El Bitcoin volvió a estar en la primera plana de los medios internacionales con el anuncio de que Microsoft permitirá realizar transacciones con su moneda. La decisión del gigante tecnológico hace que el dinero virtual siga cosechando adeptos y se consolide como una alternativa real a las divisas actuales. Si bien aún existe mucha desconfianza en apostar por el dinero electrónico, esta nueva modalidad puede resultar una de las más seguras del mundo.
Satoshi Nakamoto es un nombre clave a la hora de hablar de Bitcoin. Esta persona, o grupo de personas (nunca se conoció su identidad), fue quien desarrolló el protocolo Bitcoin en 2008 y lanzó la red en 2009, mediante la cual se podían hacer transacciones digitales sin necesidad de acudir a una autoridad bancaria autorizada.
Desde 2009 a la actualidad, el Bitcoin ha pasado por distintos estados, desde cotizar como una de las monedas más fuertes del mundo hasta sufrir bajas considerables por supuestos ataques de hackers a distintas entidades bancarias que lo comercializaban. Pero parece que el cierre del 2014 puede significar el despegue definitivo de la moneda.
Esto se debe a la confianza que empieza a generar la moneda en las grandes empresas y algunos países. Dos ejemplos claros de esto son Microsoft y Japón. La multinacional tecnológica autorizó que algunas de sus operaciones comiencen a permitir el uso del Bitcoin como moneda de pago en los Estados Unidos y si todo sale bien se extenderá por el resto del mundo.
El propio Bil Gates ya venía apoyando la iniciativa de Bitcoin y hace unos meses aseguró que era mejor que cualquier otra moneda. Por su parte, Japón se encuentra trabajando en la regulación de esta criptodivisa para evitar posibles fraudes o robos. La idea del Imperio del Sol Naciente es clasificar la moneda como un bien similar a metales preciosos como el oro y la plata.
Otro punto importante del Bitcoin es su fórmula para eliminar el volumen de transacciones que intenta inflar la actividad y de esta manera evitar que el valor del mismo suba de manera injustificada. Además, la posibilidad de realizar pagos o transferencias entre personas de todo el mundo sin la necesidad de pasar por intermediarios, despierta el interés de muchos freelancers.
Con estas muestras de confianza, el público en general empieza a mirar con mejores ojos al Bitcoin. De todas maneras aún resta mucho por hacer ya que, a pesar de todo, el mercado todavía es mucho más especulativo que real y no son tantos los productos y servicios que se pueden adquirir con divisa virtual.
