En los primeros diez meses del año la producción total del metal rojo sumó 3,8 millones toneladas métricas, con un alza de sólo 0,4%.
La producción chilena de cobre creció 0,4% en los primeros nueve meses del año, totalizando 3,79 millones de toneladas métricas (TM), según datos proporcionados Cochilco. En dicho comportamiento fueron muy relevantes los positivos desempeños de Collahuasi, que ya superó sus problemas operativos, y de Codelco, las que anotaron alzas respectivas de 18% y 3,9%.
Codelco –que es el mayor productor de cobre a nivel mundial- incrementó su producción en 50.700 TM, lo que fue impulsado por el alza de 9,2% de Chuquicamanta-Radomiro Tomic, El Teniente que la subió en 4% y El Salvador que la expandió en 3,3%. En dirección opuesta, el resto de las divisiones redujeron sus producciones, pues Minera Gaby la bajó en 13,6% y Andina en 2,6%. Con todo, la minera estatal incrementó su participación en el mercado de local de un 30,9% a 32% en septiembre pasado.
En el caso de las mineras del Grupo Luksic –que componen Antofagasta Minerals- se apreciaron importantes reducciones al tercer trimestre en El Tesoro (-11,1%), Esperanza (-4,8%) y Los Pelambres (-3,9%).
En el mismo sentido, figura el caso de Escondida –controlada por BHP Billiton (57,5%), Rio Tinto (30%) y Jeco Corp (12,5%)- pues en enero-octubre contrajo su producción en 2,9%, totalizando 874.600 TM. Con estas cifras, el mayor yacimiento de cobre del mundo, redujo su participación en el mercado local a 20,6%, frente al 21,3% que había obtenido en el 2013.
En marzo de 2013 el presidente de la Federación de Trabajadores del Cobre y director de Codelco, Raimundo Espinoza, alertaba que el modelo contratista en la gran minería enfrentaba un problema serio: el aumento en los costos de los servicios prestados por terceros, que iba más allá del mayor valor de los insumos. Espinoza advertía de deficiencias de gestión y sobredotación en las empresas externas que eran traspasados a las mineras y afectaban la productividad.
El tema cobró importancia en las últimas semanas en presentaciones realizadas, en distintos contextos, por los principales ejecutivos de Codelco. Tanto el presidente ejecutivo, Nelson Pizarro, como el presidente del directorio, Oscar Landerretche, señalaron que la productividad de algunas funciones externalizadas es baja. “Tenemos evidencia sobre la existencia de actividades de servicios de terceros cuyas productividades son menores a 30%. Resulta urgente trabajar para elevarlas significativamente”, dicen las presentaciones.
Desde Codelco explicaron que la cifra se refiere al porcentaje de tiempo en que efectivamente se trabaja en la tarea contratada, descontando las coordinaciones, pases, permisos y habilitaciones varias. También señalaron que el número de trabajadores propios alcanzó 19.242 personas en 2013, versus 47.737 de los contratistas.
En sus presentaciones, los ejecutivos precisaron que se revisan algunas palancas para impulsar la productividad, como mejorar la planificación y ejecución de las actividades y una eventual internalización selectiva de algunas áreas, que según fuentes, tendrían que ver con mantenimiento.
“Codelco ha evaluado que la productividad de terceros, o de los servicios que prestan algunas contratistas, no es buena. Esto es uno de los factores críticos para cumplir nuestras metas de producción, de costos y de llevar adelante proyectos estructurales”, dijeron desde la empresa.
Y agregaron que la productividad de los servicios de terceros ha caído en toda la industria, lo que consta en un estudio de la Cámara Chilena de la Construcción para el Consejo Minero, que muestra que la productividad real de los contratos es de 40%.
Modelo en revisión
Desde Codelco explicaron que el modelo de tercerización se basó en la externalización de funciones que no forman parte del core del negocio a un tercero especializado que lo prestara a un mejor precio. Hoy, dijeron, algunos de esos supuestos no se cumplen del todo, por lo que “el modelo está en revisión”.
El presidente Ejecutivo del Consejo Minero, Joaquín Villarino, sostiene que datos de 2013 sobre empleo directo en minería dan cuenta de algunos cambios. En ese sentido, explicó que durante la década previa, junto con un aumento constante en el empleo total minero, se venía apreciando una tendencia a la baja en la participación de trabajadores propios, alcanzándose el porcentaje más bajo en 2012, de 29,5%.
“En 2013 respecto a 2012 se produjo por primera vez en la década una baja en el empleo total minero. Los trabajadores contratistas bajaron desde 167 mil a 155 mil. Esto fue parcialmente compensado por un incremento en la cantidad de trabajadores propios, que pasaron de 70 mil a 74 mil. Así, la participación porcentual de trabajadores propios subió a 32,3%, porcentaje similar al registrado en 2011, pero aún lejos del 41% anotado en 2003”, indicó. Añadió que los datos no son suficientes para revelar un cambio de estrategia de las mineras.