El oficialismo apurará la semana que viene el tratamiento legislativo de los proyectos mineros de Malargüe, a los que cuales el Gobierno decidió darle un fuerte impulso político, tras años de silenciar todo debate en torno a la minería en Mendoza.
Las declaraciones de Impacto Ambiental para prospección y exploración de Cerro Amarillo y Hierro Indio serán discutidas en una reunión conjunta de las comisiones de Ambiente y de Minería del Senado provincial que se hará el jueves 9. "Esperamos que el debate se dé de manera rápida y que la aprobación sea sencilla", indicó al respecto el jefe del bloque de senadores del PJ, Fernando Simón.
Simón aclaró de todos modos que en la reunión del 9 "se escuchará a todos los que haya que escuchar" antes del tratamiento en el recinto. Los ambientalistas, en ese sentido, ya adelantaron que van a participar en la reunión, aunque se concentrarían en sólo uno de los proyectos: Cerro Amarillo.
Este emprendimiento apunta a la extracción de cobre. Eduardo Sosa, de Oikos, expresó que esa organización ambiental "ha pedido al Ministerio de Tierras el estado de avance del inventario de glaciares para saber si Cerro Amarillo está en un ambiente periglacial. En ese caso, no se permite explotación minera porque está prohibido por ley y sería irresponsable que el proyecto continuara".
Oikos cree que el inventario de glaciares de esa zona está incompleto.
Atentos a San Jorge
Desde que el Gobierno dio un giro a favor de la minería, las organizaciones ambientalistas están en guardia. Pero tienen al parecer más cuestionamientos para la posible reactivación del proyecto San Jorge, aquel para extraer oro y cobre en Uspallata que fue archivado por el propio Francisco Pérez cuando era candidato a gobernador.
La queja de estos sectores tienen que ver con el silencio oficial respecto del proyecto. "Desde el año pasado estamos esperando que nos den la nueva versión de San Jorge", dijo Sosa.
Ayer, la Asamblea Popular por el Agua emitió un comunicado en ese sentido, en el que recalcó: "La nueva propuesta consiste en extraer el mineral de Uspallata, transportarlo por tren a San Juan y procesarlo en esa provincia. Sin embargo, no podemos confirmar ni precisar más de lo que circula en los medios de comunicación ya que no se ha dado a conocer públicamente el expediente que la empresa (de capitales rusos) le habría presentado al Gobierno".
Los proyectos
Con los proyectos de Malargüe, en cambio, hay menos suspenso.
En Cerro Amarillo están implicados capitales estadounidenses para extraer cobre. Hierro Indio, en cambio, apunta a la extracción de hierro.
Oficialmente hay mucho interés en ambos, ya que implicarían una inversión rápida de unos 11 millones de dólares y la exploración daría trabajo a unas 100 personas.
Los ministros de Ambiente (Marcos Zandomeni) y de Tierras (Guillermo Elizalde) han considerado que el impacto ambiental de los proyectos es "mínimo".
Desde comienzos de setiembre el impulso para avanzar es muy fuerte y hace 15 días las DIA tomaron estado parlamentario en el Senado provincial.
Cabe aclarar que las DIA que están en la Legislatura son para la exploración de las zonas. En caso de pasarse a la etapa de explotación en Malargüe, hay que volver a elaborar las DIA y darle intervención directa en el proceso la gente, a través de audiencias públicas.
El proyecto Cerro Indio se ubica a 20 kilómetros de la ciudad de Malargüe y allí ya hubo una mina que fue explotada hace muchos años. En 2009 se planteó su reactivación y en la etapa de prospección o exploración se harán distintas mediciones y se extraerán pequeñas muestras.
Cerro Amarillo, en tanto, se encuentra a 60 kilómetros de Malargüe y apunta a la extracción de cobre. Elizalde dijo que hay dictámenes sectoriales que también darían luz verde para la etapa de exploración.
El organismo pidió informes por el proyecto Cerro Amarillo de explotación de cobre a la vera del río Grande, informó el presidente del COIRCO, Miguel Boyero.
El presidente del Comité Interjurisdiccional del Río Colorado (COIRCO), Miguel Boyero, informó ayer que ese organismo le solicitó información a la provincia de Mendoza sobre el proyecto minero de explotación de cobre, ubicado en la vera del río Grande, que integra la cuenca del río Colorado.
