Por Ismael Bermúdez
A través de un decreto de necesidad y urgencia (DNU) el Gobierno volvió a ampliar el gasto y el endeudamiento del Estado. Esta vez el incremento del gasto fue de $ 39.952,5 millones. De esa cifra, $ 12.401 millones se cubrieron con mayores ingresos, en su mayor parte por intereses ganados del Fondo de Garantía de la ANSeS. Pero el resto -$ 27.551,5 millones- pasó a engrosar el déficit fiscal, según informó ASAP (Asociación Argentina de Presupuesto).
Con estas ampliaciones, el gasto público para este año se eleva a $ 1.137.281,9 millones.
Esta cifra contrasta con el Presupuesto 2014 votado por el Congreso, que previó un gasto total de $ 859.582 millones. La diferencia entre lo presupuestado y lo que finalmente está pasando equivale a una suba del 32%. Y todavía faltan sumar las ampliaciones que puedan surgir de aquí a fin de año y las mayores transferencias de la ANSeS y el BCRA.
En especial, porque muchas partidas tienen un elevado nivel de ejecución y en diciembre, además de los sueldos, el Estado y las provincias deben afrontar el pago del medio aguinaldo. En cambio, los ingresos por impuestos y aportes de la Seguridad Social podrían desacelerarse como consecuencia de la recesión.
En tanto, con estos cambios el déficit fiscal salta de $ 163.930,8 millones a $ 191.482,4 millones cuando en el Presupuesto original se preveía un superávit de $ 830 millones.
Este mayor deterioro de los números fiscales no incluye las transferencias del Banco Central al Tesoro Nacional – del orden de los $ 100.000 millones. Si se suman, el déficit real treparía a casi $ 300.000 millones.
El DNU también autoriza a la colocación de más deuda por $ 30.010 millones a través de títulos públicos en moneda nacional y extranjera.
De los $ 39.952,5 millones de mayores gastos, la principal partida corresponde a la ANSeS para tender los pagos de jubilaciones y pensiones por $ 16.500 millones. También el PAMI recibe un refuerzo de $ 1.158 millones.
El segundo mayor refuerzo se lo llevan los intereses de la deuda: se acrecientan en $ 9.438,7 millones por el ajuste sobre los vencimientos en pesos y el impacto de la devaluación del peso sobre los vencimientos en moneda extranjera. Luego figura Desarrollo Social con $ 7.362 millones para atender las pensiones no contributivas, Seguridad Alimentaria y el Programa Ingreso Social con Trabajo.
Con todo, la mayor novedad es el fuerte refuerzo que tienen las partidas para Seguridad ($ 5.470 millones) y Defensa ($ 3.847 millones) que en su casi totalidad son para atender los gastos de personal.
Educación recibe $ 4.643 millones más, para afrontar los pagos salariales de las Universidades Nacionales. Para el resto de los rubros los incrementos son menores y en algunos casos, se reduce el presupuesto que tenían en vigencia, como en el caso de Economia y Planificación, y algunas partidas para empresas públicas.
El DNU otorga nuevas autorizaciones para comprometer gastos con cargo a ejercicios futuros, a la vez que prorroga hasta el 30 de junio de 2015 el régimen de reordenamiento de la situación financiera de la Nación, Provincias y CABA.Por último, el DNU también autoriza aumentar en 200 cargos en la Procuración General de la Nación y 239 cargos en la Secretario General de la Presidencia, autorizando al Jefe de Gabinete a incorporar el gasto resultante en el Presupuesto 2015.
Por MARIANA SHAALO.
El Gobierno dispuso un aumento del gasto por $ 39.952,5 millones en el presupuesto 2014 a través de un decreto de necesidad y urgencia publicado ayer en el Boletín Oficial. A la vez estableció un incremento de $ 12.401 millones en los recursos previstos por lo que el déficit financiero se incrementó en $ 27.551,5 millones, de -$ 163.930,8 millones a -$ 191.482,4 millones.
De acuerdo con el análisis realizado por la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP), más de un tercio del aumento de las erogaciones se destinó a gastos en personal ($ 13.978 millones), básicamente para fuerzas
de Seguridad.
