Después de que los malargüinos se manifestaran el sábado por la noche a favor de la minería sustentable, en la que participó el intendente departamental Juan Antonio Agulles (PJ), hoy fue el turno de cumplir con un nuevo capítulo impulsado por el diputado José Muñoz (FPV): pedir que se desarchive el expediente de la Declaración de Impacto Ambiental de Hierro Indio para que se envíe nuevamente al Ejecutivo y se la hagan las correcciones correspondientes.
“Nosotros no vamos a bajar los brazos. El desarrollo de la industria minera en Malargüe no lo podemos dejar de lado por nuestras características geológicas. Malargüe tiene la escuela petrolera que ya ha cumplido 50 años de la cual cada año egresan chicos que necesitan trabajar. Lo que nosotros queremos es desarrollar la industria minera sin contaminación y cuidando del recurso hídrico”, señaló Muñoz.
Así, el legislador presentó hoy una nota a Diputados solicitando desarchivar el proyecto minero para que en caso de que prospere la moción, la iniciativa pueda volver a manos del gobernador Francisco Pérez para que haga las modificaciones necesarias antes de que regrese nuevamente a la Legislatura.
La etapa de exploración de Hierro Indio terminó sin el visto bueno en la Cámara de Diputados la semana pasada. La presión de los alvearenses y organizaciones ambientalistas y el arco opositor fueron más fuertes que el intento del Gobierno de introducir sin resistencias la minería en la provincia.
Diputados enterró en el archivo legislativo el proyecto de Hierro Indio con los 28 votos en contra que cosecharon todos los partidos del arco opositor, más tres legisladores oficialistas oriundos de los departamentos más duros contra la minería; el Frente para la Victoria consiguió apenas 16 votos y hubo además una abstención.
Hace poco más de dos meses, el Ejecutivo remitió dos proyectos mineros a la Legislatura, Hierro Indio y Cerro Amarillo; ambos para habilitar la exploración con el objetivo de cuantificar mineral (en uno hierro, en el otro cobre) y saber si son viables económicamente para la explotación posterior.
Pero la avanzada minera naufragó ante la tormenta ciega proveniente desde el Sur mendocino y la impericia a la hora de encarar las Declaraciones de Impacto Ambiental (DIA) y de tomar el pulso al momento político y social.
La DIA de Cerro Amarillo terminó fuera de carrera por falta de información técnica que debía ser incluida obligatoriamente por la Ley de Glaciares, mientras que la DIA de Hierro Indio terminó siendo rechazada por los diputados, y el principal argumento fueron los errores y faltantes de documentación.
Así en casi todos los bloques se admitió que había información que faltaba y este era el eje central de dudas y sospechas, como en el caso de los pobladores del Sur.
En el expediente faltaba el informe del Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (Ianigla), que también fue la clave de la caída del otro proyecto minero, faltaban los informes sectoriales de General Alvear y San Rafael, departamentos que comparten la cuenca del río Atuel (el yacimiento de Hierro Indio está a algo más de dos kilómetros de las nacientes de ese cauce, en el departamento de Malargüe).
También se denunciaba la falta de análisis acerca del impacto en los habitantes de la zona, todos puesteros y en posibles yacimientos de valor arqueológico.
El proyecto de exploración minera Hierro Indio, que la semana pasada recibió el pulgar abajo de la Cámara de Diputados, tendrá una segunda oportunidad de prosperar a partir de 2015. Es que tanto el oficialismo como la oposición apoyarán un pedido de desarchivo.
La idea de que el proyecto no sea cajoneado corresponde al diputado José Muñoz, oriundo de Malargüe (donde se encontraría la mina), quien responde al intendente y busca que el tema no quede en el olvido.
Así, tras el portazo que la oposición en su conjunto le brindó a la idea de que una empresa explore una zona en busca de hierro, Muñoz presentó en Diputados una nota pidiendo el desarchivo del proyecto. Si la moción prospera, el tema será girado nuevamente al Poder Ejecutivo para que se realicen las modificaciones necesarias para su aprobación.
