Los observadores que participan de la COP20 han pedido se establezcan reglas claras relacionadas al “financiamiento climático”, luego de que se estallara el escándalo Japón.
* Declaraciones de las ONG, Sindicatos y Movientes de todo el mundo
Los observadores que participan de las discusiones climáticas de las Naciones Unidas en Lima han hecho un llamado para establecer reglas sólidas y claras relacionadas al “financiamiento climático”, luego de que se suscitara un escándalo en donde Japón está exigiendo fondos para una central eléctrica de carbón como “verde”.
La Conferencia de las Naciones Unidas está considerando ambas reglas generales para el reporte del financiamiento climático, lo cual también podría encaminar al nuevo “Fondo Verde para el Clima (GCF)” con el fin de garantizar que sus fondos no sean invertidos en proyectos que puedan agravar la situación del cambio climático, como centrales eléctricas a base de carbón.
Esto sigue un impulso de las personas alrededor del mundo, que comenzó el pasado mayo, con el objetivo de garantizar que el Fondo Verde para el Clima contenga reglas sólidas para detener el “financiamiento climático” hacia proyectos que contaminan el ambiente.
Liderado por organizaciones en países en vías de desarrollo, la campaña hace un llamado para la elaborar la “lista de exclusión” o lista de proyectos que no pueden recibir fondos debido a que no están alineados con los objetivos de los fondos. Más de 250 organizaciones firmaron una carta dirigida a la Junta del Fondo Verde para el Clima.
“Nuestra demanda es clara, el financiamiento de combustibles fósiles y energías dañinas a través del Fondo Verde para el Clima es inaceptable. Está básicamente en conflicto con el mandato emitido por el Instrumento Rector para el Fondo Verde para el Clima, y con los principios de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC),” afirmó Lidy Nacpil, Movimiento del Jubileo Sur –Asia Pacífico sobre Deuda y
Desarrollo.
“Para su próxima reunión en Corea, la Junta debería aceptar la propuesta de la Lista de Exclusión a fin de garantizar que nunca tenga que lidiar con revelaciones embarazosas respecto al financiamiento climático para las centrales eléctricas a base de carbón. Dichas revelaciones podrían destruir la reputación y legitimidad del Fondo,” concluyó Brandon Wu, Analista Senior de Políticas para ActionAid USA.
“Las energías sucias están envenenando el clima y las comunidades locales. Es fundamental que el financiamiento climático se utilice para la ransformación energética en lugar de financiar proyectos de energía ‘sucia’ que agravan el cambio climático. Cientos de movimientos sociales y organizaciones de la sociedad civil de los países en vías desarrollo han exigido que el GCF excluya la energía ‘sucia’ de su financiamiento. Esto es esencial y las reglas deben ser aplicadas a través de la ONU como un todo,” afirma Godwin Ojo, director
de Environmental Rights Action de Nigeria. “Los sindicatos apoyan el uso de fondos públicos en el GCF ya que aceleran la transición hacia una economía más sostenible; y esto es muy al margen de la crisis económica.
No aceptamos que los gobiernos utilicen los recursos de los contribuyentes para objetivos contrarios a aquello del GCF,” comenta Anabella Rosemberg, Oficial de ambiente y salud ocupacional, Confederación Sindical Internacional.
“El carbón es un problema climático, no una solución. Todos los países de la Unión Europea, particularmente Alemania, Francia, y el Reino Unido, debería aprender de este escándalo, y garantizar que las agencias de créditos para la exportación de Europa y a nivel nacional, inversiones y bancos de desarrollo, tengan las reglas puestas en su lugar al 2015, a fin de prevenir futuros financiamientos de proyectos de carbón,” afirma Ruth Davis, Greenpeace
Internacional
“Sabemos cuán efectivo es el financiamiento climático para proteger a las personas más pobres en el mundo de los devastadores efectos del cambio climático y ayudar a empujar la economía mundial lejos de los combustibles fósiles, porque vemos lo que ocasionan día a día en todo el mundo. Sin embargo, las finanzas solo funcionan con reglas claras para garantizar que los países sean responsables y transparentes sobre dónde invierten su dinero,” declara Kelly Dent, Líder de Oxfam Internacional en la CMNUCC COP20, Oxfam Internacional.
“Los fondos para una planta eléctrica a base de carbono no puede denominarse
financiamiento climático, Japón debe dejar de fingir que está ayudando al planeta cuando en realidad está dañando a las personas. Necesita detener todo tipo de financiamiento de carbón y debería ayudar a las personas que se encuentran en mayor situación de pobreza alrededor del mundo, quienes a gritos necesitan energía. Esto podría lograrse a través de un creciente financiamiento en energías renovables en todo el mundo. Esto sería beneficioso para las personas y el planeta. Es clave tener el total apoyo de los ciudadanos japoneses,” declara Yuri Onodera, encargado de la campaña, Amigos de la Tierra.
“No podemos permitir que la industria de combustibles fósiles, cuyos productos son la principal causa del cambio climático, tomen los fondos limitados previstos para responder a los impactos devastadores del cambio climático, especialmente para los más vulnerables, cuyas vidas y medios de subsistencia están siendo afectadas. Se debe priorizar las energías
renovables en la distribución del financiamiento climático, y los combustibles fósiles deben ser excluidos. Es un desafío a la razón que tengamos que plantear este tema con la CMNUCC/GCF en absoluto,” comenta Samantha Smith, Líder de la Iniciativa Global de Clima y Energía de WWF.
"La necesidad para un financiamiento de adaptación no es un requisito futuro, es una situación real para las personas más vulnerables en el mundo. Esto no puede desvirtuarse solo para financiar los proyectos a base de combustibles fósiles que ocasionan el cambio climático,” declara Mohamed Adow, Christian Aid.
Se espera que la Conferencia de Lima aborde el tema de la orientación para el GCF el sábado, y se espera que haya más manifestaciones.
El tema de una “lista de exclusión”, o una lista de proyectos que no deberían recibir fondos climáticos de las Naciones Unidas, será considerado en la próxima reunión de su junta directiva, prevista para febrero de 2015.