Las negociaciones con Argentina tuvieron un giro inesperado ayer luego de que el director paraguayo de la EBY, Juan Schmalko, anunciara un inminente acuerdo el lunes último e incluso diera como hecho la firma de una Nota Reversal de cogestión en la binacional, el canciller Eladio Loizaga lo descartó. Añadió que todo dependerá de lo que se trate hoy.

“No hay ninguna Nota Reversal. La reunión la haremos en (el Ministerio de) Planificación, donde se hacen las negociaciones”. De este modo respondió ayer el canciller nacional, Eladio Loizaga, a la consulta sobre el supuesto principio de acuerdo que ya existía con Argentina para la firma del instrumento diplomático en el que se establecen los nuevos términos del Anexo A, para una cogestión binacional plena en la administración de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY).

Según las versiones, el presidente Horacio Cartes no autorizó la firma del documento, porque habría surgido algún tipo de condicionamiento del lado argentino a cambio de acceder al manejo paritario de la EBY.

Tampoco se dio a conocer el contenido del mismo, aunque lo habitual en estos casos es que previamente las altas partes accedan a un borrador sobre el cual se ponen de acuerdo antes de la firma.

No deja de llamar la atención que el día anterior, el director paraguayo, Juan Schmalko, haya dado como un hecho la firma de la Nota Reversal, e incluso, habló de un “principio de acuerdo” con los argentinos, referente a la clarificación de las cuentas de la entidad, luego de haber hablado con el presidente Cartes.

Ese día, el funcionario se mostró muy optimista y señaló que la contrapropuesta planteada por el lado argentino se acercaba a las pretensiones planteadas por nuestro país.

Al ser consultado por la prensa si nuestro país mantenía la posición inicial de que no aceptará nuevas obras si no se arreglaban las cuentas de la binacional, respondió que sí e incluso agregó que en esas condiciones, “Yacyretá es el ente que mayor posibilidad de crecimiento tiene en cuanto a la generación de energía. Así que debemos, de cualquier manera, encontrar el camino y la solución a esta situación para que pueda aplicarse plenamente el Tratado y eso nos permita seguir creciendo”.

En principio, la reunión prevista para hoy se llevará a cabo en horas de la tarde y participarán de la misma el ministro Juan Carlos López Moreira, el canciller Loizaga y el director Schmalko; y por Argentina, se prevé la presencia de los ministros Julio de Vido y Axel Kicillof.

“Una victoria argentina”

“La cogestión es una victoria más de los argentinos, pues las operaciones técnicas y financieras seguirán siendo administradas y controladas por los argentinos, ya que son los mayores consumidores y, por lo tanto, generadores de ingresos –si es que lo hubiere–”, opinó el técnico Ing. Ernesto Samaniego, quien afirma que si hay acuerdo será por cuestiones políticas.

El canciller de Paraguay, Eladio Loizaga, viajará mañana a Buenos Aires para continuar negociaciones respecto a la represa binacional de Yacyretá y una proyectada planta nuclear en la provincia de Formosa.

Loizaga se entrevistará con el ministro de Planificación Federal, Julio de Vido y pedirá que congresistas paraguayos visiten el predio donde se proyecta construir la central nuclear, en la frontera entre ambos países, ante la preocupación que genera, principalmente en la oposición política de Paraguay.

El canciller Loizaga precisó que "el convenio sobre seguridad energética nuclear obliga a que se facilite toda la información, pero Paraguay, ni ningún Estado parte tiene derecho al veto".

Sobre Yacyretá, Juan Schmalko, titular de la binacional, informó en Asunción que en la reunión de mañana, en Buenos Aires, se tratará justamente de avanzar sobre las conclusiones a que llegaron los equipos técnicos que están trabajando para superar problemas comunes.

"Queremos acortar un poco los tiempos para poder tomar una determinación que nos permita hacer prevalecer la posición del Paraguay que es el arreglo de las cuentas antes de avanzar las obras", agregó Schmalko.

Delegaciones técnicas de los dos países han estado trabajando desde hace varios meses en torno a la necesidad de actualizar el Tratado de Yacyretá de 1998, particularmente el Anexo 3, que establece las bases financieras y de prestación de los servicios de electricidad de la usina.

Ese anexo caducó en marzo de este año y Paraguay pretende aumentar la cantidad de energía que recibe de la represa y mejorar los ingresos que genera la obra.

Schmalko indicó que hay coincidencias entre las propuestas de las partes, pero no quiso dar detalles sobre cuándo podrá firmarse un nuevo acuerdo.