La construcción de polos industriales tuvo un crecimiento de más del 300% en la última década. La provincia de Buenos Aires es donde se encuentra la mayoría de estos centros, pero las regiones del NEA y la Patagonia registraron un gran número de aperturas. Las compañías se ven beneficiadas con la reducción de costos y una sinergia que permite mejorar la competitividad. Esto favorece la instalación en diversas zonas donde existen nuevas oportunidades productivas.

La provincia de Buenos Aires está íntimamente ligada a la producción industrial y más precisamente el conurbano, con la instalación masiva de fábricas a fines de la década del 20, en la segunda presidencia de Hipólito Yrigoyen. De todos modos, con el correr de los años la industria fue extendiéndose a lo largo y a lo ancho del país. En la última década, la construcción de parques en distintos puntos del país contribuyó a esta federalización de la industria con beneficios directos e indirectos para las economías regionales. 

Actualmente hay 330 parques industriales instalados en el país, lo que representa un crecimiento del 300% respecto de los 80 que existían en 2003. Del total, 150 ya están inscriptos en el Registro Nacional de Parques Industriales (RENPI) del Ministerio de Industria, lo que les permite acceder a créditos a tasas subsidiadas. 

Se estima que los parques registrados reúnen a más de 2.300 empresas donde se emplea a casi 70 mil trabajadores. Para 2020, desde el Ministerio de Industria prevén que habrá en funcionamiento unos 550 nodos industriales. Además, para fin de este año se espera que la totalidad de los parques estén en el RENPI.

En cuanto a las características, existe gran cantidad de parques industriales multirrubro, así como parques sectoriales vinculados a algún rubro específico de la industria. Por ejemplo, en Mendoza el Parque Industrial Provincial se transformó en el núcleo de desarrollo químico, petroquímico y minero más importante de la provincia. 

El Parque Industrial de Río Grande, Tierra del Fuego, es otro caso modelo en donde se generan más de 8.000 puestos de trabajo mayormente ligados a la industria electrónica, aunque también se destacan empresas del rubro textil, entre otras. A partir de 2009 se crearon en la provincia las condiciones necesarias para un fuerte proceso inversor que permitió el aumento de la producción con agregado de valor. En el año 2003 las personas ocupadas en empresas beneficiadas por el régimen eran 2.476, mientras en 2012 ya eran 15.300.

El norte del país también es protagonista. En Jujuy, el municipio de Susques junto con una comunidad originaria local están desarrollando un parque industrial logístico y de servicios para la industria minera. Aprovechando su cercanía con el paso de Jama, éste será el primer parque industrial comunitario de la Argentina. 

Tenemos cada vez más parques industriales en todo el territorio nacional, y esto demuestra que federalizar la industria es un mandato que hacemos realidad cada día, por decisión de la presidente Cristina de Kirchner, afirmó la ministra de Industria, Débora Giorgi, y remarcó que las pymes instaladas en estos predios jerarquizan su producción, reducen costos en logística, agregan valor en origen y aumentan su competitividad.

Beneficios

Un parque industrial es una porción delimitada, planificada y subdividida para la radicación de establecimientos manufactureros y de servicios, dotada de infraestructura, equipamiento y servicios apropiados para el desarrollo de tales actividades.

Hoy en día la tendencia es que haya parques en todos los rincones donde existan oportunidades de atraer inversiones. Tenemos parques en el interior de Jujuy, pero también por supuesto en Vaca Muerta; la petrolera o la metalmecánica en la zona del centro o la alimentaria en la zona de Córdoba, sostuvo Rodolfo Games, director de Desarrollo Regional y de Parques Industriales del Ministerio de Industria, en diálogo con Ámbito Industrial+Pymes.

Desde el punto de vista de los beneficios para la comunidad que está cerca del parque se pueden destacar el mejoramiento urbano-ambiental, la atracción de inversiones nacionales e internacionales con impacto local y la generación de nuevos empleos para los vecinos de la ciudad. 

En cuanto a las ventajas competitivas y económicas a las cuales pueden acceder las pymes radicadas (o que pretendan hacerlo) en los parques industriales están la ubicación estratégica y el potenciamiento derivado de la sinergia de la localización en común con otras firmas, las mejoras de la eficiencia de la empresa, la incentivación a la agregación de valor industrial manufacturera y de servicios, el aumento del valor del terreno y las desgravaciones impositivas.

La realidad es que los parques abarcan una gran cantidad de municipios y desde el ministerio tenemos proyectos con intendentes de localidades muy pequeñas que están pensando en un espacio por lo menos para mejorar la convivencia con los vecinos, agregó Games.

Además, las empresas que se instalan en estos centros productivos tienen la posibilidad de reducir sus costos logísticos debido a que por lo general se ubican cerca de una autopista, una ruta o un puerto. Por otra parte, tienen gastos comunes que son compartidos y por lo tanto más bajos, como los destinados a la capacitación, la energía y la seguridad.

No sólo las pequeñas empresas se radican en estos parques por una reducción de costos y para acceder a créditos a tasas bajas del Gobierno, sino que también lo hacen otras compañías de gran tamaño. Sólo por mencionar algunos ejemplos, Pepsico y Cabrales tienen sus instalaciones en el Parque Industrial de General Pueyrredón, Mar del Plata; Lady Store, en el Parque Industrial Cantábrica, Buenos Aires; Cerámica Alberdi, en el Parque Industrial Ciudad de Salta; y BGH, en Parque Industrial Río Grande, Tierra del Fuego.

Créditos

La inscripción en el Registro Nacional permite que los municipios puedan acceder a los Aportes No Reembolsables de hasta $ 3 millones. Este subsidio puede ser utilizado para obras de infraestructura dentro del perímetro municipal, pero también para provisión de servicios públicos; pavimento de calles internas, playón de carga y descarga; cerco perimetral, red interna de gas y cloacas, y planta de tratamiento de efluentes, entre otros. 

En tanto, las pequeñas empresas pueden acceder a créditos a una tasa que ronda el 11,5% para la radicación o ampliación de la empresa por hasta $ 5 millones y con un plazo máximo de 5 años. Además les otorgan un adicional de $ 2 millones para los gastos de la mudanza de la empresa al parque. 

El subsidio del Ministerio que conduce Giorgi es de hasta 5 puntos porcentuales de la tasa de interés de banco. A esto se le puede restar otro punto para aquellas operaciones que se garanticen con avales emitidos por sociedades de garantía recíprocas o fondos de garantía.

Capacitar

La mejora de la competitividad depende de múltiples factores y uno de ellos es la capacitación constante de los empleados. En ese sentido, el Área Industrial Oficial de Promoción de Gálvez (AIOPG), ubicada en el centro sur de la provincia de Santa Fe, es pionera en la materia ya que cuenta con un Centro de Formación y Servicios (CEFOSE) de primer nivel. Éste nació con el objetivo de capacitar la mano de obra local para poder brindarle a la ciudad una impronta productiva e industrial, permitiendo perfeccionar el recurso humano empleado.

En los últimos años la producción industrial ha ido ganando terreno en la economía local, a un punto tal que, desde 2010, el Área Industrial no tiene más lotes disponibles. Ocupa una superficie de 10 hectáreas distribuida en 22 lotes y cuenta actualmente con 14 empresas en operación, 3 en construcción y 2 en proyecto, generando más de 130 puestos de trabajo. 

En la mayoría de los casos, las pymes radicadas en el área industrial son proveedoras de la empresa Tadeo Czerweny, una de las fábricas de transformadores eléctricos más grandes del país.