Un informe de la revista británica The Economist asegura que Gobierno podría afrontar "una inflación galopante", "una crisis de pagos" y una "revuelta popular" antes de las elecciones presidenciales del año próximo.
Según el prestigioso semanario británico, Cristina Kirchner corre "el riesgo" de afrontar ese escenario económico en 2015 y deberá "tomar medidas" antes de los comicios.
En su informe "El mundo en 2015", que incluye las previsiones políticas y económicas para el año próximo, The Economist estima un crecimiento del Producto Bruto Interno del 1,9% y una inflación del 26,5% anual en el país.
En ese marco, la revista pronosticó que "es probable que el próximo presidente sea otro peronista" y advirtió que el nuevo gobierno tendrá poco margen de acción además de intentar "estabilizar la economía" y trabajar "hacia un renovado acceso a los mercados internacionales, cerrados desde el default de 2001".
La respuesta no se hizo esperar. Durante su habitual conferencia de prensa en la Casa Rosada, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich , descalificó el crítico panorama para la economía del país planteado para 2015 por el semanario británico, al que calificó como una "una usina conservadora pagada por el sistema financiero internacional" que procura "denostar a la Argentina".
Además, argumentó que el país tendrá para el próximo año "una menor demanda de dólares" producto de una "proyección de deuda decreciente", además "del precio y la sustitución de importaciones de energía", por lo que Argentina "tiene solidez desde el punto de vista macroeconómico".
DyN
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, descalificó ayer el crítico panorama para la economía argentina que proyectó, para 2015, el periódico británico “The Economist”. La publicación auguró, en un informe de previsiones, que la Argentina enfrentará riesgos de una “inflación desenfrenada”, y de conflictos sociales. El funcionario, calificó al periódico como “una usina conservadora pagada por el sistema financiero”. “Siempre pretenden denostar a la Argentina, pero el país tuvo una estrategia firme de desendeudamiento equivalente a casi U$S 44.000 millones, a partir del superávit de la balanza comercial”, respondió, ante la prensa en la Casa Rosada.
En su reporte “The World in 2015”, que reúne previsiones políticas y económicas, “The Economist” afirmó que la Argentina se expone al peligro de revueltas populares y a una crisis de pagos, en relación a la deuda en default que mantiene con los holdouts. Capitanich refutó los pronósticos al afirmar que la economía nacional tendrá, en 2015, una proyección de deuda decreciente. Además, dijo que la Argentina cuenta con solidez macroeconómica”. “En el presupuesto del año que viene, la inflación prevista es del 15,6%. Se prevé un crecimiento del PBI del 2,8%”, contestó.
El diario británico “The Economist” analizó el escenario argentino para 2015 y auguró que el país podría tener "una crisis de pagos" e "inflación desenfrenada" y que podría sufrir "revueltas populares".
El duro pronóstico fue publicado entre el conjunto de previsiones políticas y económicas del periódico, donde repasa -en el caso argentino- los desafíos para el último año de gobierno del kirchnerismo.
Allí, remarca que la gestión de Cristina Fernández de Kircnher, tendrá el desafío de articular medidas con el objetivo de que los vencimientos de deuda no "sean dolorosos para la población".
Además, estima un crecimiento del Producto Bruto Interno del 1,9% y una la inflación del 26,5% anual, contra el 15% que prevé el Gobierno en su presupuesto.
The Economist habla de "una docena de años de dominio de la izquierda" en Sudamérica. Y analiza que el año próximo, las miradas estarán puestas en el país y quizás en Venezuela.
Vaticina que los argentinos elegirán un gobierno "más pragmático y moderado" para poner fin a los años de las reglas "populares y nacionalistas". Y que habrá tres vías principales donde irán a parar los votos, lideradas por los candidatos peronistas Sergio Massa y Daniel Scioli, además de Mauricio Macri.
Y la Presidenta apoyará inicialmente a su propio candidato, "que tal vez sea el ministro Florencio Randazzo", pero que finalmente "logrará un acuerdo con alguno de los principales postulantes para preservar una cuota de poder".
Además, indica que el desafío del vencedor de las elecciones de 2015 será una "larga carrera de disputas" con los holdouts, y de modificar los subsidios y los controles a las importaciones.
La prestigiosa revista económica The Economist elaboró un informe llamado "The World in 2015" (el mundo en 2015), en el que se hacen previsiones políticas y económicas de diversos países. Y afirma que para Argentina las dificultades serán muchas. Aunque el Gobierno ya se atajó y aseguró que el informe es subjetivo.
La nota dice que el kirchnerismo deberá afrontar "el riesgo de una inflación galopante”, además de buscar equilibrio, hasta el final del mandato de Cristina Fernández de Kirchner, entre dos posibles acontecimientos: "revueltas populares" y una "crisis de pagos", en alusión a los fondos buitre.
The Economist ve el panorama político revuelto, con una oposición confusa que hará que gane el peronismo nuevamente. Pero el próximo gobierno, dice, tendrá un "pequeño" campo de acción para trabajar, más allá de "estabilizar la economía" y allanar el camino "hacia los mercados internacionales, cerrados desde el default de 2001".
La previsión estima que el crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) será de 1,9%, y que el balance de cuentas del Gobierno, medido en términos de PBI, será de -1,9%. Además, la inflación alcanzaría el 26,5% anual.
“Usina conservadora”
Esta mañana el efe de Gabinete, Jorge Capitanich, descalificó el informe, al definir al medio de comunicación como "una usina conservadora pagada por el sistema financiero internacional" que procura "denostar a la Argentina".
Además, en su habitual conferencia de prensa en la Casa Rosada, argumentó que el país tendrá para el próximo año "una menor demanda de dólares" producto de una "proyección de deuda decreciente", además "del precio y la sustitución de importaciones de energía", por lo que Argentina "tiene solidez desde el punto de vista macroeconómico".
GDP growth:1.9%
GDP per head: $10,980 (PPP: $21,260)
Inflation:26.5%
Budget balance (% GDP):-1.9
Population:43.1m
The Peronist government of Cristina Fernández de Kirchner is at risk from runaway inflation, a balance-of-payments crisis and popular revolt before it reaches the October election. The measures needed to avoid this will be painful for the populace—and anathema to the government’s own ideologues. The next president is likely to be another Peronist, but will have little option other than to stabilise the economy and work towards renewed access to international capital markets, closed since the 2001 default.