Los ministros de Energía de Estados Unidos, México y Canadá trazaron el lunes una "nueva ruta de navegación" para el sector con un acuerdo de quince puntos que incluye el intercambio de información y reconocen la necesidad de trabajar en seguridad energética y políticas medioambientales.
Washington fue la ciudad encargada de acoger la primera reunión en siete años de los titulares de Energía de los tres países de América del Norte, que firmaron un memorándum de entendimiento.
"Uno de los mayores frutos de la reunión son los 15 puntos. Estos 15 puntos constituyen una ruta de navegación para que la región de centroamérica se integre más desde el punto de vista energético y, particularmente, para que nuestros pueblos ganen en eficiencia y seguridad energética", destacó el secretariomexicano de Energía, Pedro Joaquín Coldwell.
En una rueda de prensa en el Departamento de Energía, los tres ministros se refirieron a la reforma energética de México para abrir el sector a la inversión privada y que el secretario de Energía de Estados Unidos, Ernes Moniz, tildó de "impresionante".
Al respecto, Coldwell expresó su deseo de que los intercambios comerciales entre las empresas de los tres países se incrementen tras la reforma, que provocó en el país cambios constitucionales aprobados en 2013 a pesar del rechazo de la oposición de izquierda.
En este contexto de cambio del sector de la energía en México, los tres titulares de Energía coincidieron en la necesidad de intercambiar datos para poder trabajar en común.
"Nuestros datos no siempre son coherentes o disponibles", reconoció Moniz, quien cree que esta política de transparencia permitirá avanzar más en las reuniones que los tres ministros prometieron celebrar con más frecuencia, de forma que 2015 "sea el tiempo de serios esfuerzos y acciones".
Durante la rueda de prensa, los periodistas preguntaron por las declaraciones de la semana pasada del primer ministro canadiense, Stephen Harper, quien dijo que su país se comprometería a un programa de reducción de gases efecto invernadero en los sectores de petróleo y gas sólo cuando lo hiciera Estados Unidos.
Moniz respondió que "reducir las emisiones de carbono es bueno para la economía y para el medio ambiente", y recordó el plan que desveló en junio el presidente Barack Obama para reducir en un 30 % las emisiones de carbono de las centrales termoeléctricas del país para 2030.
"Hemos hecho reducciones sustanciales", insistió el secretario estadounidense.
Por su parte, Rickford consideró el carbono como "un desafío, una oportunidad y una solución que debe de encontrar Norte América", y destacó que en la reunión trilateral también se abordó la necesidad de avanzar en energías renovables.
Para avanzar en ese terreno, el ministro canadiense ofreció la colaboración de su país, que cuenta con uno de los sistemas de producción de electricidad más limpio del mundo, ya que el 79 por ciento de su energía no proviene de gases de efecto invernadero.
Los periodistas también preguntaron a los titulares de Energía por el precio del barril de crudo, que con un precio de 55,91 dólares sigue en caída libre con unos niveles que no veía en más de cinco años.
A la vista de estos datos, Moniz afirmó que "las proyecciones para el próximo año es que la tasa de crecimiento de producción de petróleo se reducirá un poco", pero puntualizó que en Estados Unidos la producción seguirá creciendo, aunque con menor intensidad.
México, cuyas finanzas públicas dependen en un 35 por ciento de los ingresos petroleros, "tiene el presupuesto para 2015 garantizado y no representa un problema de ingresos o de incremento del déficit", según Coldwell.
Tras el fin del encuentro, Coldwell prometió que, para la próxima reunión trilateral, los equipos de los tres países tendrán "resultados concretos" para impulsar la hoja de ruta que hoy han trazado.