El ministro de Planificación Federal adelantó que eliminarán las compensaciones tarifarias que perciben "aquellos sectores que no lo necesitan". Trabajan para que este año no haya cortes de luz.
Como ya sucedió con el gas y con el agua, la luz se encamina a ser el próximo servicio público al que el Gobierno le va a quitar los subsidios.
Ayer, el ministro de Planificación Julio De Vido, aseguró que el Gobierno “continuará con su política de reducción de subsidios”, lo que impactaría en el costo de la electricidad que pagan los usuarios.
El funcionario se refirió al tema en declaraciones a radio América desde la Guayana Francesa, donde participó del lanzamiento del satélite Arsat-1. Acerca de las tarifas de la luz, De Vido sostuvo que la política del Gobierno “desde 2008 fue la de reducción paulatina de subsidios en aquellos sectores que no lo necesitan ”, y que esto se mantendrá aunque aún no hay un cronograma, aclaró.
“Los servicios en Argentina son los más baratos de la región”, dijo el ministro de Planificación. También, observó que hay “algunas zonas críticas, como el conurbano bonaerense y barrios de Capital Federal, donde hay una política urbana irresponsable de construir edificios de alto nivel de ocupación y sin invertir en infraestructura por parte de la Ciudad y algunos distritos del Conurbano”.
De Vido además, señaló que “las temperaturas de diciembre del año pasado fueron récord histórico”, y afirmó que “cuando el clima se pone en una situación tan extrema, algún inconveniente genera”.
Aunque De Vido dijo no tener “en agenda decisiones a tomar en ese sentido (por las subas de tarifas)”, la reducción de subsidios siempre impactó en la factura. Por caso, al no restablecer subsidios parciales en los meses más fríos del año, como venía haciendo desde 2009, el Gobierno a plicó un aumento de hasta 308% en el precio de la luz que usaron durante el último invierno los mayores consumidores residenciales de la Capital y el Gran Buenos Aires. De Vido confirmó que la política oficial continuará y también prometió que las obras de infraestructura encaradas junto con Edesur y Edenor permitirán reducir los cortes de luz, que fueron moneda corriente en el último verano.
“Hemos hecho mil obras solamente con Edesur y otras tantas en Edenor. Esperamos que haya una mejor performance”, dijo De Vido, y agregó: “ Lo ideal sería que no hubiera cortes, pero cuando el clima impone una situación tan extrema, algún inconveniente genera obviamente”.
La reducción de subsidios a los servicios continuará de manera "paulatina", confirmó Julio de Vido. El ministro de Planificación Federal aclaró que por el momento no existe "una agenda o un cronograma" para avanzar con las quitas, pero la intención es proseguir con la eliminación del beneficio para "aquellos sectores que no lo necesitan".
El funcionario confirmó además que en este invierno se realizaron más de dos mil obras con las concesionarias Edesur y Edenor para evitar que se repitan los masivos cortes de luz del año pasado. Aunque reconoció que esperan para este verano "una mucha mejor performance", De Vido recordó que "las temperaturas de diciembre del año pasado fueron un récord histórico de la Argentina", por lo que si se repite un escenario similar no está claro cuál podría ser el efecto.
"Las zonas más críticas son el Conurbano y algunos barrios de la Capital Federal, donde hubo una política irresponsable de alta ocupación sin inversión", explicó el ministro de Planificación Federal, en diálogo con Dady Brieva, en radio América.
Desde Guayana Francesa, hacia donde viajó para presenciar el lanzamiento del satélite Arsat-1, reconoció además que algunos sindicalistas "creen en la necesidad" de que haya un plus salarial a fin de año.
Pero a diferencia del secretario de Comercio, Augusto Costa, prefirió ser más cauto a la hora de comprar la evolución de los precios y los salarios: "No sé si este año la presión es mayor o menor que otros". Lo que sí destacó es que este año, después de las paritarias hubo una "reactivación del consumo" hacia mediados de junio gracias al cobro de la primera cuota de los distintos acuerdos sectoriales.
