Por Ing. Orlando Valdés (*)
Observamos que la planilla posee una columna con el título “CONCEPTOS” y otra denominada “PRESUPUESTO ECONÓMICO”.
Esta última, a su vez, se subdivide en “Argentina”, “Paraguay”, “Común” y “Total”. La columna “Común” es inusual y amerita una explicación de su existencia por parte de los funcionarios del área financiera y contabilidad de la EBY.
También se verifica que la previsión de pago de EBISA, por el retiro de energía por un monto aproximado a US$ 900.000.000 durante el periodo 2012, no figura en el presupuesto. En su reemplazo existe una previsión de ingreso de EBISA de apenas US$ 32.000.000. En realidad, este monto corresponde al pago anual que CAMMESA realiza a Yacyretá por la prestación de los servicios complementarios al sistema de interconexión argentino. Sin embargo, se lo computan como parte de pago de la deuda de EBISA con la EBY.
Los US$ 32.000.000 están identificados como un ingreso de Argentina para la EBY, como pago por la energía a ser consumida, según se observa en el presupuesto.
Ya el ingreso previsto por el consumo de energía de la ANDE se imputa en la cuenta “COMÚN”, cuyo valor estimado para dicho año es de US$ 94.883.600, superior a lo estimado para EBISA en el 2012. Las autoridades paraguayas de la EBY deberían informar por qué este rubro no figura en la columna “PARAGUAY” y sí en la columna “COMÚN”.
También se asienta una supuesta deuda de la ANDE de US$ 181.533.300, desde luego que también en la columna “COMÚN”. Según el presupuesto, los recursos por venta de energía provenientes del Paraguay para el año 2012 son cero.
Con esta “interesante” forma de asentar la previsión de recursos originados por la venta de energía concluye que por venta de energía en el año 2012 la EBY debe recaudar US$ 314.000.000, de los cuales la ANDE debe pagar US$ 206.706.000 y EBISA la suma de US$ 32.000.000. En ningún lugar del documento figura el monto de la deuda que EBISA mantiene con el ente, pero sí figura la ínfima deuda de la ANDE
Continuando con la fiesta de números, aparecen los “Reintegros del Gobierno Argentino”, no previsto en ningún documento de la binacional, ni aceptado por las Altas Partes, ni siquiera por el Consejo de Administración. Esto, en la práctica, significa que Argentina no paga por su consumo eléctrico y que supuestamente devuelve algo que no debió haber retenido, sin aclarar en qué condiciones lo realiza. En la EBY no existe documentación legal respaldatoria para hacer de este tipo de operación financiera.
Podríamos continuar desglosando las barbaridades cometidas en la binacional y que fácilmente pueden ser identificadas en esta planilla “PRESUPUESTO GENERAL 2012-FUENTE Y USOS DE FONDOS-CUADRO COMPARATIVO DE GASTOS POR MARGEN”.
No lo hacemos para no aburrir con disquisiciones técnicas a los estimados y distinguidos lectores, además de que esto es una obligación de los funcionarios de la EBY quienes, a pesar de ser extraordinaria e inmerecidamente bien remunerados, algunos no cumplen con su compromiso con nuestra nación.
Nuestro presidente, y sus principales asesores, como siempre, están siendo embaucados por los mismos personajes que llevaron a la entidad a la situación de pérdida total de su institucionalidad.
Me gustaría estar equivocado, pero los documentos registran las graves violaciones al tratado y cualquier disposición legal establecida por las altas partes contratantes. El manejo de la entidad está al arbitrio de la margen izquierda, hecho que es posible gracias al silencio cómplice de algunos empleados de las oficinas paraguayas de la binacional.
Deseamos que el actual gobierno ejerza nuestra soberanía en la binacional tomando las decisiones más acertadas para beneficio de la empobrecida población paraguaya.
(*) Ingeniero electricista
La Cancillería Nacional debería evaluar en algún momento la posibilidad de someter la controversia planteada con Argentina sobre Yacyretá a un arbitraje internacional, tal como lo establece el Tratado Americano de Soluciones Pacíficas conocido como Pacto de Bogotá y, en última instancia, ante el Tribunal de La Haya.
