Son muchos los ingredientes que conforman la receta mágica para alcanzar la felicidad en el trabajo. Todos y cada uno de ellos son importantes y aportan al trabajador una razón más para sentirse un poco más feliz a la hora de ir a trabajar cada día. Si bien, los encuestados han valorado del 1 al 10 cada uno de ellos, según la importancia que tiene para ellos cada aspecto.
Los factores relacionados con el mundo laboral que son más importantes para ser feliz en el trabajo según los encuestados son: en primer lugar, el ambiente laboral (con 8,4 puntos de media), seguido del sueldo y la realización personal a los que les dan la misma puntuación, 8,2. A continuación, y por encima del 8, valoran un buen horario y el desarrollo de las habilidades personales. A éstos le sigue la adecuación de la formación a las funciones del puesto y el jefe. Menos importantes que los anteriores resultan los beneficios sociales, la cercanía al lugar de trabajo y el reconocimiento de amigos y superiores.
Las mujeres, en mayor medida que los hombres, consideran de mayor importancia todos los factores sugeridos para ser feliz en el trabajo.
Mientras que las personas de mayor edad le dan más importancia al desarrollo de sus habilidades, a la cercanía del trabajo, al reconocimiento, a los beneficios sociales y a la adecuación del puesto a su formación, los más jóvenes le dan más importancia a la realización personal y al jefe.
Al mismo tiempo, las personas con mayores ingresos en el hogar le dan más importancia a la adecuación del puesto a la formación y a su realización personal, frente a los que tienen menores ingresos que le dan más importancia a la cercanía del puesto y al desarrollo de sus habilidades.
Cuanto mayor es el nivel de estudios, mayor importancia se le da a la realización personal. Aquellos que son felices en el trabajo, le dan más importancia a todos los aspectos sugeridos como potenciadores de la felicidad profesional.
La vocación y el reconocimiento social hacen más feliz al profesional
A la hora de elegir la profesión que uno va a ejercer durante toda su vida, uno de los mayores dilemas es si realizar la elección según la vocación o las salidas profesionales que tiene en la sociedad y el mercado laboral actual. Lo ideal es poder combinar ambos factores, pero a veces, resulta complicado.
Como se ha insistido, el trabajo es una de las fuentes principales de la felicidad del ser humano, y según la mayoría de los encuestados, es muy importante ejercer una profesión de forma vocacional para ser feliz.
Así, más de 3 de cada 4 piensa que para ser feliz en el trabajo hay que tener vocación para desarrollarlo, frente a un 22,8% que opina que no es necesario tenerla.
Son las personas de mayor edad y aquellos que aseguran que son felices en su profesión quienes, en mayor medida que el resto, aseguran que para ser feliz en el trabajo es necesario tener vocación profesional para desarrollarlo (un 79,3% y 81,67%, respectivamente).
Existen profesiones con mayor reconocimiento social que otras. El prestigio de ejercerlas podría ser un factor que aumentase la autoestima del trabajador y que por ello, aumentara también el nivel de felicidad en su trabajo.
A través de la encuesta, Adecco ha querido averiguarlo y la respuesta ha sido contundente: según el 76,7% de los encuestados, un trabajo con reconocimiento social hace más feliz al profesional, frente a un 23,2% que piensa que no necesariamente es así.
Son precisamente las personas que aseguran que son felices en su profesión quienes, en mayor medida que el resto, piensan que tener un trabajo con reconocimiento social hace más feliz al profesional (78,6% frente al 68,7%). Entre hombres y mujeres existe una leve diferencia también: el 78% de los hombres opina que sí, mientras que un porcentaje menor de mujeres (75,5%) cree que el reconocimiento social hace más feliz al profesional.