Boyero dijo que “nos enteramos por los diarios de este proyecto y le vamos a requerir información”. El COIRCO tendrá su próxima reunión el jueves 9 de octubre en Casa de Piedra. Será el tercer año, en forma consecutiva, que se reúne en la villa pampeana.
“Estamos pidiendo información sobre los proyectos. De los dos, el que nos interesa es el que está sobre el río Grande, el de cobre”, explicó en diálogo con El Diario. Se trata del proyecto llamado Cerro Amarillo, que -según informaron las organizaciones no gubernamentales- tiene una planta de tratamiento ubicada a la vera del río Grande, uno de los afluentes del río Colorado.
El funcionario se mostró cauteloso de la información que trascendió. “En el COIRCO no tenemos ningún pedido de Mendoza. Es extraño, por eso se lo estamos solicitando. Pero en otras ocasiones hubo audiencia y se gestionó la DIA (Declaración de Impacto Ambiental)”, explicó Boyero.
Se refería a los proyectos de Río Tinto y de Vale sobre extracción de potasio. En todos los casos se aplicó la legislación de Mendoza que establece audiencias públicas.
Las organizaciones ambientalistas mendocinas informaron que el Gobierno de Mendoza otorgó el “impacto ambiental” al proyecto de Cerro Amarillo. Pero se desconoce con rigor qué tipo de permiso se otorgó. Por eso la cautela de Boyero, quien dijo que todo se pondrá sobre la mesa en Casa de Piedra.
“Oficialmente los vamos a dilucidar con el representante de Mendoza en la reunión que mantengamos en Casa de Piedra”, reiteró el presidente del COIRCO.
Sin información
El secretario de Recursos Hídricos, Néstor Lastiri -en diálogo con El Diario-, también adelantó que como delegado provincial no tenía conocimiento que la provincia de Mendoza haya gestionado la declaración de impacto ambiental para el proyecto de Cerro Amarillo. También expresó su preocupación por la información que trascendió en los medios mendocinos sobre el proyecto minero a la vera del río Grande.
Advertencia
Las asociaciones ambientalistas de Mendoza están en alerta por la iniciativa de una firma canadiense de extraer cobre mediante el proyecto Cerro Amarillo, según informó el diario San Rafael.
Ahora se conoció que la empresa busca instalar una planta de tratamiento de este mineral a la vera del río Grande. “Esto podría afectar los recursos del río más caudaloso de la provincia, que es parte de proyectos sumamente importantes para el futuro de Mendoza, como Portezuelo del Viento y el propio trasvase al Atuel, para mejorar el caudal del agua de este último”, señala el diario mendocino.
En un documento firmado por la Asamblea de los Bienes Comunes de Malargüe, explicaron que “se puede instalar una planta de tratamiento de cobre (eso propone el informe) que utilizará agua y químicos biodegradables en un área que es parte de las nacientes del río Grande”.
Plantearon que “los responsables de la empresa Meryllion explicaron que van a sacar cobre, pero no mencionaron el oro, el molibdeno y los otros minerales que sí aparecen en el informe en inglés. No se ha hecho un estudio de geoformas de origen glaciar y periglacial”.
El ambientalista Federico Soria alertaba que “el Gobierno anunció que el proyecto es de cobre; sin embargo, en los hechos concretos, las faenas que se están realizando no son para buscar solo cobre, ya que la propia empresa está diciendo que buscan cobre, oro y molibdeno. Desde ya, si existiera otro mineral no declarado (además de estos tres), es posible que se lo lleven mezclado con lo que haya en los concentrados, tal como ya lo hacen en las explotaciones existentes en el país, como por ejemplo en Bajo La Alumbrera (Catamarca)”.
“De construir la mina en Valle Noble, piensan hacer una instalación de procesamiento de relaves, líquidos y sólidos que sobran de la planta de flotación y que deben confinarse en un lugar seguro, una gran extensión de terreno generando un lago con una presa de cierre, de modo que no infiltre y que no pueda causar un accidente por deslizamiento de los terrenos en que está dispuesto”, indica el informe.
Otro punto señala que “Cerro Amarillo es el doble de grande que el yacimiento El Teniente en Chile, por lo que se deduce que la explotación de la mina va a generar una especie de cráter gigantesco, como el de Chuquicamata, que es conocido en el mundo como una de las alteraciones antrópicas que se pueden ver desde el espacio”.