En particular, los incrementos más significativos en el crédito vigente para atender gastos en personal se registraron en el Ministerio de Seguridad ($ 5.469 millones); Ministerio de Defensa
($ 3.847 millones); Poder Judicial ($ 1.237 millones); Poder Legislativo ($ 1.025 millones); Ministerio Público ($ 640 millones); Conicet ($ 370 millones); ANSeS ($ 350 millones); INTA ($ 296 millones) Dirección Nacional de Vialidad ($ 273 millones); Servicio Penitenciario Federal
($ 265 millones).
Mediante el decreto que lleva la firma de la presidenta Cristina Fernández, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y todos los ministros del Gabinete, también se autorizó un mayor endeudamiento y se extendió hasta el 30 de junio de 2015 el régimen de saneamiento financiero con las provincias.
De esta manera, se formalizó un mayor endeudamiento con la colocación de títulos públicos por $ 30.010,2 millones, siendo $ 28.277,6 millones en pesos y otros $ 1.732,6 millones en moneda extranjera.
La ampliación del Presupuesto 2014 detallada en 320 fojas anexas al decreto 2.129/14 se publicó ayer el Boletín Oficial pero fue fechada el 13 de noviembre.
La medida también dispuso la excepción a la prohibición de "realizar operaciones de crédito público para financiar gastos operativos" establecida en la ley de Administración Financiera.
El decreto estableció que parte del incremento del gasto es financiado con una suba de recursos de $ 12.401 millones, compuestos por un mayor nivel de recaudación impositiva
($ 3.814,1 millones, principalmente por el desempeño del Impuesto a las Ganancias) y a una previsión superior de las rentas del Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Seguridad Social ($ 8.586,9 millones).
Pero también hubo recortes de gastos en diferentes áreas, como en los casos de transferencias a Nucleoeléctrica Argentina (- $ 800 millones), Enarsa (- $ 1.000 millones), Entidad Binacional Yacyreta (- $ 500 millones), Arsat (- $2.000 millones) y AYSA (- $ 500 millones de pesos).
Además, en el Ministerio del Interior y Transporte, se redujeron los créditos correspondientes al Programa 62 - Formulación y Ejecución de Políticas de Transporte Ferroviario en $ 300 millones: $ 100 millones en las Transferencias a Ferrocentral SA para financiar gastos corrientes, y $ 200 millones en las Transferencias a empresas ferroviarias privadas para financiar gastos de capital.
Además, en el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, se redujeron un 15% los créditos presupuestarios por un monto de $ 3.900 millones. En particular se recortaron $ 400 millones correspondientes a la Resolución MEyP 9/2007 (Ex Oncca); $ 500 millones en las transferencias de capital destinadas al Fondo para el Desarrollo Argentino (Fondear); y $ 3.000 millones del Plan Gas.
En el Ministerio de Industria, se destacó una reducción de los créditos para transferencias a empresas privadas por $ 140 millones, de los cuales $ 110 millones corresponden a la industria automotriz.
En tanto, el Ministerio de Planificación Federal resultaron significativos los recortes en programas de vivienda por $ 500 millones, en el Fondo Fiduciario de Consumos de Gas por $300 millones, los $ 600 millones del Programa 74 - Formulación y Ejecución de la Política de Energía Eléctrica y los $ 900 millones al Fondo Fiduciario de Transporte Eléctrico Federal.
Por Jorge Oviedo.
Por decreto de necesidad y urgencia publicado ayer el Gobierno decidió agregar al presupuesto en curso gastos por casi 40.000 millones de pesos; la mayor parte de ellos con deuda en su mayoría interna, pero también externa, que deberá pagar la siguiente administración.
El DNU debió hacer una excepción a la prohibición legal de tomar deuda para financiar gastos corrientes. Y contradijo lo dicho por la Presidenta cuando inauguró las sesiones ordinarias del Congreso. "¡Ojalá todas las deudas que tengan que pagar sean de cosas que se puedan tocar, sean de energía! ¡Ojalá sean de obras de ferrocarriles! ¡Ojalá sean de obras que se puedan palpar, que sirvan para disfrutar y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos; para eso estamos!", señaló.
Pero el DNU de ayer dispuso aumentar la deuda de largo plazo en 28.777 millones de pesos y en 1732 millones la nominada en moneda extranjera, y autorizó que se use para pagar gastos corrientes.
