River Plate "habló" en la cancha y goleó a Independiente 4-1 en el Monumental para consolidarse y lucirse en la cima del Torneo de Primera División . Por la octava fecha del certamen y a sólo dos capítulos de tener que asumir el papel de anfitrión en un crucial Superclásico, el equipo de Marcelo Gallardo fue ambicioso y contundente, y celebró los goles que convirtieron Leonardo Pisculichi, Ariel Rojas, el colombiano Teófilo Gutiérrez y el uruguayo Rodrigo Mora. El 1-2 que le dio una momentánea luz de esperanza a Independiente lo anotó Federico Mancuello, su futbolista de mejor actualidad.
El conjunto Millonario llegó a 19 puntos en la cima de las posiciones, tres más que su escolta, Lanús, aunque con un partido menos que cumplirá esta semana (vs. Arsenal), por lo que en caso de ganarlo la diferencia será aún más amplia.
River abrió rápido el partido: a los 3 minutos, Leonardo Pisculichi remató un tiro libre desde la derecha en forma de centro en la búsqueda de un desvío, pero la pelota siguió su camino e ingresó ante una floja reacción del arquero Diego Rodríguez.
Presión sobre la pelota, combinaciones en velocidad, proyección de los laterales y una vocación ofensiva incansable marcan el estilo de juego que propone el equipo entrenado por Marcelo Gallardo.
Tras el 1-0 Rodríguez salvó en dos oportunidades su arco, el travesaño le negó el gol al uruguayo Carlos Sánchez y recién a los 37 minutos, tras un rechazo a la salida de un corner, River logró el segundo gol que merecía con un disparo fuerte y al ángulo del volante Ariel Rojas.
Independiente no encontraba el norte del partido, se veía superado y apenas inquietaba con algún remate lejano que hallaba seguro al arquero Marcelo Barovero. Sin embargo, a los 57, el volante Federico Mancuello apareció en el área para cabecear sin marca un centro enviado desde la derecha y descontar la ventaja.
La esperanza del "Rojo" duró ocho minutos, hasta que el colombiano Téofilo Gutiérrez aprovechó un error del defensor Cristian Tula, eludió al arquero y anotó el 3-1.
Y terminó sepultada a los 77, después de que el delantero uruguayo Rodrigo Mora definió sobre el cuerpo de Rodríguez con un toque perfecto.
Cuando parecía que Boca se quedaba con los tres puntos, Banfield logró un agónico empate 1 a 1 con sabor a justicia en el Sur, por la fecha 8 del torneo de primera división.
Terzaghi, con un zurdazo rápido al primer palo tras una patriada de Toledo, selló el resultado en el primer minuto de descuento. Antes, Andrés Chávez, un viejo conocido del Taladro, había abierto el marcador para Boca. El delantero marcó con un fuerte zurdazo desde la puerda del área, pero apenas celebró, y alzó sus manos a modo de disculpas para los hinchas locales.
Esta igualdad le permite al xeneize seguir de racha y prolongar a seis los partidos sin derrotas desde que asumió Rodolfo Arruabarrena como entrenador (entre torneo local y Sudamericana), mientras que para el Taladro sirve para romper una serie de tres derrotas consecutivas.
Una de las figuras del partido fue el arquero de Boca, Agustín Orion, quien prácticamente le bajó la persiana al arco azul y oro, que sólo pudo vulnerar Terzaghi sobre el final. Durante el primer tiempo, y en una de sus actuaciones destacadas, el 1 evitó tres veces la caída de su valla en la misma jugada.
Banfield pudo ganarlo, pero estuvo cerca de pagar muy cara su falta de eficacia en ataque, en un partido en el cual por momentos fue claro dominador, sin poder plasmarlo en el resultado.
En la próxima jornada, Boca recibirá a Quilmes el domingo, mientras que Quilmes visitará a Newell´s.