni sabemos de que se trata", le confesó a LPO el socialista Rubén Giustiniani, miembro de la comisión de relaciones exteriores.
El tratamiento del proyecto tiene un destino incierto. La sesión convocada para el 29 para sancionar la ley para la elección de parlamentarios de Mercosur es especial y por lo tanto no sería posible. Habría que llamar a otra para ese día, o para el día siguiente.
Está claro que Pichetto se enteró durante la tarde de la novedad, cuando todavía el Senado trataba la polémica creación de la base espacial, que ya comenzó a construirse con aval de la Comisión nacional de Actividades Espaciales (CONAE).
Durante el debate en Comisión el secretario general de la Conae, Félix Menicocci, negó que la base pueda ser militarizada por los chinos, pero el proyecto prevé una exención impositiva de 50 años, tiempo suficiente para que los asiáticos planten bandera.
Durante ese tiempo Argentina no podrá interrumpir “las actividades normales” de la estación espacial y los empleados de China que trabajen en Neuquén se regirán bajo la legislación de Pekín, donde los salarios son menores y las jornadas más agotadoras.
En tanto, el gobierno chino “mantendrá indemne a la Argentina de toda obligación que surgiere de reclamos de cualquier naturaleza”. La oposición lo cuestionó: “Es una cesión de soberanía. Se instalan por 50 años y la Argentina no puede entrar, controlar ni ver lo que está ocurriendo”, protestó la puntana Liliana Negre de Alonso.
El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Ruperto Godoy (FpV) minimizó el tema. “La base servirá para monitorear y hacer un seguimiento de los satélites que van a acceder a la Luna. Los chinos pensaron en Argentina, porque era un lugar que les permita una mayor visibilidad para los satélites”, simplificó.
El oficialismo aprobó anoche en el Senado, con 36 votos a favor y 27 en contra, el proyecto que avala el acuerdo entre el Gobierno y la República Popular China para la instalación de una estación espacial de exploración lunar en la localidad neuquina de Bajada del Agrio. Además se validó una exención impositiva en diferentes aspectos que se extenderá por 50 años.
Entre los impuestos que no pagará la China Harbour Engineering Company (CHEC), la empresa que lleva adelante la construcción, estarán el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y las obligaciones a la importación de los elementos tecnológicos que requiera.
En tanto, en octubre pasado el Gobierno provincial tomó una medida similar cuando mediante el decreto 2.336/14 -firmado por el gobernador, Jorge Sapag, y el ministro de Economía, Omar Gutiérrez- establecieron eximirla del Impuesto a los Sellos.
La aprobación del proyecto en el Senado fue custionada por la oposición y los legisladores neuquinos votaron divididos: el oficialista Marcelo Fuentes y la senadora del MPN Lucila Crexell se pronunciaron a favor, mientras que el peronista federal Guillermo Pereyra lo hizo en contra.
La instalación de esta base se da, según el proyecto, "en el marco del programa chino de exploración de la luna, suscripto en la Ciudad de Buenos Aires el 23 de abril" pasado.
La peronista federal Lilian Negre de Alonso sostuvo que el acuerdo "es una cesión de soberanía" y advirtió que "se instalan por 50 años y la Argentina no puede entrar, controlar ni ver lo que está ocurriendo" en esa plataforma.
Por el contrario, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, el oficialista Ruperto Godoy indicó que "ha habido información muy clara" sobre el convenio y que "no hay nada para ocultar".
El secretario de Gestión Pública de la provincia, Rodolfo Laffitte, explicó al respecto que "lo que necesitaba la aprobación del Senado era la aprobación de la exención impositiva, que es un tema nacional"
"Lo que me llama la atención de algunos senadores es que podrían haber ido a ver la estación, a Las Lajas, y después la ignorancia que existe en cuestiones que tienen que ver con los beneficios que tiene para la Argentina", afirmó el funcionario. "Como por ejemplo la novedad de que se está construyendo una línea eléctrica que cuesta 8 millones y que va a pasar al EPEN para que pueda extender sus servicios a diferentes poblaciones, como es el caso de Chorriaca", agregó.
"Yo comprendo que la gente tenga dudas, pero no los legisladores que tienen el proyecto en la mano", afirmó Laffitte en declaraciones a LU5.