“Muñoz impulsará el desarchivo y la oposición, por lo que me dijeron, no tiene problemas en aprobarlo. Esto significa que el tema no será cajoneado, sino que el gobernador podrá disponer las acciones que crea necesarias para modificar el proyecto y volver a enviarlo”, explicó Jorge Tanús, presidente de la Cámara de Diputados.
No obstante, si bien Hierro Indio tenía media sanción en el Senado, si el Ejecutivo decide volver a enviarlo a la Legislatura el camino que debería hacer la iniciativa arrancaría de cero. Así, el tema volvería a la Cámara Alta y luego a la Baja para su sanción definitiva.
En cuanto a los cambios que Hierro Indio necesita para obtener consenso, desde el PJ indicaron que se pediría un informe sectorial a los departamentos de San Carlos y General Alvear, los 2 que presentaron objeciones, y luego se militaría la información que indica que la mina no utilizaría agua ni complicaría glaciares en su etapa exploratoria. Este camino podría demorar entre 3 y 4 meses, según las fuentes legislativas.
De esta forma, ahora la pelota del único proyecto minero que está bajo análisis en Mendoza vuelve a manos del gobernador Francisco Pérez. Sin embargo, que el año 2015 sea electoral de principio a fin pone en jaque la posibilidad de que la iniciativa vuelva a ser tratada en la Legislatura.
A menos de un semana de que la Cámara de Diputados decidiera archivar el expediente de Hierro Indio, es casi un hecho que este miércoles será desarchivado y enviado nuevamente al Ejecutivo para que corrija las 16 observaciones que se le realizaron a la declaración de impacto ambiental (DIA).
El pedido lo hizo el legislador malargüino José Muñoz y será tratado este miércoles en el recinto. Sin embargo, si llegara a concretarse, no volvería a la Legislatura hasta el año 2015.
Según adelantaron a MDZ diputados de la oposición, avalarán el pedido y no habría inconvenientes para que el expediente vuelva al Ejecutivo, y que la Autoridad Ambiental Minera pueda corregir las 16 observaciones que se le hicieron en la Cámara Baja.
Si bien el centenario partido no acompañó el proyecto durante su tratamiento, Parés aclaró que se debió a la falta de informes. “No se puede aprobar una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) defectuosa”, sostuvo.
Por su parte, el diputado del PD, Rómulo Leonardi, adelantó que, si se pide el desarchivo, no intentarán prohibirlo. “No hay ninguna preocupación de parte nuestra, aunque seguramente este año no va a ser tratado”, señaló.
Sucede que, por una cuestión de calendario legislativo, por más que el expediente de la DIA de la etapa de exploración de Hierro Indio sea desarchivada este miércoles, podría ser tratada nuevamente recién a partir de mayo del 2015.
Debido a la férrea oposición de la ciudadanía de General Alvear, la DIA de Hierro Indio fue tratada en una sesión especial el último viernes. En el departamento sureño se realizaron cortes de ruta y movilizaciones para exigir que los diputados votaran en contra de el proyecto minero.
“El proyecto finalmente se rechazó para que vuelvan a presentarlo cuando esté en condiciones”, señaló luego de aquella sesión el alvearense Gustavo Villegas, legislador de la UCR.
En diálogo con Hacete Cargo (MDZ Radio), Ricardo Jakovcevic, de la Asamblea por los Bienes Comunes de Malargüe, ratificó la oposición al proyecto minero Hierro Indio. En este sentido, dijo que "el informe de impacto ambiental tenía muchos errores legales y técnicos. Uno de los principales es que no toman en cuenta las comunidades que hay en la zona, dice que no hay puesteros, cuando vive gente, crían animales y todo lo que se va a generar va a impactar en ello".
Sobre la reacción de los habitantes de Malargüe en relación al proyecto, denunció que "hay mucha desinformación. En el municipio fomentan generar amenazas personales y laborales, con la gente de la asamblea. Lo peor es que eso está saliendo de la intendencia. Hoy estamos en guerra con Alvear, eso no tiene sentido".
"La Asamblea de Malargue no está en contra de la megaminería, estamos en contra de la megaminería contaminante y saqueante. Cuando hablás con la gente de acá opina lo mismo, lo que pasa es que les mienten, diciéndole que las mineras van a generar trabajo, y resulta que Hierro Indio en la guía decía que los puestos de trabajo que se iban a generar en un principio eran cinco y altamente tecnificados, o sea que ni siquiera se sabía si esa gente capacitada estaba acá en Malargûe", continuó.
