Perú y Ecuador definirán protocolos comunes de interdicción de minería ilegal y de atención a las víctimas rescatadas en actividades vinculadas a esta práctica fuera de la ley, acordaron hoy ambos gobiernos durante el VIII Gabinete Binacional.

La declaración suscrita al término de este encuentro indica queestos protocolos comunes deberán obtenerse luego de definir criterios compatibles sobre minería artesanal y pequeña minería en zonas de frontera.

Asimismo, según el documento oficial, los presidentes Ollanta Humala y Rafael Correa acordaron instruir a las autoridades competentes, el desarrollo de una estrategia binacional sobre minería artesanal e informal.

Esta estrategia deberá implementar las recomendaciones expedidas en el Encuentro Trinacional Ecuador-Perú-Colombia, realizado en abril pasado, con participación de expertos en el tema de los tres países.

El acuerdo incluye también atender de manera especial la regularización de esta actividad, el intercambio de información relacionada con el flujo de insumos y materiales empleados en la minería de un país hacia el otro, así como el control de insumos y materiales (…) y de actividades mineras en cuerpos o fuentes de agua”

“Se intercambiarán los datos de las acciones y ciudadanos que realicen actividades de minería ilegal en el territorio del otro país, y se continuará con los operativos de inspección e interdicción coordinados en las zonas de frontera”, señala la Declaración.

Igualmente, ambos países se comprometieron a consolidar las áreas naturales protegidas como espacios estratégicos para la conservación de la biodiversidad, ecosistemas y la generación de los servicios ambientales que benefician a las poblaciones.

Al concluir el encuentro, los presidentes Humala y Correa acordaron que la próxima reunión del Gabinete Binacional se llevará a cabo en octubre del 2015 en Lima.

Integración, desarrollo y paz. Son algunos de los pilares que sostendrán el trabajo conjunto del Perú y Ecuador. El presidente Ollanta Humala sostuvo que ambos países tienen que luchar juntos contra el verdadero enemigo, que es la pobreza, así como llevar el Estado hasta los lugares más alejados para cambiar el destino y mejorar el futuro de ambos pueblos.

Durante su discurso en el Encuentro Presidencial y Octavo Gabinete Binacional, destacó que para ello es fundamental incidir en la política social y seguir avanzando por el camino de la paz que lleva al desarrollo, con diálogo, transparencia y voluntad.

“En eso he encontrado un aliado estratégico en Rafael [Correa, presidente de Ecuador]. Es un tema fundamental. Tenemos que incidir más en la política social […] Es un deber de la clase política seguir construyendo la paz.”

Desafío

Sostuvo que en estos encuentros binacionales se trabaja en conjunto para llevar el Estado “a la punta del cerro o a los nevados”, donde hay pobladores.

“No tenemos derecho de condenarlos a la pobreza […] Mientras haya pobres y no llegue el Estado, la política social necesitará ser más eficiente.” Luego afirmó que el concepto de inclusión social es vital y es un desafío por el que se debe seguir trabajando.

Añadió que la construcción de la paz también permite mirar con optimismo la necesidad de ir modificando la matriz productiva mediante una política de diversificación, en la cual se pueda generar industria, dándole mayor valor a la ciencia, a la tecnología y a la innovación.

Puso como ejemplo que el Perú cuenta con el Plan Nacional de Diversificación Productiva, que posibilita fabricar aviones de instrucción y entrenamiento, y, próximamente, helicópteros, barcos y sistemas modulares, porque es fundamental “depender menos de los recursos naturales”.

Riqueza

Refirió que la mentalidad colonial convirtió a ambas naciones –y a la región latinoamericana– en proveedoras de grandes cantidades de materias primas; mientras que hoy los países desarrollados poseen importantes industrias que brindan bienestar a sus poblaciones.

“Debemos depender más de nuestro propio esfuerzo, de lo que creamos. La riqueza debe ser la acumulación del trabajo, lo otro es herencia que nos cae y no podemos vivir pensando en construir un futuro vendiendo la herencia que nos dejaron nuestros antepasados, los incas.”

Más adelante, refirió que otro de los retos de ambas naciones es trabajar el proyecto Puyango-Tumbes, al que calificó de “adulto mayor” por la cantidad de años que lleva sin ejecutarse y el que se ha visto inmerso en una controversia que debe resolverse con una empresa local.