Por último, De Vido, uno de los funcionarios con mayor vínculo con el mundo sindical, aclaró que se siente "muy cómodo" con la conducción de Antonio Caló en la CGT oficialista, pero no se mostró en contra de una reunificación de las centrales. "Los compañeros siempre se van a dar el modo de organización que ellos crean más conveniente", concluyó.
El ministro de Planificación, Julio De Vido, confirmó ayer en declaraciones radiales que el Gobierno avanzará en la quita de subsidios a la energía eléctrica, con el consecuente aumento de tarifas que esa medida provocaría. Sin embargo, no dio precisiones con respecto al momento en que comenzaría a aplicarse ese recorte, que se anunció en varias ocasiones, en especial en la primera parte del año.
Según el funcionario, la reducción de subsidios continuará de forma "paulatina", si bien por el momento no existe "una agenda o un cronograma" para avanzar con las quitas. De todas maneras, confirmó que la intención es continuar con la eliminación del beneficio para "aquellos sectores que no lo necesitan". En forma paralela, el titular de Planificación informó que durante el invierno pasado se realizaron más de 2000 obras en las zonas de Edenor y de Edesur para evitar que se repita la crisis eléctrica del verano pasado. Sostuvo que para este año se espera una "mucho mejor performance", pero reconoció que si se repiten las temperaturas de diciembre no está garantizado que no haya cortes.
"Las zonas más críticas son el conurbano y algunos barrios de la Capital Federal, donde hubo una política irresponsable de alta ocupación sin inversión", explicó De Vido.
En marzo se anunciaron quitas de subsidios al gas, que derivaron en fuertes aumentos de tarifas.
El ministro de Planificación Federal afirmó que se están realizando unas 2.000 obras en las zonas de distribución de Edesur y Edenor con aportes del Tesoro nacional.
Por este motivo, manifestó que espera una "mucho mejor performance" en cuanto al servicio energético durante el próximo verano.
Así lo manifestó en declaraciones a Radio América desde la Guayana Francesa, donde participa del lanzamiento del satélite Arsat-1.
Zonas críticas. Observó que hay "algunas zonas críticas, como el Conurbano bonaerense y barrios de Capital Federal, donde hay una política urbana irresponsable de construir edificios de alto nivel de ocupación y sin invertir en infraestructura por parte de la Ciudad y algunos distritos del conurbano".
Asimismo, señaló que "las temperaturas de diciembre del año pasado fueron récord histórico", y afirmó que "cuando el clima se pone en una situación tan extrema, algún inconveniente genera".
Tarifas y subsidios. Acerca de las tarifas de electricidad, sostuvo que la política del Gobierno "desde 2008 fue la de reducción paulatina de subsidios en aquellos sectores que no lo necesitan", y que esto se mantendrá aunque aún no hay un cronograma.
"Los servicios en Argentina son los más baratos de la región", concluyó el ministro de Planificación.
Por: Silvia Peco.
Avellaneda se sumó a los distritos del país donde la Justicia suspendió los aumentos en las facturas de gas que rigen desde el 1 de abril. Se teme que los fallos se empiecen a acumular en el conurbano, en especial en los partidos que responden al Frente Renovador, ya que esta fuerza está impulsando las demandas judiciales. Hasta ahora, las cautelares que frenan los ajustes incluyen Mendoza, San Luis, Santa Fe, y unas 20 localidades de Buenos Aires.
Estas dificultades en el plano judicial y político para seguir con la reducción de subsidios se suman a cierto convencimiento del Gobierno de que en este momento lo primordial es sostener el nivel de actividad, por lo que no debería afectarse más el poder adquisitivo de los salarios.