Denuncia de aprietes
Sobre la presuntas amenazas, Jakovcevic cargó contra Claudia Martínez, de Desarrollo Humano de la comuna, y afirmó que "por Facebook dice que hay que echar a la gente de la Asamblea de Malargue, pide escraches. Me preocupa que un funcionario haga eso, no por la amenaza en sí, sino por la acción. No es la primera vez que ocurre, por otros temas también me ha pasado".
Por su parte, la funcionaria habló con MDZ y le respondió al referente de la asamblea malargüina. En este sentido, negó que haya existido cualquier tipo de amenazas y aclaró que jamás ha actuado de esa manera. "No es mi forma de trabajar ni se condice con el cargo que ocupo", sostuvo Martínez. "Mientras Jakovcevic dice que lo amenazamos, el Municipio le dio una beca para una de sus hijas", concluyó.
El intendente de General Alvear, Juan Carlos de Paolo, respondió duramente al gobernador Francisco Pérez por las declaraciones que hizo el mandatario una vez que la Legislatura provincial archivó el proyecto Hierro Indio. Entre las explicaciones y las críticas a la oposición y a la comunidad alvearense y sus líderes, Pérez dijo que en General Alvear "hay boliches clandestinos que venden droga y no por eso hacen piquetes".
A través de una carta el intendente sureño le manifestó su "preocupación por las declaraciones públicas realizadas por usted el día viernes 21 de noviembre, en las cuales expresó que existirían, en este departamento, boliches clandestinos que venden drogas". Además, el jefe comunal del PJ, indicó que "informe y fundamente el comentario realizado para que se proceda a verificar la existencia de dichos establecimientos clandestinos por parte de los organismos municipales pertinentes. Ofrezca los elementos necesarios para que se realice la denuncia fundada ante la Justicia Federal".
Ademas, De Paolo le exige al gobernador que "explique a la comunidad de General Alvear las razones por las cuales, tratándose de un delito de acción pública, de carácter federal, por usted conocido, no se han realizado las acciones necesarias para dar fin al mismo a través de los organismos provinciales pertinentes, ni se ha procedido a denunciar la comisión del mismo ante la justicia competente en la materia".
Desarchivar Hierro Indio
Esta nueva arista en medio de la controvertida discusión por la minería, el diputado por Malargüe, José Muñoz, pidió formalmente en la Legislatura que se vote la posibilidad de desarchivar el proyecto Hierro Indio en el recinto. El objetivo sería enviarlo nuevamente al Ejecutivo provincial para que se mejore el expediente y se reparen los errores administrativos que argumentan los diputados que votaron en contra.
La oposición estaría abierta a esta posibilidad, especialmente por las diferentes opiniones internas que hay en el tema. En caso de prosperar, podría enviarse y tratarse a mediados del año próximo en la Casa de las Leyes.
Se trata de un coletazo residual de la controversia por el proyecto minero de Hierro Indio. Tras aquel rechazo legislativo, el gobernador Francisco Pérez expresó con cierto enojo que, en General Alvear, "hay boliches clandestinos que venden drogas y no por eso hacen piquetes". Por esta afirmación, los radicales consideran que el mandatario provincial estaba en conocimiento de un delito -narcotráfico- y no dio constancia a la Justicia, a pesar de tener la obligación de hacerlo como funcionario público.
Pérez expresó aquella frase el viernes pasado, horas después de que la Legislatura mendocina había mandado al archivo el proyecto minero. Sus palabras reflejaban el Pérez en estado natural: el gobernador transparentaba su enojo con los alvearenses, que habían manifestado su contrariedad cortando rutas provinciales. Así, flanqueando en ese momento a un ministro nacional, Pérez desenfundó: "Hay boliches clandestinos que venden drogas y no por eso hacen piquetes".
La frase no quedó al pasar. Fue recogida por el diputado radical Gustavo Villegas, oriundo del departamento sureño, que presentó una denuncia contra el gobernador en la Fiscalía de Delitos Complejos en la tarde de este martes.
