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OPINIÓN
Rómulo Mucho: Minería y Agro juntos en Tía María
21/10/2014

(Por Rómulo Mucho) La dinámica social produce importantes cambios de paradigmas. Los impactos de las empresas mineras que eran evaluados tradicionalmente con énfasis en los puntos de vista económico y financiero, son evaluados ahora bajo la perspectiva social. El proyecto “Tía María” de Southern Copper representa una magnífica oportunidad para evaluar de una manera más minuciosa y real, los verdaderos efectos que una operación minera puede tener sobre el desarrollo de las comunidades de su entorno.

Es la hora de pasar de los reportes de Responsabilidad Social Corporativa tradicionales en los que por lo general se muestran las bien intencionadas acciones de la empresa, a la interacción sistemática con los actores locales utilizando una metodología de trabajo y sus correspondientes indicadores de logros sociales. Si bien es cierto, los principales responsables del desarrollo de los entornos sociales de las operaciones mineras son: (1) el Estado y (2) los pobladores. La empresa minera, como agente económico de inversión y producción, puede y debe asumir el rol de catalizador de la interacción entre ambos.

La noticia de que el virtual alcalde de la provincia de Islay, Richard Ale Cruz “no desestimará la ejecución de proyectos mineros que cuenten con un Estudio de Impacto Ambiental positivo”, muestra una posición objetiva para el desarrollo del Proyecto “Tía María”. La autoridad elegida en los recientes comicios del 05 de octubre está planteando también la intervención del Servicio de Proyectos de la Organización de las Naciones Unidas (UNOPS por sus siglas en inglés), para el análisis de los impactos de este proyecto.  Yo sugeriría además, la participación de la juventud estudiosa de la provincia de Islay, en la medición de los impactos ambientales y sociales de este proyecto, previa capacitación por parte del Estado y/o de Southern Copper, con el apoyo de la Universidad.

Otra actitud que debemos superar es la de no medir. Lo que no se mide no se puede gestionar con eficiencia ni con eficacia. Propongo: (1) la inmediata medición del Índice de Desarrollo Humano de las comunidades del entorno de este proyecto, (2) la propuesta de medidas para mejorar los tres componentes de este índice: salud, educación y nivel de vida y (3) Estimar un escenario futuro en el que se cuantifique la mejora alcanzada en éste índice. Los tres pasos destinados al logro del desarrollo humano de los actores sociales involucrados en este proyecto se deben realizar mediante una interacción fluida entre la población, el Estado y Southern Copper colocando especial cuidado en el desarrollo del agro, la utilización del agua y mejora sustancial tanto de la cobertura como de la calidad en la educación.

Los pobladores de Islay deben cuantificar por un lado, la capacidad de creación de riqueza de la actividad agropecuaria del valle, la capacidad de los terrenos para los sembríos que se adecúan a sus fértiles campos, la capacidad de crianza de animales mayores y menores, la posibilidad de agro exportación y por otro lado, valorar el gran aporte que significa la actividad minera y que Southern Copper ya ha explicado a la población en los talleres informativos y participativos que ha realizado.

No se trata de comparar que beneficio es mayor sino de colocar en un lado de la balanza el beneficio de la minería y del agro juntos, y en el otro lado, la pobreza material que existe en Islay, la falta de trabajo, la baja remuneración en el agro, la educación deficiente, los proyectos de represamiento de agua postergados, la baja calidad en los servicios de salud, etc. La minería no está contra el agro. La minería se complementa con el agro. Minería y agro juntos pueden ser los pilares del desarrollo de Islay.

Es alentador tener autoridades políticas con visión técnica. Cocacharcra, Dean Valdivia y Punta de Bombón no pueden dejar pasar esta gran oportunidad para su desarrollo. “Tía María” dinamizará la economía local creando puestos de trabajo tanto para las actividades propias de la operación minera como para de las actividades conexas. Para el Perú, los recursos económicos provenientes de la minería, bien invertidos sobre todo en educación, harán posible el gran salto hacia la investigación científica y el desarrollo de tecnología que asegurarán nuestro verdadero desarrollo sostenible. Tía María es la gran oportunidad para demostrar que es posible la convivencia en armonía entre el agro y la minería, entre lo rural y lo urbano, entre la empresa, el Estado y la población.

* Ex Viceministro de Minas 


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