Dicho proyecto permitirá beneficiar a los pueblos fronterizos con agua limpia y de calidad, tanto para el consumo humano como para desarrollar planes de irrigación que posibiliten ampliar las tierras de cultivo, subrayó.

Futuro común

Otro aspecto relevante, dijo, es la creación de un mercado binacional fronterizo y la implementación de un circuito económico para un comercio más ordenado, al igual que el tránsito de personas y mercancías entre ambos países que cada día se integran más.

“Conversando en el camino [con Rafael Correa], no solo hemos afirmado más nuestra amistad personal, sino también la visión común que tenemos de la necesidad de salir adelante dos pueblos hermanos que hoy día miran un futuro común.”

Por ello, resaltó que los gabinetes binacionales entre el Perú y Ecuador –y que ambas naciones también realizan con Colombia– son un ejemplo para la comunidad internacional en materia de amistad e integración, porque se basan en un pasado histórico común.

Por otra parte, el Jefe del Estado indicó que el desminado humanitario en la zona fronteriza es una tarea pendiente y un desafío por delante. Recalcó la necesidad de profundizar la confianza entre las Fuerzas Armadas de ambos países.

En la frontera peruano-ecuatoriana hay cerca de 10,000 minas por retirar, estimó. Advirtió que otro riesgo latente en la zona minada se genera por las lluvias torrenciales que modifican los mapas con las coordenadas de las minas, lo cual dificulta aún más las tareas para retirarlas.

Declaración

La cita en Arenillas, que se centró en cinco ejes, culminó con una Declaración Presidencial, en la que los dignatarios “reiteramos nuestro compromiso de fortalecer la integración binacional y de profundizar la cooperación bilateral, a través de iniciativas y esfuerzos conjuntos que permitan el beneficio de los pueblos de ambos países, con énfasis en la zona de integración fronteriza”.

Asimismo, reafirmaron su compromiso con la integración andina y regional, como medio para asegurar el desarrollo económico y social de ambos pueblos.

“Resaltamos la promulgación de la ley peruana que permitirá brindar atención recíproca en salud a los ciudadanos ecuatorianos en ese país. Asimismo, reconocemos el esfuerzo que el Gobierno del Ecuador ha venido realizando para brindar atención de salud gratuita a ciudadanos peruanos en su territorio”, dice el documento.

Durante el Octavo Gabinete Binacional se aprobaron acuerdos de protección a poblaciones vulnerables de la frontera y de desarrollo de proyectos energéticos, con miras a una interconexión eléctrica binacional, así como medidas contra la minería ilegal, el crimen organizado y el cambio climático.

También se acordó la elaboración del protocolo de intervención binacional de erradicación del trabajo infantil, además de un plan acción binacional.

Al culminar la reunión, los gobernantes se mostraron satisfechos con los resultados. Coincidieron en la necesidad de trabajar juntos una posición común sobre la protección de la selva amazónica en la COP20, que se efectuará en Lima del 1 al 12 de diciembre.

Unidos por el desarrollo

El Mandatario de Ecuador destacó que su país y el Perú alcanzarán el desarrollo juntos, así como la inversión ejecutada por más de 7,000 millones de dólares en proyectos conjuntos de la zona fronteriza.

“Nuestros países están condenados al éxito y alcanzaremos el buen desarrollo y el buen vivir, y será más fácil llegar a ese destino hermoso si lo continuamos construyendo juntos.”

Resaltó que ambas naciones cultivan la “verdadera paz” con la presencia de hospitales, educación, puentes, ejes viales de integración, oportunidades de desarrollo para los habitantes de la zona fronteriza, con el desminado humanitario, con turismo, comercio y proyectos compartidos.

Correa afirmó que Ecuador y el Perú son un mismo pueblo. “Para continuar con un proceso inédito a escala mundial, dos países que durante mucho tiempo fueron beligerantes, tuvieron enfrentamientos bélicos, hoy actúan como uno solo, trabajando en conjunto por el beneficio de sus respectivos pueblos.”

Manifestó que la realización del Octavo Gabinete Binacional buscó afianzar la paz entre ambas naciones y continuar construyendo la patria grande con la que soñaron los libertadores de América.

Recalcó la necesidad de impulsar y sacar adelante el proyecto binacional de irrigación Puyango-Tumbes, un “sueño de hace más de 40 años” de la zona fronteriza.

Cifras

5

ejes marcaron el encuentro presidencial y octavo gabinete binacional.

8

adolescentes, víctimas de explotación sexual, fueron repatriadas a ecuador en lo que va del año.