"Si extraes mucho potasio, también se puede poner en jaque su futuro", advirtió el subsecretario de Minería.
Llegó noviembre y, con ello, un momento decisivo para la industria del litio: luego de dos años de la fallida licitación realizada por la administración de Sebastián Piñera y que le costó el cargo al hoy cuestionado subsecretario Pablo Wagner, la denominada Comisión Nacional del Litio -creada por la Presidenta Michelle Bachelet para definir una política pública sobre el mineral-, entregará este mes sus conclusiones para ser validadas el primer trimestre de 2015.
El actual subsecretario de Minería, Ignacio Moreno, puntualizó que la tercera semana de noviembre debiera estar terminado el documento final, en el que han trabajado los 20 expertos, para ser entregado a la Presidenta.
El factor medioambiental
Tras cuatro meses desde que encabezara la primera reunión plenaria, el subsecretario señaló que existe acuerdo en que, más que hablar de un cuidado especial en el manejo ambiental del litio, es necesario tener un predicamento de cuidado a nivel de los salares en general.
"Si explotas mucho potasio, también podrías poner en jaque el futuro de este mineral. Es decir, más allá de la explotación del litio, pensamos que hay que hablar de explotación de los salares en su conjunto", comentó.
Moreno contó además que hay acuerdo en que se requiere una "mayor fiscalización del Estado en la explotación del litio, su industria y los salares".
Otro de los temas -que generó mayor preocupación en la comisión- y que también finalmente generó consenso, es la variable ambiental como elemento clave para la sustentabilidad del negocio. "Les preocupa que solamente estemos mirando un foco de explotación de los salares (...), y hay que tener una visión integral del salar y no solamente mirar la explotación del litio", recalcó.
Nueva ley de concesiones
Otra recomendación es abrir el mercado a nuevos competidores, pero bajo una nueva ley. "Estamos todos de acuerdo en que hay que dinamizar el sector, involucrar más actores, más productores, porque Chile tiene que generar más litio a futuro para poder responder a la demanda internacional. El tema es cómo se hace equilibrada y armónicamente", resaltó.
Si esto se materializa, el mercado dejaría de estar en manos de sólo dos compañías: SQM, empresa controlada por Julio Ponce, y la firma de capitales norteamericanos Rockwood, propietaria de la Sociedad Chilena del Litio.
En esa línea, si se decide abrir la explotación del mineral vía concesiones, probablemente no se podría utilizar el actual sistema que se aplica a explotaciones mineras como el cobre.
Moreno explicó que, "al tomar una concesión minera para un mineral clásico, se entiende que la concesión permite explotar todo lo que existe en el subsuelo y eso es estático".
"Pero en el caso del litio -agrega-, es un recurso que se mueve con la salmuera. Es un tema que hay que resolver. La concesión minera clásica entiende que el recurso es estático en el subsuelo y no como el litio y potasio que, en este caso, están en los salares".