Por Mariano Zalazar.

El viernes se hizo la elección de autoridades del Sindicato Petróleo y Gas Privado de Cuyo y terminó en escándalo. El actual secretario general y diputado nacional kirchnerista, Dante González, buscaba su re reelección y por primera vez en 25 años hubo competencia.

Enfrente estaba una lista encabezada por David Castro y vinculada al Frente Renovador de Sergio Massa. Hay denuncias de robo de urnas, compra de votos y todo tipo de anomalías, y un final más polémico aún, porque la junta electoral decidió anular la votación para que se haga nuevamente.

En un ambiente tan crispado, naturalmente las dos partes tienen versiones contrapuestas. La opositora lista Naranja dice que le ganó por 1.400 votos de diferencia a la oficialista Azul y Blanca.

González no dice haber ganado, pero asegura que “los compañeros votaron presionados como nunca. Les ofrecían 5.000 pesos por voto y no podían decir que no porque, si no, les amenazaban a la familia”.

Castro y quien lo secundaba, Daniel Mantovani, aseguraron por su parte que cuando ya se estaba terminando de contar los votos, “simpatizantes de la lista Azul y Blanca que estaban en la sede principal del gremio irrumpieron violentamente en el lugar donde se estaba haciendo el escrutinio, golpeando a los cuatro veedores del Ministerio de Trabajo de la Nación y a integrantes de la lista Naranja”.

Luego de esto, según el relato que la lista opositora hace en una solicitada publicada en la página 8, “sustrajeron 120 votos de esa mesa y la urna correspondiente”.

El texto apunta luego a la junta electoral, a la que acusa, primero, de anular esa mesa e impedir el escrutinio de más de 200 votos que habían quedado y luego, de aceptar “sin fundar su resolución ni dar explicación alguna” el pedido oficialista de anular toda la elección.

Por esto, anuncian que recurrirán al Ministerio de Trabajo de la Nación y a la Justicia para que “se respete la clara voluntad de los afiliados”.

González, en diálogo con este diario, no se quedó atrás en las denuncias y además del pago de votos y amenazas, aseguró que también hubo robo de urnas que favorecían a su lista.

“Castro es un delincuente servidor de la Federación que le ha robado siempre al gremio y nunca agarró una pala para trabajar”, disparó el diputado nacional que se autodefine como “un laburante”.

Una semana antes de las polémicas elecciones en el Sindicato de Petróleo y Gas de Cuyo, dos ex empleados petroleros presentaron una denuncia en la Fiscalía de Delitos Complejos contra Dante González por presunto fraude por 30 millones de pesos. Entre las acusaciones, aseguran que el diputado nacional del Frente para la Victoria maneja el gremio a discreción y que, además de haber dilapidado una cifra millonaria, se enriqueció a través de testaferros de empresas que serían de su propiedad.

De acuerdo con la denuncia que ingresó hace 10 días a la Fiscalía, el Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Cuyo debería tener 33,5 millones de pesos en sus cuentas del Banco Nación, ya que durante 2014 se generaron ingresos por 58,5 millones y gastos por 25 millones. Sin embargo, de acuerdo con la información bancaria que figura en el expediente, las cuentan acreditan sólo 2,5 millones, es decir, 30,5 millones menos del saldo que debería estar acreditado según los denunciantes.

La denuncia también apunta contra los integrantes de la Comisión Revisora de Cuentas del sindicato -Pablo Ramón y Carlos Martínez-, contra el tesorero Fernando González y también contra la contadora Érica Muñoz, quien sería pariente política del titular del gremio. Además, da cuenta de una presunta red de negociados a través de testaferros que beneficiarían a González, quien está al frente de la región cuyana del gremio desde 2007, mismo año en el que asumió como diputado nacional.

Entre otros puntos, los querellantes afirman que la clínica San Francisco de Malargüe, que brinda atención a los afiliados del gremio, es propiedad de González, y aseguran que el diputado nacional creó empresas de servicios petroleros y las registró a nombre de terceros. Por ejemplo, la firma G3 MZA Oil, cuyo directorio está integrado por su esposa, Andrea Fabiana Jaque, a quien González definió oportunamente como "ama de casa". Esta empresa generó controversia desde su creación, a comienzos de 2010.