En ese contexto, se frustró el proyecto original del Gobierno de lanzar un aumento en las tarifas de Edenor y Edesur en septiembre. Consultado ayer en Guyana, el ministro Julio De Vido fue elusivo. El Gobierno "continuará con su política de reducción de subsidios", aseguró, pero también dijo que por el momento "no está en la agenda tomar decisiones" sobre un aumento en las tarifas eléctricas.
Por lo pronto, el Gobierno autorizó una partida de $ 500 millones para que Edenor acelere obras en las redes y se cree que en los próximos días Edesur recibiría otros $ 250 millones, que se sumarían a igual suma percibida en marzo, con lo que se igualarían los fondos para las dos distribuidoras. El dinero llega a las empresas a través de un préstamo de Cammesa, la empresa controlada por el Estado que opera el despacho eléctrico, y se compensará cuando se revisen las tarifas.
Estos préstamos se suman a lo que las compañías recaudan a través del FOCEDE en las facturas, con un monto para los hogares que oscila entre 4 y 150 pesos, y que quedó desactualizado después de dos años de aplicación, de modo que no alcanza para inversiones.
Los recursos de ese fondo y los adelantos de Cammesa deben destinarse al mantenimiento de las instalaciones antes de que llegue el verano. Estas obras las decide el Ministerio de Planificación desde los cortes de luz de enero pasado, pero ese mayor control oficial no alcanzaría para enfrentar el retraso acumulado en las redes de distribución frente al crecimiento de la demanda de los últimos años.
Sobre el tema, De Vido aseguró que se hicieron mil obras en la zona de Edesur y otras tantas en las de Edenor, pero no descartó nuevos cortes ante temperaturas altas. La posibilidad de que se extiendan otra vez las interrupciones del suministro también conspira contra una adecuación de las tarifas.
Es difícil imaginar que el Gobierno decidirá un ajuste en electricidad como el resuelto para gas que implicó un alza del 300% para los consumidores medios. La combinación de un alza fuerte en las facturas y cortes de luz se convertiría en otro elemento de malestar social hacia fin de año, momento para el cual el Gobierno se prepara con precaución. Sin embargo, los que tienen contacto con los despachos oficiales no descartan un incremento moderado, probablemente nuevamente de una suma fija, para alimentar el fondo para obras.
El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, afirmó hoy que el Gobierno espera una "mucho mejor performance" del sistema de suministro de energía el próximo verano, luego de los cortes registrados en diciembre y enero, algunos de los cuales se extendieron por varias semanas en barrios de la Capital Federal.
"Estamos haciendo casi mil obras con Edesur y casi otras tantas con Edenor, con aportes del Tesoro Nacional y esperamos obviamente una mucho mejor performance. Tenemos que recordar que las temperaturas de diciembre y enero pasado fueron récord histórico de la Argentina", remarcó el funcionario.
En diálogo con radio América, aseguró incluso que estando "en Washington, con 10 centímetros de nieve, hemos estado una semana sin luz".
"Lo ideal sería que no hubiera cortes, pero cuando el clima se pone en una situación tan extrema, algún inconveniente genera, sea por lluvia, viento o temperatura. Hemos trabajado muchísimo este invierno y las obras van a significar una enorme mejora, un enorme progreso", agregó.
En el caso de esta Capital, durante diciembre y enero se registraron cortes en distintas zonas de Villa Santa Rita, Villa General Mitre, Caballito, Flores, Barracas, Boedo, Monte Castro, Parque Chas, Villa del Parque, Paternal, San Telmo y Floresta, donde vecinos de un edificio de la avenida Juan B. Justo al 6.700 estuvieron más de un mes sin luz.
Iguales fallas se registraron en ciudades del interior y el Conurbano.
Sobre las tarifas, De Vido expresó que "la política oficial desde 2008 ha sido la reducción paulatina de subsidios para quienes no lo necesitan. Lo que no tengo es una agenda o un cronograma o decisiones a tomar en ese sentido".