También modificó ejercicios futuros, aumentando gastos. Lo curioso es que cambió por DNU el presupuesto 2015, promulgado ayer en el mismo ejemplar del Boletín Oficial. Los puestos en la Procuración General de la Nación a cargo de Gils Carbó fueron aumentados en 200 y en la Secretaría General de la Presidencia, en 239. Sólo con una decisión de Capitanich esos cargos estarán ya en los gastos del año próximo. El déficit financiero aumentó a 191.482 millones y llegará a un 17% del gasto total.
También hay casi $ 10.000 millones más para pago de deudas. Con las modificaciones introducidas y si se hacen todas erogaciones autorizadas, el gasto total será 32,3% mayor que el previsto en la ley de presupuesto 2014 cuando la aprobó el Congreso. En agosto último ya habían aumentado las erogaciones previstas para el presente ejercicio en nada menos que $ 200.000 millones, llevándolos bien por encima del billón, un récord absoluto.
También resulta curiosa la secuencia. Porque según el presupuesto 2015 promulgado ayer, y si se cumpliera el total de gastos previstos este año, en el siguiente ejercicio el incremento en un año electoral sería de apenas el 10%; lo que significa que o bien bajaría dramáticamente la inflación o habría un fuerte ajuste que reduciría el déficit financiero en alrededor del 74 por ciento. Más probable parece que las cuentas del próximo ejercicio sufran modificaciones intempestivas y profundas como ha venido ocurriendo desde que el kircherismo está en el poder.
Una parte de las modificaciones para el ejercicio en curso son reasignaciones, menores ejecuciones a las que habían sido autorizadas en agosto, por subejecuciones en algunos casos de obras y también por menores necesidades derivadas de la caída de la actividad por la recesión y por menores precios internacionales de la energía y los combustibles.
De todas formas, para la agencia oficial de noticias Télam sí aparecieron mayores recursos. La recesión y la quita de subsidios, en parte, redujeron la demanda de gas y las cantidades a importar también fueron disminuidas por mayor oferta hidroeléctrica, a menor costo, proveniente de Uruguay.
ATRASOS ACUMULADOS
Pero también hubo disminuciones de partidas destinadas a sectores productivos en problemas, El mayor recorte fue el de 110 millones de compensaciones para la complicada industria automotriz. Se trata del "Régimen de Consolidación" de la producción local de motores y cajas de cambios, que impulsó la introducción de modelos nuevos. Las terminales están reclamando una deuda por atrasos en los pagos, que ahora parece que no van a actualizarse pronto. Gran parte del incremento de partidas está justificado en mayores gastos para pagar salarios. Pero los aumentos de estructuras por creación de cargos, como en el área que controla Gils Carbó, se trata de compromisos que deberán continuar a cargo de las próximas administraciones. Del mismo modo que ocurrirán si se completa la mayor plantilla prevista en la Secretaría General de la Presidencia. Sólo con este DNU habría 439 agentes más entre las dos áreas, todos designados por la actual administración en el último tramo de su gestión, pero con estabilidad.
Entre las reducciones de subsidios a empresas públicas aparece el de 800 millones de pesos a Nucleoeléctrica Argentina Sociedad Anónima (NASA), justo en el momento en que la central Atucha II, rebautizada Néstor Carlos Kirchner, está fuera de servicio y la de Embalse necesita una reparación que extienda su vida útil.
La menor demanda de energía por la recesión y un invierno benévolo han generado algunas ventajas presupuestarias, liberando algunos recursos para otros fines, pero habrá que ver cómo evoluciona la situación a medida que suban las temperaturas estivales.
En alguna medida los mayores gastos son atendidos con recaudación superior a la prevista del impuesto a las ganancias, pese a lo cual las autoridades prefieren seguir gastando y no reducir la presión del tributo sobre los salarios, como reclaman incluso gremios oficialistas.
En cambio, prefiere aumentar en casi 14.000 millones de pesos las partidas para pagar remuneraciones del sector público.
Por jurisdicciones, la más beneficiada por el aumento porcentual de sus partidas es sin dudas la Procuración del Gils Carbó, con el 21%. Y Kicillof el más perjudicado, con un recorte del 15%, básicamente por las menores partidas de estímulos para la mayor producción de gas, un esquema que el ministro ha seguido personalmente.