Además de la esposa de González, otra socia fundadora de la firma fue la mujer del ex director de Petróleo de la provincia Daniel Cibeira (Nancy Pacheco). De hecho, esta situación le costó la renuncia al entonces funcionario de la Subsecretaría de Hidrocarburos. Este caso fue retomado por los denunciantes y presentado a la Fiscalía Especial como parte de las acusaciones que piden que se investiguen.

Los denunciantes fueron despedidos este año de las empresas en las que trabajaban y aseguran que fue consecuencia de haber denunciado irregularidades en el gremio, al igual que otros 50 trabajadores que conformaron la autodenominada agrupación "los despedidos de Dante". "En mi caso trabajé más de 10 años en la empresa y fuimos echados sin justificación alguna, en mi foja no había ni siquiera un llamado de atención", aseguró uno de los denunciantes en diálogo con MDZ.

Esta denuncia se suma a la controversia generada el viernes que opaca la figura de González, quien habría sido derrotado en las elecciones de autoridades del gremio por la lista opositora encabezada por David Castro. Sin embargo, el proceso fue anulado por el robo de urnas. Justamente, Castro cargó contra González, a quien acusó de los actos vandálicos que motivas la suspensión.

Fueron anuladas en la noche de este viernes las elecciones en el Sindicato Petróleo y Gas Privado de Cuyo en las que competían el actual secretario general y diputado nacional, Dante González, buscando su reelección, y el candidato de la lista Naranja, David Castro.

Las repercusiones no se hicieron esperar en la mañana de este sábado sobre todo porque los dos principales protagonistas hicieron escuchar graves denuncias y acusaciones.

El robo de una urna o de la mitad de los votos, según la denuncia, fue la causal que motivó a la junta electoral a anular las elecciones. 

El oficialismo

Consultado por El Sol, Dante González manifestó que “la junta electoral anuló las elecciones por los inconvenientes que se presentaron durante su desarrollo”.

Denunció que “unas 200 personas venidas de afuera, de Buenos Aires, de Santa Cruz, presionaron a la gente, hicieron asambleas, incluso robaron una urna de la sede partidaria donde estaba la junta electoral, en calle Saavedra 128, San José, Guaymallén”.

Dante González responsabilizó de estos actos “a unos malhechores que responden a la Federación que dirige Alberto Roberti”.

Destacó que “todo esto lo quisieron convertir en un hecho político, querían llevar buenos resultados para el “masismo”.

Agregó que “los mismos malhechores después se fueron hasta la terminal de ómnibus y provocaron daños en sus instalaciones”.

Dijo también que el apoderado de su sector ya hizo las denuncias respectivas y que “el martes próximo daremos una explicación más amplia y oficial sobre los graves hechos que generaron la anulación de las elecciones”. 

La oposición respondió

“Es una vergüenza que un diputado nacional, que se hace llamar “Dante de la gente”, haya protagonizado, junto a cuatro de sus allegados, el robo de la mitad de los votos de una urna en la sede del sindicato” dijo David Castro, candidato de la lista Naranja que compitió con Dante González este viernes. “Cuando vio que perdía las elecciones hizo el escándalo para que la junta electoral las anulara”.

“Ganamos por 1.500 votos de diferencia. Tenemos 2.300 afiliados así que logramos el 70 por ciento de los votos contra el 30 por ciento del diputado nacional” dijo Castro.

En cuanto a los pasos a seguir manifestó que el martes se presentarán en la justicia para denunciar “esta tremenda agresión” y vamos a convocar a un plenario de secretarios generales para decretar un paro general, en todo el país, para el jueves próximo en repudio a lo que se hizo en Mendoza.

“Denuncio la complicidad del gobierno nacional y del ministerio de Trabajo de la Nación en lo que hizo González” indicó el dirigente de la lista Naranja. “Le pegaron a una mujer para robarse los votos y ni los gendarmes ni los dos veedores del gobierno hicieron nada para evitarlo” agregó.

“Son mentiras que vinieron de afuera para molestar. Aquí llegaron trabajadores y los secretarios generales de todas las seccionales que tiene la federación en el país. Vinieron a garantizar un proceso en paz pero fue “el Dante de la gente” el que violentó todo”.

Aclaró que los hechos ocurrieron este viernes alrededor de las 20 cuando ya se había realizado la votación, todas las urnas cerradas y acompañadas de las listas firmadas por los presidentes de mesa y los fiscales.