A través de la resolución N° 33 del Primer Juzgado Constitucional de Lima, se dispuso el archivamiento y culminación definitiva del proceso que la minera Bear Creek Mining Company Sucursal Perú interpuso el Estado por la cancelación del proyecto Santa Ana en el distrito de Huacullani, provincia de Chucuito (región Puno).
La misma minera canadiense, a través de su representante legal, Elsiario Antúnez de Nayolo Ramis, formuló el desistimiento del proceso que en el 2012 inició contra los ministerios de Energía y Minas, Defensa y la Presidencia del Consejo de Ministro (PCM).
Los representantes de Bear Creek evitaron pronunciarse aún sobre el caso, pero no negaron hacerlo en algún momento a través de los canales y personas que corresponden.
Por su parte, el dirigente Patricio Illacutipa, saludó la medida judicial indicando que su pueblo luchaba por el cumplimiento del Decreto Supremo 032, que entre otras cosas establecía que no pueden haber proyectos mineros a 50 kilómetros de la línea de frontera con Bolivia.
A su turno, Hermes Cauna, presidente del comité de defensa de los Recurso Naturales de la Zona sur, indicó que ahora se impulsará el desarrollo agropecuario, debido a que esta zona será intangible.
Cabe recordar que en el 2011 se desató una de las más grandes convulsiones sociales conocida como el “aymarazo”,la misma que fue liderada por el hoy candidato al gobierno regional Walter Aduviri Calisaya, culminando con graves daños a la propiedad pública y privada.
El actual presidente del Frente de Defensa de Recursos Naturales de la Zona Sur, Hermes Cauna Morales, anunció como un triunfo el desistimiento de Bear Creek en el proceso contra el Estado Peruano; sin embargo, no dijo que dicha acción tenía la finalidad de hacer posible un arbitraje internacional.
El dirigente presentó el día de ayer un documento del primer Juzgado Constitucional en el que se acepta el desistimiento definitivo del proceso de acción de amparo que la empresa Bear Creek seguía para que el estado le restituya su derecho a explotar la mina Santa Ana.
“Sabiendo que ellos que iban a perder sí o sí, se desistieron y han pedido que se archive el proceso. Hoy se ve el resultado de la lucha de los dirigentes”, dijo Cauna.
Pero el pedido de desistimiento se hizo el 11 de agosto, el mismo día que la empresa solicitó formalmente que el Estado y la empresa se sometan a un arbitraje internacional en el marco del Tratado de Libre Comercio firmado también con Canadá.
La empresa Bear Creek comunicó que el desistimiento se hizo porque el arbitraje exige, como uno de los requisitos, que no se tenga litigio alguno sobre el mismo caso en el país de origen del problema.
Como se recuerda, el 11 de agosto la empresa canadiense Bear Creek Mining, presentó la solicitud formal para llevar al Estado Peruano a un proceso arbitraje comercial que puede traer la imposición de una sanción económica multimillonaria en contra del Estado Peruano, por la cuantiosa inversión.
La cuantía de la indemnización comprende las pérdidas económicas y la ganancia futura que la explotación le iba a representar a la empresa.