“Desde ese momento -es decir, el viernes pasado- hasta la fecha no se realizó ninguna actividad policial o judicial para constatar los dichos de la primera autoridad de Provincia”, aseguró Villegas, a través de un comunicado.
El legislador radical fundamentó su denuncia contra Pérez en que el Código Procesal Penal de Mendoza, en el artículo 329, establece que los funcionarios y empleados públicos tienen la obligación de denunciar los delitos que le constan. Por no haber dado aviso a la Justicia Federal -el narcotráfico se trata de un delito federal-, la pena paa el funcionario está fijada en 6 meses a 2 años de inhabilitación, según el Código Penal Nacional.
Para Villegas, se puede inferir que Pérez sabía de este posible delito y no accionó contra este flagelo, ya que el Estado no habría aportado información a la Justicia. “Pido el auxilio a la justicia para que investigue si el gobernador sabe de la existencia de un delito y no lo está denunciando o, por el contrario, sus declaraciones pudieron advertir a presuntos delincuentes de la investigación que se está llevando adelante. De comprobarse estos hechos, Pérez podría haber cometido algún delito penal”, aseguró el diputado de extracción cornejista.
A la acción penal, el radicalismo la complementó con un pedido de informes para que Pérez explique por escrito por qué dijo aquello. Y se le piden precisiones: que informe la denominación comercial, ubicación y nombre del o los propietarios de boliches clandestinos implicados en sus declaraciones. Además, le pide que detalle las instrucciones impartidas al Ministerio de Seguridad de Mendoza, en relación a los dichos.
La denuncia quedó radicada en la Fiscalía de Delitos Complejos, bajo el número de Expediente 125.088/14.
Tras el fracaso legislativo de Hierro Indio, el otro proyecto minero que empujaba el Poder Ejecutivo, Cerro Amarillo, está muy cerca de correr una suerte similar.
Sucede que el oficialismo ha quedado muy herido con la enorme polémica que se generó la semana pasada y se prepara para decidir que el proyecto para extracción de cobre vuelva al Poder Ejecutivo para que Francisco Pérez decida cuál será su destino.
Cerro Amarillo también se ubica en Malargüe y representa una inversión de 10 millones de dólares (10 veces mayor que la mina de hierro). Su tratamiento quedó suspendido en el Senado debido a la ausencia de un requisito indispensable: no está listo el inventario de glaciares que debe elaborar el IANIGLA de la cuenca del río Grande, una de las que se verían afectadas por el emprendimiento.
El inventario estaría listo antes de febrero y eso podría reactivar la discusión en comisiones del proyecto. Pero en el Senado hay otro plan: los senadores del PJ tienen la idea de devolver la respectiva Declaración de Impacto Ambiental (DIA) al Ejecutivo “para que esté más blindada si el Gobierno quiere impulsarla en mayo”, según reconoció un legislador.
Esta propuesta demuestra cuál es el estado de ánimo en el Senado después de la derrota de Hierro Indio. La DIA para explorar una zona donde habría hierro tenía defectos y a pesar de ellos fue sancionado por un voto de diferencia el martes pasado. Sin embargo, tres días después, con apenas una jornada de debate en comisiones, la Cámara de Diputados lo archivó, en medio de fuertes protestas antimineras con foco en General Alvear.
Ahora los senadores justicialistas quieren evitar “quemarse” otra vez con la minería y en el caso de Cerro Amarillo prefieren esperar a que Pérez (quien afirmó que está solo en la pelea por impulsar la actividad) defina si quiere seguir dando la pelea durante el año electoral que se avecina.
Hasta 2016
Otras señales políticas sugieren que nadie va a tener interés en debatir la minería en medio de las elecciones. El senador radical Juan Carlos Jaliff salió al cruce ayer con un proyecto de ley para realizar una "consulta popular no vinculante" sobre la minería metalífera, aunque aclaró que su idea es que la ciudadanía se exprese recién el 13 de abril de 2016.