También se recortaron partidas para la estatal Arsat, pese al extenso uso propagandístico que el Gobierno hizo de la puesta en órbita del satélite geoestacionario. La empresa era la que también, según un anuncio que en su oportunidad hizo Julio De Vido, iba a ocuparse de operar una empresa estatal de telefonía móvil, idea ahora abandonada.
En la cartera de Trabajo, parte de los recursos van a reforzar las partidas del PAMI, cuyos prestadores estaban quejándose de serios atrasos en los pagos, y a mayores recursos para jubilaciones y pensiones.
MENOS PARA EL TRANSPORTE
Las últimas modificaciones presupuestarias mostraron algunos cambios llamativos si se los compara con lo que fue la política habitual del Gobierno: se redujeron en $ 300 millones los subsidios a los trenes. También se recortaron en $ 100 millones los créditos para Ferrocentral destinados a pagar salarios y en $ 200 millones los fondos a empresas privadas para financiar inversiones.
Por Mariano Boettner.
El Gobierno incrementará el gasto público en más de 55 mil millones de pesos de lo presupuestado para cubrir gastos de sueldos de la administración pública y pago de jubilaciones, principalmente.
Mediante el decreto 2129/2014, que lleva la firma de la presidenta Cristina Fernández y todos los miembros del Gabinete Nacional, se dispone las modificaciones del Presupuesto 2014 que en total implican gasto en distintas partidas por más de $ 140 mil millones, aunque el Gobierno imputa en la planilla de reasignación de recursos e ingresos financieros y tributarios por más de $ 80 mil millones.Además, el DNU publicado ayer en el Boletín Oficial prolongó hasta el 30 de junio de 2015 el régimen de saneamiento financiero con las provincias.
Desde sectores de la oposición y economistas críticos con el Gobierno nacional, se suele criticar que la ampliación del gasto público puede traer como principal consecuencia un aumento en la inflación. Desde los think tank más cercanos al Gobierno defendieron el aumento del gasto público para favorecer “a sectores asalariados es una buena noticia”. Daniel Carbonetto, del Centro de Estudios para la Patria Grande, dijo a BAE Negocios que “carece de sustento afirmar que la inyección de gasto público se traducirá en inflación, teniendo en cuenta que hay sectores productivos que están trabajando con una capacidad ociosa del 20%, si fuera un momento de plena producción existiría ese riesgo”, explicó.
El análisis realizado por la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública afirmó que el decreto “formalizó también un mayor endeudamiento con la colocación de títulos públicos por 30.010,2 millones de pesos (28.277,6 millones en pesos y 1.732,6 millones en moneda extranjera)”.
Según otras estimaciones extraoficiales, del total de la masa incluida ayer en el Presupuesto 2014, el incremento de los recursos respecto de lo pautado representa poco más de 18.000 millones de pesos, reasignación de partidas del Tesoro nacional por casi 3.000 millones de pesos y emisión de deuda pública por más de 51.000 millones de pesos.
Detalle de gastos
El organismo más beneficiado de la nueva masa de recursos que se agrega al gasto público será la ANSES, con unos 18.400 millones de pesos para afrontar los pagos de juicios previsionales y el ingreso de unos 500.000 jubilados al sistema nacional por la nueva moratoria.
En la lista de organismos de la administración pública nacional más beneficiados está el ministerio de Desarrollo Social, con unos 7.352 millones de pesos. Estos fondos cubrirán gastos de los programas de pensiones no contributivas, de seguridad alimentaria y de ingreso social con trabajo.
El ministerio de Seguridad, liderado por María Cecilia Rodríguez, recibió unos 5.300 millones de más: 2.159 millones serán destinados a la Policía Federal; 2.024 millones irán a la Gendarmería; 1.114 millones irán a la Prefectura.
Por otra parte, el Gobierno decidió destinar unos 9.438 millones de pesos para el pago de vencimientos de deuda pública en esa moneda.
Dentro de la mayor partida para las universidades públicas nacionales, figura en primer lugar la UBA ($750 millones), le sigue La Plata ($307,7 millones) y un grupo de “universidades sin discriminar”, con de 253 millones de pesos. La Secretaría de Inteligencia, SIDE, será reforzada en unos 500.000 pesos.