Un cruce de denuncias de supuesta corrupción y de acoso sexual entre el presidente de la petrolera estatal boliviana YPFB, Carlos Villegas, y funcionarios de la empresa provocó hoy un escándalo en esta compañía insignia del Estado boliviano.
La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) informó este viernes en un comunicado de que "desbarató un clan de familiares y amigos que conformaron varias empresas para favorecerse con licitaciones que fueron solicitadas por la Unidad de Comunicación".
Dos funcionarios de la petrolera y cuatro personas del sector privado están detenidas en la Fiscalía de La Paz por supuesto uso indebido de influencias en razón del cargo y enriquecimiento ilícito con afectación al Estado, según la nota de YPFB.
El fiscal Leopoldo Ramos indicó a los medios que investiga supuestas irregularidades en la adjudicación de contratos de publicidad y organización de eventos que habrían provocado un daño económico al Estado por una suma de entre 360.000 y 430.000 dólares.
Una de las denunciadas es la exjefa de prensa de YPFB Selva Camacho, que en su momento fue una de las colaboradoras cercanas de Villegas en diferentes instituciones y ha sido acusada de tener relación familiar con empresas que se favorecieron con contratos.
Camacho rechazó todas las denuncias y el jueves en dependencias policiales declaró a los medios que toda la acusación se trataba de una venganza del presidente de la petrolera estatal YPFB en su contra y lo acusó de haberla acosado sexualmente varias veces.
Al respecto, Villegas replicó, por medio de otro comunicado, que ya en septiembre de este año presentó ante un juez una denuncia en contra de Camacho por los delitos de difamación e injurias por haber realizado con anterioridad esas mismas afirmaciones.
Villegas dijo que las acusaciones de Camacho dañan su "reputación, honor y honra afectando no solamente a lo personal en cuanto a mi núcleo familiar, sino también profesional e institucional, dadas las funciones ejecutivas que me tocan cumplir".
El presidente de la estatal petrolera, que se encuentra fuera del país, señaló asimismo en su comunicado que "en todo tiempo y lugar" su conducta "fue respetuosa" dentro del marco de los valores sociales y culturales en los que se desenvuelve.
Villegas ocupa la presidencia de YPFB desde enero del 2009, cuando reemplazó al político Santos Ramírez, quien está en prisión desde entonces por un grave escándalo de corrupción.
Antes de ser nombrado presidente de YFPB, Villegas también fue ministro de Hidrocarburos y Planificación.
Desde que en 2006, el presidente Evo Morales nacionalizó el sector petrolero, YPFB tiene un control casi monopólico del sector de los hidrocarburos en Bolivia, si bien permite bajo su supervisión las actividades privadas en la exploración y la producción de gas y petróleo
Según la jueza los delitos en los que incurrieron fueron asociación delictuosa, enriquecimiento ilícito con afectación al Estado y cohecho.
En la audiencia de medidas cautelares que duró más de ocho horas, la jueza determinó la medida preventiva que fue solicitada por el fiscal Leopoldo Ramos.
Bravo y Bell Comunicaciones, Colibrí Agencia Publicitaria, Omnimedia, Comunicación y Eventos Corporativos, Structura, son las empresas implicadas en la red familiar de corrupción.
Camacho, exfuncionaria de Almacenes de YPFB Chaco, guardará detención en el penal de Palmasola, en Santa Cruz, según la resolución que fue leída por la jueza Delgadillo.
Para Luis Alejandro Bell, hijo de Camacho, se dispuso la detención en el penal de San Pedro. Él era representante legal de la empresa Bravo, identificada como una de las beneficiadas en este caso. En tanto, Yamile Bravo, quien es propietaria de esta compañía, guardará detención en el penal de Miraflores.
Erika Rojas, propietaria de la empresa Colibrí en Santa Cruz, fue trasladada al penal de mujeres de la zona de Obrajes. Otro implicado, Guido Alarcón, fue enviado a San Pedro la pasada semana. En la audiencia de ayer, los acusados denunciaron la participación de otros funcionarios de YPFB en el caso.
Camacho denuncia
Selva Camacho, una de las acusadas de organizar un clan de corrupción en YPFB, denunció que la esposa de Carlos Villegas, presidente de YPFB, es jefa de Gabinete del Ministerio de Culturas, dato que fue confirmado por el titular de este despacho, Pablo Groux, quien descarto que se trate de nepotismo.
"Ella (Iris Villegas) es la jefa de gabinete del ministro Pablo Groux. Inclusive hay un convenio que Yacimientos firmó con el Ministerio de Culturas para que toda la plata de responsabilidad social la maneje esta señora. Hay nepotismo", denunció Camacho.
Groux replicó que "no se encuentra esa figura (nepotismo) en este nivel".
"La señora Villegas es jefa de gabinete en mi despacho desde que yo asumí esta responsabilidad. Cumple eficientemente su trabajo y no tiene ninguna incidencia con lo que pueda significar Yacimientos", aseguró Groux.