Por Vladimir Soldatkin.

El exportador ruso de gas natural Gazprom dijo el martes que está cubriendo por completo la demanda del combustible de sus clientes europeos en medio de reclamos de que la compañía ha reducido los flujos a Europa.

Gazprom también aseguró que está dispuesto a forjar vínculos más cercanos con China, país al que empezaría a suministrar gas a partir del 2019 según un acuerdo.

"La compañía está cubriendo por completo la demanda de gas de sus socios europeos", dijo Gazprom en un comunicado tras una reunión de su directorio.

Eslovaquia, Polonia, Rumania y Austria han reportado en los últimos días una leve caída en los envíos desde Rusia, que está involucrada en una disputa con la Unión Europea en relación a la crisis en Ucrania.

Gazprom suspendió en junio el flujo de gas a Ucrania, país a través del cual envía la mitad de sus exportaciones del recurso natural a la Unión Europea, citando deudas impagas.

La discusión ha evocado temores a una interrupción de los suministros rusos a Europa, como fue el caso durante disputas de precios con Kiev en el 2006 y 2009.

Gazprom dijo que Ucrania debe cancelar sus deudas impagas de casi 5.300 millones de dólares antes de que la "cooperación" se reanude.

La firma también dijo que la seguridad de los suministros de gas ruso a Europa depende de que Ucrania honre un contrato de tránsito, y agregó que el directorio de la compañía ha ordenado a la gerencia tomar medidas para reducir los riesgos en los envíos de gas con destino a Europa este otoño e invierno boreal.

Buscando reducir su dependencia en los mercados europeos por las diferencias políticas, Gazprom ha estado mirando a Asia y a China en particular.

Gazprom dijo que el panorama para la demanda de gas en la región de Asia-Pacífico luce "optimista".

"China jugará el rol principal en el incremento del consumo de gas", dijo la compañía citando el crecimiento económico de China y una agudización en la situación ambiental en el país.

Este año, Gazprom firmó un emblemático acuerdo de 400.000 millones de dólares para vender gas a China. Los primeros envíos están previstos para el 2019 después de que sea construido un nuevo gasoducto para transportar gas desde el yacimiento gasífero Chayanda.

(Reporte de Vladimir Soldatkin. Editado en español por María Cecilia Mora)

La Junta Directiva de Gazprom indicó que la seguridad de los suministros de gas a Europa se puede garantizar solo a condición de que la ucraniana Naftogaz cumpla sus compromisos contractuales, informó la empresa rusa en un comunicado.

"Se prestó una atención especial a los suministros de gas ruso a los consumidores europeos a través del territorio de Ucrania este otoño e invierno. Los participantes de la reunión subrayaron que la seguridad de los envíos se podrá garantizar solo a condición de que Naftogaz cumpla rigurosamente el contrato de tránsito", dice el texto.

A este respecto, la Junta Directiva del gigante ruso ordenó tomar medidas para minimizar el riesgo de problemas en el tránsito de gas a Europa a través del territorio del país vecino.

La compañía ucraniana acumula ya una deuda de casi 5.300 millones de dólares por las importaciones de gas desde Rusia, destaca la nota de Gazprom.

"El futuro de las relaciones entre ambas compañías en este ámbito depende completamente de si se resuelve el asunto de la deuda", indica el documento.

Desde mediados de junio la rusa Gazprom no suministra gas a Ucrania por deuda morosa, pero sigue enviándolo a los países europeos a través del territorio ucraniano.

Naftogaz presentó el pasado 16 de junio una demanda al Tribunal de Arbitraje de Estocolmo exigiendo revisar el precio del gas ruso establecido por el contrato vigente con Moscú firmado en 2009. También reclama a Gazprom 6.000 millones de dólares de lo que considera pagos excesivos por los suministros realizados a partir de 2010.

Por su parte, el gigante ruso presentó una demanda para cobrar la deuda ucraniana que en aquel momento se elevaba a 4.500 millones de dólares.

Los suministros gasísticos rusos son también objeto de negociaciones tripartitas que desde hace varios meses mantienen Rusia, Ucrania y La Comisión Europea.