“En un año electoral no se puede hacer”, aclaró Jaliff. El legislador propuso en su proyecto que se pregunte a la ciudadanía mendocina, por “Sí” o por “No”, si hay licencia social para autorizar “los proyectos mineros metalíferos que cumplan con todas las normativas legales y constitucionales de la Provincia y la Nación en particular sobre la preservación y protección del medio ambiente y que no utilicen ninguna sustancia o producto químico que contamine las cuencas hídricas de la Provincia”.
El planteo de fondo es compartido por algunos justicialistas, como es el caso del diputado nacional Alejandro Abraham. Jaliff considera en el proyecto que “ha llegado el momento en que los mendocinos, en su conjunto, deben decidir con respecto a la aceptación o rechazo de la realización de proyectos mineros metalíferos”.
Esta afirmación blanquea el pensamiento de que en Mendoza hace falta algo más que un trámite correcto y ceñido a la legislación para que la minería pueda ser realidad. Eso sí, nadie está dispuesto a esclarecer esta situación en el corto plazo.
Hierro Indio está terminado
En un acto de ciclotimia política, peronistas y radicales suscribieron ayer la posibilidad de desarchivar Hierro Indio en la próxima sesión de Diputados para que el Poder Ejecutivo realice las correcciones pertinentes.
La idea surgió en el seno de la misma cámara que hace pocos días rechazó el proyecto de hierro con contundencia (28 votos negativos contra sólo 16 positivos), pero sería inviable.
Fue el senador Jaliff y otros colegas radicales de la propia Cámara Baja quienes advirtieron que la maniobra no está permitida por la Constitución provincial, que en su artículo 103 sostiene: “Ningún proyecto de ley, rechazado totalmente por una de las Cámaras, podrá repetirse en las sesiones del año”.
La DIA de Hierro Indio es en los hechos un “expediente terminado” y ahora el único camino posible, según indicó Jaliff, es que el Poder Ejecutivo envíe una nueva en mayo del año próximo, es decir, al comienzo de las sesiones ordinarias de la Legislatura.
Ninguna posibilidad habría entonces de evitar que el debate de la minería se apague por lo menos durante los próximos seis meses, lo que también deja en el más completo limbo al proyecto San Jorge, la mina de cobre en Uspallata que ahora es impulsada por inversores rusos y que podría haber tenido una oportunidad si se aprobaba Hierro Indio.
La lengua se desplaza, se contrae, se estira, se endurece, penetra en otras geografías, se mezcla con otras lenguas. A veces de manera violenta, invade, presiona, controla, mutila. Esa misma lengua tiene también la capacidad de seducir, de capturar los sentidos del otro, y cuenta con la grata posibilidad de emocionar. Sirve para una declaración de guerra y es la misma que destila poesía y multiplica el amor. Obviamente no me refiero al músculo, sino a la palabra dicha. A la expresión. A la comunicación hecha palabra. A la lengua como principal aliada para expresar ideas, no para sacarla en gesto de burla.
El culturismo para la lengua, para el idioma, es lo que el prejuicio en la política. Sólo sirve para separar de forma rotunda cuestiones que no son necesariamente incompatibles.
Tomo prestado un hecho de la actualidad para ejemplificar. Y declaro públicamente que no lo hago de manera inocente ni casual.
Se discute la cuestión de la minería, con un tenor que recuerda, por varias razones, a la mal llamada guerra santa.
Después del frustrado caso del santo, el proyecto que ahora ha elevado la discusión a una temperatura insoportable se llama Hierro Indio. ¿Por qué hierro y no fierro? Lo de indio, podemos repasarlo. Indios son los que nacieron en India. La pifia cartográfica de Colón hizo que se denominara indios, también, a los oriundos de este continente, de acuerdo, pero ¿por qué hierro en vez de fierro? Simple. Por una transformación, y a nadie ofendo si sostenemos que el cambio obedece a una deformación.
El término original, latino, es férrum, y según las malas lenguas, en una zona de la actual España les costaba horrores pronunciar la efe. En ese lugar y en aquel momento, residía el poder, y ya sabemos, en esos tiempos, unos poquísimos se dedicaban a dictar y las mayorías, ponían todo su empeño en acatar lo ordenado.
