Por GISELLE RUMEAU.
El presidente de Shell, Juan José Aranguren, uno de los empresarios que más se ha enfrentado con el kirchnerismo en la útlima década, habló ayer sobre sus preferencias electorales para 2015 y engordó las especulaciones sobre un futuro salto a la política de la mano del PRO. El titular de la petrolera dijo que entre los postulantes presidenciales Mauricio Macri, Sergio Massa y Daniel Scioli optará por el jefe de Gobierno porteño en los comicios de octubre.
"Entre Macri, Massa y Scioli, me quedo con Macri", disparó en declaraciones a la radio Rock & Pop. Y argumentó: "Lo que yo estoy esperando es tener un Gobierno que sea más respetuoso de la ley, que sea más abierto al diálogo y en el cual todos podamos colaborar".
Sus palabras hicieron ruido por varios motivos. Se trata de un empresario que ha sido tildado por la Casa Rosada como "enemigo del Gobierno". La tensión entre Aranguren y el kirchnerismo lleva más de diez años pero tuvo su punto más álgido en enero pasado, cuando en plena devaluación el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, lo acusó de tener "una actitud conspirativa contraria a los intereses del país" por "especular" en el mercado financiero.
No es todo. El propio Aranguren no descarta la posibilidad de dedicarse a la política cuando deje la presidencia de la filial agloholandesa y así se lo comunicó al ministro de Desarrollo Económico porteño, Francisco "Pancho" Cabrera, y al presidente del PRO, Humberto Schiavoni, cuando visitó hace unos meses la Fundación Pensar, la usina de ideas del macrismo. Si bien la visita se concretó para intercambiar propuestas vinculadas al futuro energético del país y al potencial de Vaca Muerta, en el PRO no perdieron tiempo para tentarlo. El ofrecimiento fue hecho pero Aranguren respondió que pretendía seguir al menos hasta finales de 2015 al frente de la petrolera, que está cumpliendo 100 años en la Argentina. En el PRO optaron ayer por el silencio pero las declaraciones del empresario no pasaron desapercibidas.
Con todo, en el reportaje radial, Aranguren evitó decir si iba a involucrarse en política con el macrismo. Pero con la repregunta sobre cuál sería su candidato para la presidencia en 2015, y tras un largo silencio, respondió sin vacilar: "Macri". Aunque luego aclaró rápidamente que no tiene preferencias por ningún espacio político. "Yo no tengo pertenencia partidaria, no estoy afiliado a ningún partido. Obviamente, tengo mis ideas, voto concienzudamente. A algunos le puede sorprender a quién he votado en los últimos años. Voté a Elisa Carrió. Y en el 83 voté a (Raúl) Alfonsín", afirmó, en sintonía con su familia de origen radical.
El titular de Shell también habló sobre su relación con el kirchnerismo y aprovechó para quejarse por las campañas en su contra que en varias oportundiades desplegó La Cámpora. "He sido escrachado por decir lo que pienso", afirmó. Y remarcó: "Creo que en la medida que todos podamos expresarnos libremente vamos a construir un país mucho mejor".