El proyecto Corani, de Bear Creek, es un ejemplo de lo que una empresa minera puede realmente aportar al desarrollo de una comunidad.
Esta minera canadiense ha ido más allá de lo que estamos acostumbrados a ver en materia de Responsabilidad Social, y ha logrado algo casi impensado para nuestro país: que productores de comunidades campesinos creen y comercialicen ropa inteligente.
El proyecto estuvo pensado desde un inicio: no sólo bastaba con capacitar a los campesinos en el cuidado de la alpaca, prácticamente la única fuente de ingreso de la zona. O enseñarles a las señoras a tejer. Crearon un programa integral, donde Puno estará en la vidriera del mundo.
La lana de alpaca es un producto altamente demandado por países del primer mundo. El Perú cuenta actualmente con el 87% de la población mundial de alpacas, países como Estados Unidos, Nueva Zelanda, China, Australia y hasta Turquía ya están empezando a criar alpacas, utilizando alta tenología.
El programa de Bear Creek inició capacitando a los campesinos en el cuidado de las alpacas, en evitar la mortalidad de las crías, que hoy es 0%, en la selección de las fibras, y se capacitó a las mujeres en la clasificación de la fibra de alpaca y se buscó el apoyo externo para la comercialización de la fibra, mediante un consorcio (PIACENZA).
ROPA INTELIGENTE
El mercado de la ropa inteligente se encuentra actualmente en crecimiento y se considera que alcanzará los US$53 billones, aproximadamente, en el 2019. Este tipo de indumentaria es altamente demandada en sectores como salud, deporte y hasta en la moda.
El elevado costo de los servicios de salud en los países desarrollados hace que sea muy importante conseguir formas alternativas de monitoreo y control de la salud. La investigación actual en el mundo desarrollado se centra en integrar sensores en la ropa, para así obtener parámetros fisiológicos que permitan determinar el estado de salud de la persona. Los sensores de la ropa son capaces de medir la presión sanguínea, la frecuencia de latidos del corazón, el ritmo de la respiración, el grado de estrés de la persona, etc. Con la información así obtenida se puede determinar el estado de salud y hacer un monitoreo general.
¿Pero cómo integrar a estos campesinos, a la fibra de alpaca, la plata, en este nuevo mercado?
La ropa inteligente que mide parámetros fisiológicos y los transmite para su análisis/visualización a una computadora/smartphone. Esta ropa está basada en un textil convencional de fibra de alpaca que incluye hilos/fibra de alpaca recubierta con plata/oro, sensores y electrónica. “Nuestro producto está dirigido al mercado de la tecnología de lujo, el cual se está expandiendo. Nadie ha presentado un textil inteligente fabricado con fibra de alpaca antes”, explica Andrés Franco Longhi,vicepresidente de Desarrollo Corporativo de Bear Creek.
Lo que se busca con esta tecnología es recubrir la fibra de alpaca con plata, que es un material antiséptico por naturaleza. Esto hará un nuevo material flexible, gracias a la fibra de alpaca, y un excelente conductor, gracias al metal.
“Se lograría un hilo compuesto (fibra & plata) que heredaría la superior flexibilidad de la fibra y las propiedades eléctricas y térmicas del metal. La integración de este hilo compuesto con los hilos naturales de alpaca sería superior a integrar únicamente hilos de plata pura en el tejido natural y el producto resultante sería más suave al tacto, de mejor apariencia y más liviano”, explica Franco Longhi.
La plata es antiséptica, por lo que el tejido compuesto sería antibacterial. Además, de incrementar el valor del textil.
La investigación científica de las propiedades físicas de la fibra de alpaca es muy escasa en el mundo. “Se han recubierto hilos naturales con metales antes, pero nadie ha recubierto la fibra de alpaca con plata u oro. Seríamos los primeros en el mundo en hacer este tipo de productos y el valor de nuestro producto se incrementaría en comparación a un textil de alpaca convencional”, cuenta el ejecutivo.
Este novedoso emprendimiento beneficia a los pobladores que producen la fibra, ya que recibirán más ingresos por la venta del producto final: ropa inteligente con fibra de alpaca recubierta con plata.
Este proyecto de Responsabilidad Social incrementa el valor del producto, y en consecuencia el ingreso de los productores de la fibra, que viven en condiciones de extrema pobreza. El proyecto tiene la posibilidad de efectuar controles de salud, no invasivos que orienten a diagnósticos de mayor precisión.
“Esta es nuestra principal fortaleza: otros competidores en el mercado de ropa inteligente hacen esto por negocio puro. Nuestro caso involucra ayuda social”, afirma Franco, quien asegura que ya existe un mercado en expansión para la ropa inteligente y la tecnología de lujo. “La gente de altos ingresos se preocupa mucho por su salud y en los países del primer mundo se requieren alternativas más baratas para el control médico”.
CORANI
Corani cuenta con reservas probadas y probables por 270 millones de oz de plata, 3.1 mil millones lb de plomo y 1,7 mil millones lb de zinc. El costo de inversión estimado es de US$ 574.000.000, una vida útil de 23 años, y entraría en operaciones en 2017.
Bear Creek Mining es una compañía canadiense enfocada en la exploración y desarrollo de plata en Perú, país en el cual ha estado presente desde 2000. Entre sus principales propiedades peruanas destacan los proyectos de plata Corani y Santa Ana, en Puno. La producción en Corani, su proyecto polimetálico en Perú, comenzaría el 2016 y la firma espera alcanzar el máximo nivel de 14Moz de plata en el 2016. Además, la minera posee varios proyectos al principio de la exploración, incluyendo La Yegua, Tassa y Sumi. Sumi es un proyecto de exploracion aurífera donde actualmente se está realizando un programas de perforación. Bear Creek Mining tiene su sede en Vancouver, Canadá.