(Por María José Arias)
Olllanta Humala quiere pasar a la historia como el gran gasificador del Perú y para eso ya adjudicó un gran gasoducto y el año que viene proyecta hacer lo mismo con otro.
El territorio peruano, con sus 28.000.000 de habitantes, hasta hoy sólo suma 200.000 conexiones de gas residencial. El generoso fluido de Camisea va en su casi totalidad a la generación eléctrica, la industria y la exportación.
El Gasoducto del Sur Peruano (GSP), uno de los proyectos estrella del gobierno, llevará el gas natural del centro del país a Cusco, Apurímac, Puno, Arequipa, Moquegua y Tacna. Luego de un largo y polémico concurso, fue adjudicado a la brasilera Odebrecht (75%) y la española Enagás (25%). El tubo de 1.200 km demandará US$ 4.000 millones, financiados por el consorcio privado. El consorcio GDF Suez, Sempra, Techint y TGP, impugnó la licitación en la que fue descalificado, pero el gobierno rechazó de plano los planteos. El proyecto del ducto no considera la venta de energía a Chile, al que sólo se le venderán excedentes.
El Gasoducto Sur tendrá dos secciones y un ducto de líquidos. El Tramo B, formado por el gasoducto y poliducto desde la planta de separación Malvinas al Punto de Conexión (PC). Y el Tramo A, subdividido en Tramo A1 y A2. El A1 irá desde el Punto de Conexión hasta Urcos (Cuzco) e incluye las conexiones a la futura central térmica Quillabamba y a la provincia de Anta. El tramo A2 irá desde Urcos hasta las centrales térmicas de Ilo y de Mollendo.
El consorcio liderado por Odebrecht tendrá la opción de construir el ducto de líquidos desde el punto de conexión (PC) hasta el Sur, para dar vida a un proyecto petroquímico. La puesta en marcha del gasoducto ha reavivado los planes de Braskem para construir un polo petroquímico de US$ 3.500 millones en el Perú.
La brasilera asegura que el proyecto es factible, pese a la competencia del barato ‘shale gas’ estadounidense y las trabas burocráticas. Sergio Thiesen, director de Braskem para Sudamérica dice que “Perú tiene una oportunidadúnica: está situado en un centro consumidor y tiene materia prima”. El Gasoducto Sur es sólo el comienzo, dice Humala.
El Ministerio de Energía y Minas (MEM) se lanzó al proyecto de otro tendido de gas hacia el Norte peruano, al que buscará licitar en 2015. “Estamos estudiando el Gasoducto Norte, que saldría del Cusco al Valle del Mantaro y comenzará a subir hacia Trujillo y Chiclayo para apuntalar el desarrollo de esasregiones”, dijo el ministro Eleodoro Mayorga.
El gasoducto norteño deberá estar acompañado por el tendido de un ducto hacia Ventanilla, con lo que completará un anillo de seguridad energética. Otro anillo será el del Gasoducto del Sur, que se cerrará con el futuro ducto Mollendo (Arequipa)-Marcona (Ica), donde termina el gasoducto operado por Contugas.
Hace 30 años, Shell descubrió valiosos yacimientos de gas natural en plena selva peruana. Tras dos décadas, varios gobiernos y distintas empresas, el maná de hidrocarburos de Camisea cambió radicalmente la matriz energética del Perú. Cifras impactantes: las selvas de Cuzco alojan reservas por 15.6 billones de pies cúbicos (TCF), más que todas las reservas de gas de la Argentina. En dos yacimientos (San Martín y Cashiriari), en el Lote 88, y otros dos (Pagoreni y Mipaya) en el Lote 56.
Su épica construcción demandó una logística compleja que incluyó hasta el traslado de caños y máquinas por helicóptero y la apertura de cientos de kilómetros de caminos. Los dos ductos actuales de Camisea, de 730 y 560 km, suben a 4.800 msnm hasta llegar a la Costa. La argentina Pluspetrol es la operadora del consorcio, junto a varios socios internacionales de peso.
Gracias a Camisea, en la última década Perú logró achicar su déficit energético en US$ 2.000 millones. Más del 40% de su electricidad proviene hoy de la generación térmica, más barata y buena parte de su industria se reconvirtió al gas y ganó competitividad.
Las reservas de Camisea disponibles para el consumo interno serán por ahora las del Lote 88. En un difundido acto, en la planta separadora Malvinas, en Cusco, Perupetro y Pluspetrol acordaron que el Lote 88, unos 37 TCF de recursos probables, será destinado al mercado doméstico a través de los gasoductos Norte y Sur. Hoy, este lote tiene 10.32 TCF, de los cuales 2.5 TCF estaban como aval para la exportación del gas del Lote 56. Pero ahora todas sus reservas quedaron liberadas para el mercado interno, subrayó Humala.
El Lote 58 está en proceso de ser transferido de Petrobras a la colombiana CPNC.
Repsol, operador de parte del Lote 57, acordó con Perú LNG destinar su producció a la exportación de gas natural licuado. El Ministerio de Energía y Minas (MEM) aprobó el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) presentado por Pluspetrol E&P para explorar el Lote 108, en Junín, lo que demandará una inversión de US$ 50 millones.
La exportación de hidrocarburos, se realiza desde hace cinco años, en algunos casos con contratos prepautados en los que las regalías para el Estado son casi inexistentes, como las que se cobran por las ventas a México.
Perú, como ocurrió en Argentina a mediados del siglo XX quiere disfrutar de sus riquezas gasíferas. En el camino, debe despejar la cuestión social-ambiental reglada por su polémica Ley de Consulta Previa con las comunidades. Un primer test es la Reserva Nahua-Nanti, donde aborígenes cuestionan los proyectos de gas con el aval de ONGs y organismos internacionales. La otra “pregunta del millón” de los expertos es si habrá suficiente gas para los nuevos ductos.
El MEM tranquiliza: Perú tiene hoy reservas probadas de gas natural para más de 30 años, 15 TFC , además de capitales y confianza de los inversores para extender ese horizonte.
El Gasoducto del Sur Peruano optimizará los planes de gasificación de la española Gas Natural Fenosa que acordó con el Estado sumar en Perú, a 64.000 clientes residenciales por cañerías, dentro de un área de 300.000 viviendas, a 3.000 industrias y comercios, y a una red de estaciones de GNV.
En el primer planteo, el fluido llegará a través del “transporte virtual” de GNL, en camiones desde la planta de licuefacción de Perú LNG a seis plantas en Arequipa, Tacna, Moquegua e Ilo. La inversión tendrá un piso de US$ 60 millones como mínimo. Y el plazo es de 21 años, prorrogables hasta 60.
Las plantas se construirán en el 1S 2015, tras lo cual vendrá la construcción de redes. El ahorro para los usuarios será del 30%.“Hoy nuestro foco es distribuir al sur en lo que ya estamos comprometidos”, explica José María Margalef, Country Manager de Gas Natural Fenosa (GNF).
El grupo inició su expansión internacional en Argentina, en 1992, con Gas Natural BAN, tras lo cual ha sumado concesiones en Colombia, México y Brasil. En España, es líder en distribución de gas y generación de electricidad.