“Yo preferiría el arbitraje, porque será más rápido y menos costoso, y puede llegarse a una solución de manera mucho más breve que yendo al Tribunal de La Haya, que siempre es un procedimiento mucho más largo, más tedioso y, sobre todo, más caro”, explicó a ABC Color el doctor José Antonio Moreno Ruffinelli.
Indicó que a la Argentina le conviene este statu quo, por lo que nuestra cancillería debe realizar todos los esfuerzos necesarios para acelerar la negociación. “Lo que pasa es que en una negociación hay dos partes, y cuando una se pone en una posición determinada e intransigente, como aparenta ser la de la Argentina, entonces la cancillería tomará la decisión que más sea conveniente a los intereses nacionales. Estoy seguro de que el canciller, con la experiencia que tiene, sabrá evaluar el momento preciso para tomar esta determinación”, agregó el excanciller.
Consultado respecto a la posibilidad de plantear la propia nulidad del Tratado, Moreno Ruffinelli señaló que dicho proceso sería mucho más complejo. “Es mucho más fácil buscar una solución positiva, que sea favorable a los intereses nacionales, obviamente”, reconoció. En ese sentido, sugirió que se exija primero a las partes, en este caso a la Argentina, que permita una auditoría de la deuda de la EBY; y en segundo lugar, que dicha deuda consiste en aportes y no préstamos; por tanto, no hay intereses. “En estos puntos debemos ponernos de acuerdo previamente para luego avanzar en los demás y dejar sin efecto la Nota Reversal de 1992, que hasta ahora ellos (los argentinos) están aplicando”, manifestó el abogado.
Recordó que durante la época en que fue canciller remitió a la Argentina una cantidad de notas pidiéndoles el tratamiento de estos temas con la mayor urgencia. “Se trataba de solucionar lo que yo llamaba el desorden jurídico de Yacyretá; porque, por un lado, había notas reversales aprobadas por Paraguay y rechazadas por Argentina, y viceversa, que generaba un verdadero caos. Ese es un tema que se debe solucionar ahora; este es el momento para ello”, dijo.
Si se llevara a un arbitraje la cuestión de Yacyretá, se deberá solicitar al Consejo de la Organización de los Estados Americanos (OEA) la conformación de una Comisión de Investigación y Conciliación, la que tendrá a su cargo proponer las bases aceptables de solución, explicó.
El senado aprobó ayer un proyecto de resolución con origen en Diputados por el cual se crea la mencionada comisión bicameral, y se espera que el próximo lunes, en reunión de mesa directiva de la Cámara Alta, se nombre a cinco integrantes de la misma. El senador Miguel López Perito, uno de los que fundamentaron con documentos la necesidad de que el Congreso intervenga en las negociaciones sobre la renegociación del Anexo C del tratado de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) ante el “oscuro” manejo de la Argentina, dijo que plantearán que dos legisladores integren el grupo negociador del Gobierno paraguayo.
“Este es un problema grave para nuestro país, y estas cuentas son oscuras, imprecisas y engañosas en muchos casos. Por eso se justifica que se constituya inmediatamente la comisión bicameral para hacer el seguimiento de la negociación de Yacyretá, además anticipo que vamos a pedir que de esa comisión pasen a formar parte dos representantes, un senador y un diputado” de la las negociaciones, dijo López Perito.
El senador de Avanza País junto a su colega colorado Arnoldo Wiens expusieron durante la sesión datos de una serie de irregularidades por parte de la Argentina, que alega una supuesta deuda de nuestro país para no ceder nuestros legítimos derechos como copropietarios de la EBY.
Muy por el contrario a la tesis argentina, es el vecino país el que según los datos oficiales de la institución el único que mantendría “una deuda de al menos 6.656 millones al año 2012, y que al año 2014 es mucho más” por la compra de energía, incluso a un precio inferior a lo que dicta el tratado, según explicó López Perito remarcando que dicha suma constituye el equivalente a la mitad de nuestro Presupuesto General de la Nación.
El mismo agregó que sobre este caso de la deuda de Argentina con la EBY existen tres datos distintos, en los que los vecinos intentan alegar un supuesto pago millonario sobre los cuales realmente no hay registro válido.
Además, insistió en reiterar el pedido de una auditoría a la EBY. “Mientras no se haga una auditoría con las mejores auditoras que tenemos a nivel internacional no vamos a saber efectivamente cuáles son los números reales, aquí hay una mentira”, apuntó el senador.