De ninguna manera se puede afirmar que lo correcto es decir hierro. Y esto no significa que la palabra categórica e ineluctablemente sea fierro. Ambas conviven. En la casa del herrero, el cuchillo es de palo pero lo que se trabaja es el fierro. Y en la ferretería encontramos miles de piezas forjadas en hierro. Esta diferencia sutil puede ser inocua, pero también dramática y tremenda. Depende, permítanme la obviedad, del uso que se le otorgue, de lo que podamos hacer con la palabra. Con la significación que le asignemos.
Demostrémoslo. Una escena sacada de la crónica corriente. Descripción lacónica, pero desde dos plumas diferentes. Mientras un diario titula "se vio a un jovencito transportando una herramienta" el otro periódico señala "se detectó a un menor portando un fierro". Decimos lo mismo y sin embargo, la lengua introdujo su intención y marcó la diferencia. Fácil deducir, dos observaciones casi antagónicas de un mismo suceso, con un mismo sujeto, idénticos elementos, pero la insinuación es prácticamente inversa.
Habiendo trascendido la era del hielo, pero también la del bronce y ya superadas las épocas en que algunos dictaban y otros sólo obedecían, es prudente que todos y cada uno, antes de liberar la lengua con irresponsable soltura, aprendamos a separar la mena de la ganga. No podemos merituar de igual manera el discurso demagógico que sólo busca aplausos egoístas, que el estudio sesudo, amplio que contempla todos los aspectos de una realidad compleja.
Quitarle el sesgo religioso a la cuestión ambiental podría contribuir. Y que los expertos admitan que algunos temores responden a experiencias frustrantes, sería de gran ayuda para despejar fantasmas.
Como tercer asunto, la sociedad en su conjunto, no debería permitir discusiones eternas para temas como este. La explotación del hierro, cuarto metal más abundante del planeta, tiene seis mil años de antecedentes. Y excepto los roedores les hayan comido sus lenguas, deberían nutrirse de argumentos y pronunciarse con sensatez.
En Mendoza estamos liderando un extraño movimiento. Podríamos bautizarlo "el postergadurismo". Discutimos y dudamos hasta de la ley de la gravedad, pero no conseguimos elevarnos. No avanzamos ni un centímetro, pero el podio está súper poblado.
Aquella sentencia tan amenazante, "el que a hierro mata a hierro muere", acaba de ser derogada. Al menos, de la lengua para afuera.
“Mendoza: Minería y Sociedad”, fue el eje del encuentro que reunió esta tarde al ministro de Energía Marcos Zandomeni, al secretario general de AOMA, Héctor Laplace y a otros especialistas que disertaron en defensa de la actividad.
Este encuentro se realiza a días de haberse archivado el proyecto minero Hierro Indio, que desató una fuerte polémica en el sur provincial. Lo cierto es que el oficialismo no se da por vencido e incluso hoy el diputado José Muñoz presentó una iniciativa para el desarchivo.
Zandomeni no se guardó su bronca por el bochazo de Hierro Indio y mostró molesto con los que le hacen “bulliyng" a la minería. “Es una actividad legal, es algo racional, lo otro es político, cuando un bloque vota en contra de todos los proyectos es difícil mandar uno”, admitió el ministro de Energía.
Además desafió a la oposición para que presenten propuestas y proyectos para el futuro desarrollo de la provincia. “Necesito que aporten ideas, de qué vamos a vivir en los próximos diez años”, se preguntó.
En cuanto a la posibilidad de realizar un plebiscito por este tema en las próximas elecciones, el funcionario de Francisco Pérez, consideró que sería “muy bueno” si los legisladores encuentran el modo de hacerlo.
Por su parte Laplace, sumó un granito de arena a la polémica al declarar que la Ley 7722 es “inconstitucional”. El secretario de AOMA indicó que “no se puede prohibir con sustancias químicas una actividad cuando todas las utilizan”. Lo cierto es que desde su lugar defendió la actividad y acusó a quienes tienen “intereses políticos” de fondo. El gremialista pidió que se acabe con la “prepotencia” para que Mendoza vuelva a tener minería.
“Defendemos la actividad minera desde el punto de vista del trabajo, no defendemos negocios inmobiliarios mineros que también los hay, defendemos el trabajo genuino”, expresó Laplace.