Por Ismael Bermúdez.
En los últimos días, desde el Gobierno y también desde empresarios y sindicalistas oficialistas, distintos voceros salieron a descalificar los cálculos de inflación que elaboran las consultoras privadas y que oscilan en torno del 40% anual. “Es un dibujo”, fue uno de los argumentos más utilizados.
Como contrapartida, el oficialismo puso en marcha una maquinaria de difusión para instalar la idea de que la inflación real “se ubica en torno del 24%”, como dijo en un momento el secretario de Comercio, Augusto Costa.Sin embargo no tuvieron en cuenta que las mediciones oficiales que realizan las oficinas de estadísticas provinciales registran que en los últimos 12 meses los precios minoristas tuvieron un incremento promedio que se mueve entre el 38,1% y 43,4%, según el caso.
Se trata de las mediciones de la Direcciones de Estadísticas y Censos de la Ciudad de Buenos Aires, de San Luis, de Neuquén y de Tierra del Fuego que realizan sus relevamientos de precios en forma independiente del INDEC.Un aspecto que los funcionarios kirchneristas no tuvieron en cuenta es que el recurso de utilizar los índices oficiales provinciales frente al descrédito del INDEC, no fue una idea de la oposición, sino del actual ministro de Economía Axel Kiciloff antes de ser funcionario nacional.
Como director del Centro de Estudios para el Desarrollo Argentino (CENDA), Kiciloff cuestionaba los índices del INDEC y confiaba en los números oficiales de las provincias, que siempre fueron muy similares a los de las consultoras privadas que ahora critica desde su nuevo cargo. A tal punto, que denominó a ese índice IPC-7 Provincias porque tomaba en cuenta las cifras de las direcciones oficiales de estadísticas de Jujuy, Neuquén, Entre Rios, Chubut, Salta, La Pampa y Rio Negro.
Después, al asumir como Secretario de Política Económica del Ministerio de Economía, Kiciloff discontinuó la elaboración y difusión del IPC 7 Provincias en su centro de estudios.
Además, por presión del Gobierno, hubo varias provincias que dejaron de hacer sus propias mediciones sobre el comportamiento de los precios y se subordinaron a los relevamientos del INDEC.
En cambio, mantuvieron sus relevamientos San Luis y Neuquén y se agregaron Tierra del Fuego y Ciudad de Buenos Aires con índices muy convergentes entre si y muy similares a las de las consultoras privadas.
Las mediciones provinciales, como las de las consultoras, registran para los últimos meses una desaceleración del aumento de los precios que pasaron de subas promedio del 3,5% en los primeros meses de 2014, tras la devaluación brusca del peso, a aumentos de casi el 2% en los últimos tres meses.
Sin embargo, como venían acumulando alzas mayores a las que informaba mensualmente el INDEC, mantienen registros que duplican las cifras que publica el Instituto Nacional.
Este cambio de tendencia en el comportamiento de los precios fue atribuido por los analistas a la recesión de la economía, como consecuencia de la caída del poder de compra de la población. Y también al retroceso del dólar marginal.
Mientras tanto, la polémica sigue instalada. Desde el Gobierno cuestionan que las consultoras no dan información sobre cómo elaboran sus mediciones y ponen en duda su capacidad de relevamiento y la transparencia de sus resultados.
Una de estas consultoras es la de Graciela Bevacqua, ex técnica del INDEC, quien registró en noviembre una suba de 1,5%. Así, la variación en once meses fue del 36,2% y la interanual llegó al 40,2%.
Sin embargo, al mismo tiempo el INDEC también se niega a hacer más transparente su tarea: no da a conocer los números desagregados de su medición, no difunde la evolución de los precios de las distintas regiones como había prometido, ni publica la lista de precios medios de los principales alimentos y artículos de limpieza. Tampoco hizo el empalme de la nueva serie con la anterior.
Mucha de esta información era de acceso público antes de la “intervención” política del INDEC, en 2007, a manos del entonces secretario de Comercio Guillermo Moreno.
Los cuestionamientos del Gobierno contra las mediciones alternativas de inflación también apuntaron contra el Congreso. A través de legisladores oficialistas se impulsó un pedido para que la oposición en Diputados deje de publicar el llamado “IPC Congreso” que refleja el promedio de cálculos de inflación que elaboran las consultoras privadas. Estas consultoras habían sido multadas por Moreno antes de su renuncia.
Los diputados nacionales de la oposición continuarán informando mensualmente el dato de inflación conocido como IPC Congreso. Así lo confirmó ayer la diputada de Unión Por Todos, Patricia Bullrich.
“Como vamos a seguir presentando el IPC Congreso y no aceptamos la censura Kirchnerista, preparándonos para la presentación del IPC Congreso de diciembre, el equipo de Comunicación realizó un video de comparación con los números del INDEC”, sostuvo la legisladora a través de un comunicado.
El video está publicado en YouTube y compara el precio del kilo de pan que estaba a 18 pesos en noviembre de 2013 con el valor de 26 pesos que registró en noviembre de este año. “La variación interanual es de 44%”, precisa.
En función de esta variación, cuestiona la veracidad del IPC Nacional Urbano que publica el INDEC y que suele registrar un aumento de precios que es apenas la mitad del índice que la oposición elabora en base al promedio de las mediciones de las consultoras privadas.
“¿Con cuánto llenás la heladera Kicillof?”, “¿Cuánto te cuesta hoy llenar el tanque de tu auto Capitanich?”, son algunas de las preguntas que el video de Patricia Bullrich lanza a los principales funcionarios del Gobierno, habitualmente encargados de defender los índices de inflación oficiales.
La ratificación de Bullrich llegó después que legisladores oficialistas pidieron que se deje de difundir el IPC Congreso. “Los diputados Kirchneristas Carlos Heller y María del Carmen Bianchi, con sus afirmaciones muestran que quieren censurar la palabra de los diputados nacionales que opinamos distinto”, advirtió la legisladora de Unión por Todos.