IAPG ENCABEZADOPAN AMERICAN ENERGY (CABECERA
CINTER ENCABEZADOTGN
SACDE ENCABEZADOSECCO ENCABEZADO
KNIGHT PIÉSOLD ENCABEZADO
SERVICIOS VIALES SANTA FE ENCABEZADO MININGTGS ENCABEZADO
WEGRUCAPANEL
Induser ENCABEZADOSAXUM ENGINEERED SOLUTIONS ENCABEZADO
GSB CABECERA ROTATIVOFERMA ENCABEZADO
METROGAS monoxidoMilicic ENCABEZADO
INFA ENCABEZADOPIPE GROUP ENCABEZAD
cgc encabezadoGenneia ENCABEZADO
EMERGENCIAS ENCABEZDOPWC ENCABEZADO ENER
WIRING ENCABEZADOWICHI TOLEDO ENCABEZADO
METSO CABECERACRISTIAN COACH ENCABEZADO
BERTOTTO ENCABEZADOOMBU CONFECATJOFRE
ALEPH ENERGY ENCABEZADONATURGY (GAS NATURAL FENOSA) encabezado
OPINIÓN
Bjorn Lomborg: Cambio climático, reconocer prioridades verdaderas
23/09/2014
La Tercera

El Secretario General de la ONU Ban Ki-moon cree firmemente que entre todos los problemas del mundo, “el primero en la lista de prioridades es el cambio climático.”1 Es por eso que para el 23 de septiembre ha invitado a los líderes mundiales a una cumbre, “para hacer del cambio climático una prioridad para todos los líderes”.2

Sí, el calentamiento global es un problema real, pero no es la principal prioridad a nivel mundial.

En primer lugar, la ONU sabe. Su programa de extensión The World We Want (El mundo que queremos) le pidió a más de cuatro millones de personas de todas las naciones que mencionen sus prioridades más importantes: mejor educación y atención sanitaria, menos corrupción, más puestos de trabajo y alimento accesible.3 Los cuatro millones ubicaron al calentamiento global en el último lugar, como la prioridad número 17.

Esto no es sorprendente cuando se considera la mitad más pobre de nuestro mundo. Si sus hijos están en riesgo de morir de malaria o malnutrición, esas son sus prioridades. Y regiones más ricas, como América Latina, ubican al calentamiento global en el 12º lugar, reconociendo asimismo que hay muchas y más importantes cosas que arreglar. Incluso los europeos, con las políticas climáticas más fuertes del mundo, ubican al calentamiento global en el décimo lugar.

Sin embargo, los políticos utilizan el alarmismo catastrófico para reforzar la afirmación de que el clima es nuestra “misión generacional”. Christiana Figueres, secretaria ejecutiva de cambio climático de la ONU de Costa Rica nos dice que deberíamos enfocarnos más en el calentamiento global debido al “aumento de la frecuencia e intensidad de incidentes y desastres naturales.”4 Sin embargo, esto es simplemente erróneo. Si nos fijamos en el costo total generado por los costos relacionados con los desastres del tiempo y el clima, el Panel Climático de la ONU considera que sólo va en aumento debido a la presencia de más personas con más riqueza. Cuando se normaliza según esto, las tendencias a largo plazo “no se han atribuido al cambio climático natural o antropogénico.”5 Si queremos un menor número de desastres en el futuro, debemos centrarnos en mejores políticas para mantener a la gente al margen del peligro a través de códigos de construcción, mejores advertencias y una mejor adaptación.
En un análisis sobre comunicación del clima, el University College de Londres descubrió que las estrategias que apelan al miedo son a menudo ineficaces y conducen a la sospecha de que “están tratando de manipularme.”6 Recuerde en 2007, cuando Al Gore nos dijo en su discurso Nobel que la capa de hielo del Polo Norte está “cayendo por un precipicio” y que podría desaparecer en “tan sólo siete años. Siete años a partir de ahora.”7 Eso es ahora. El hielo Ártico definitivamente muestra una reducción a largo plazo, pero de ningún modo una reducción cercana al 100%. Este septiembre, está reducida en alrededor de un 17%.8
Ban Ki-moon declara que el clima nos plantea “riesgos extendidos” mientras nosotros nos estamos dirigiendo hacia un cataclismo.”9 Sin embargo, el Panel Climático de la ONU estima que el costo total del cambio climático a lo largo de la década de 2070 es inferior al 2% del PBI.10 Es un problema, pero no es el fin del mundo.

Compárelo con los verdaderos desafíos que enfrenta el mundo en estos momentos. Todavía hay 1,2 mil millones de personas que viven en la pobreza extrema, y que necesitan crecimiento económico. Durante los últimos 30 años, China ha sacado a 680 millones de personas de la pobreza 11 – la mayor reducción de la pobreza jamás vista– y lo hicieron con enormes cantidades de carbón barato aunque muy contaminante.

Sin embargo, líderes occidentales bien intencionados llegarán a Nueva York para reiterar la solución al calentamiento global que ha fracasado durante más de dos décadas: hay que cambiar a energías renovables. Pero esto es hipócrita: según la Agencia Internacional de la Energía el mundo rico obtiene sólo el 8% de su energía de fuentes renovables y sólo el 0,9% de la energía solar y la eólica. África obtiene casi el 50% de energías renovables, pero eso es porque es pobre – las energías renovables son en su mayoría madera que mata a más de medio millón al año debido a la contaminación del aire interior 12 y contribuye a la deforestación.

No sorprende que cuando los líderes africanos llegaron a Washington el mes pasado, dijeron que quieren usar más carbón.13 Incluso el presidente del Banco Mundial preocupado por el clima aceptó que “nunca ha habido un país que se ha desarrollado con energía intermitente.”

Un nuevo estudio del Centro para el Desarrollo Global muestra crudamente el costo de impulsar las energías renovables. Gastar 10 mil millones de dólares en energías renovables en África puede sacar a 20 millones de las tinieblas y de la pobreza. Pero gastar 10 mil millones en gas sacaría a 90 millones. Insistir en las energías renovables significa dejar deliberadamente 70 millones de personas en la oscuridad.

Esto no significa que no debamos hacer frente al calentamiento global. Pero tenemos que darnos cuenta de que las energías renovables son todavía demasiado costosas. En lugar de gastar miles de millones en los actuales subsidios, debemos invertir mucho más en la innovación verde para reducir el costo de las futuras generaciones en energía limpia. Cuando actualicemos el precio de las energías verdes por debajo de los combustibles fósiles, todo el mundo las adoptará.

Pero, en un mundo en el que 4 millones mueren cada año debido a la quema de madera renovable y estiércol en fogatas en el ambiente interior, mientras la pobreza, la falta de agua potable, las enfermedades infecciosas, la educación deficiente y la escasez de alimento afligen a miles de millones, no podemos afirmar con rostro impávido que el clima debería ser nuestra principal prioridad.

* Académico e investigador


Vuelva a HOME

;