Una de las mayores preocupaciones del sector mineroenergético mundial tienen que ver con China y con la desaceleración de la demanda. Y esto quedó en evidencia en las discusiones planteadas en la X Feria Internacional Minera, que culminó esta semana en Medellín.

El vicepresidente de la Comisión Chilena de Cobre, Cochilco, Sergio Hernandez Nuñez, conoce bien esta situación y asegura que ha impactado en la cartera de proyectos mineros de su país. A pesar de esto, siguen mirando opciones de inversión por fuera de sus fronteras y Colombia está en el radar.

¿Cuáles son las perspectivas de la industria minera en Chile?

En Chile, tenemos una cartera histórica de proyectos mineros para los próximos diez años, de una inversión de 105 mil millones de dólares, de llegar a concretarse. Sin embargo, si uno lo compara con lo que ocurría hace un año, hay una leve disminución, no porque los proyectos se hayan caído, sino porque se han postergado levemente en su ejecución.

¿Por qué?

Porque la expectativa de crecimiento de China, que representa el 48 por ciento del consumo mundial de cobre, ha bajado de 7, 7 por ciento a un 7,3 o 7,4 por ciento. Esas pequeñas décimas influyen en la demanda potencial y por lo tanto impacta en el precio.

¿Cree que la tendencia de desaceleración es coyuntural o que se mantendrá?

Durante muchos años, China creció a dos dígitos, 10 a 14 por ciento. Cuando eso pasa, las economías impulsan su desarrollo aprovechando una serie de potencialidades dormidas que tenían y esto lleva a que la capacidad de producción se acerque al potencial pleno. Después de que eso pasa, el crecimiento nunca puede ser el mismo. Es decir, se crece, pero no al mismo ritmo: eso pasa en China. Por lo tanto, vemos muy difícil un crecimiento de dos dígitos, pero puede mantenerse en los próximos años en niveles entre el 7 y el 8 por ciento, que es muy importante igual.

¿Qué implicaciones tiene este freno para el sector minero?

Ese freno se manifiesta en la industria manufacturera, en la industria de la construcción en China, que son dos grandes sectores demandantes de materias primas. Con lo cual, el mercado reacciona frenando un poco el inicio de algunos proyectos porque miran la perspectiva de una menor demanda y ajustan la oferta. Esto impacta, por supuesto, también en el precio de los commodities que tienden a bajar.

¿Cómo se explica esto en cifras?

Por ejemplo, para el próximo año estimamos un escenario superavitario de producción de cobre con respecto a la demanda de, aproximadamente, 140 o 150 mil toneladas. Esto es un porcentaje tan bajo que significa 4 o 5 días de consumo mundial, por lo tanto, está muy balanceada la oferta y la demanda de cobre para el 2015. Así que no tenemos expectativas de precios que bajen en ningún caso de los 3,05 dólares y hoy día está en un promedio de 3,15 dólares (por onza troy).

Pese a esto, siguen buscando oportunidades de negocio. El Ministerio de Minas de Colombia y Codelco firmaron un memorando de entendimiento para explorar cobre en el país. ¿En qué va el proceso?

Conozco la intención de Codelco de iniciar negocios de cobre en Colombia. Estimamos que el país es estable, con una perspectiva de crecimiento muy interesante, con un entorno político más favorable que hace unos años, mayor inversión y, además, lidera en el continente en temas de innovación tecnológica, que es tan importante para la minería de metales. Eso es lo que ha motivado el interés de mi país en explorar con confianza las potencialidades colombianas.

¿Pero ya hay algo que se pueda decir sobre este potencial geológico?

No tengo esa información precisa, pero sí le puedo afirmar que hay mayor conocimiento del potencial geológico de Colombia ahora y que la mayor atracción está en las condiciones de la economía colombiana.

ENERGÍA COLOMBIANA PARA MINAS CHILENAS 

Uno de los problemas más urgentes que tiene la industria chilena, en particular la minera, es la falta de recursos energéticos.

El costo de la energía en Chile para un proceso minero equivale del 22 al 23 por ciento de los costos totales, cuando en Perú esta cifra representa entre el 12 y el 13 por ciento menos.

De acuerdo con Hernández Núñez, el país espera que las empresas colombianas especialistas en el sector puedan contribuir a solucionar la escasez energética, en especial en el norte del país.