Por SILVIA NAISHTAT.
* Como en décadas pasadas, rusos y chinos, pese a la conciliación en los años 90, parecen no perderse pisada mutuamente y disputarse regiones. Algo de eso intuyó Eduardo Eurnekian en la última visita de Vladimir Putin a Buenos Aires, en julio pasado. En aquel momento y durante una larga entrevista personal con el premier ruso comenzó a gestarse lo que anunció el propio Eurnekian la semana pasada, desde Moscú. Allá firmó un ambicioso acuerdo para el desarrollo de la quinta central atómica en Argentina, una más en Armenia y proyectos en Brasil, donde la corporación estatal rusa Rosatom acaba de asociarse con el grupo Camargo Correa. En una primera etapa construirán en la provincia de Buenos Aires una estación de Tecnología de Irradiación y otra de Medicina Nuclear. Otra corporación estatal rusa se presentará con Eurnekian en la represa de Chihuido I, en Chubut. Esa licitación se cayó dos veces en los últimos cinco años por falta de financiamiento.
* De perfil muy bajo y fama de eficiente, Mariana González, subsecretaria de Coordinación Económica, se ha convertido en la mano derecha del cada vez más poderoso Axel Kicillof. Esta joven economista es para los empresarios la llave para acceder a sus encuentros con el ministro y quien sigue los temas posteriormente. Parafraseando a Néstor Kirchner cuando aconsejaba hablar con Julio (por de Vido), Kicillof les dice tras las audiencias: “Hablen con Mariana”.
* Pese a que la ley de Bosques, impulsada por Miguel Bonasso, exigía un ordenamiento a cada provincia, Buenos Aires no sólo está muy lejos de cumplir sino que se están dejando de plantar árboles en áreas clave. La ley daba plazo hasta 2009 para ordenar los bosques. Daniel Scioli lleva 5 años de retraso. Así, los productores no puedan cobrar los aportes previstos en la ley de promoción de bosques cultivados. Buenos Aires es la única en falta, aseguran en la cámara sectorial. La situación afecta a los productores forestales más pequeños (mayormente del Delta) que han dejado de plantar. A nivel nacional, la actividad forestal emplea directa e indirectamente a unas 500.000 personas y hay unas 7.000 pymes en todo el país. Las principales especies forestadas son pino, eucalipto, álamo y sauce.
* Desde que asumió en el Renatea, que se encarga de la libreta del peón rural, Guillermo Martini –que responde políticamente a Julián Domínguez– agilizó los cruces de información. Asegura que el 60% de los peones está en negro en un tipo de trabajo que está cambiando por la tecnología. A tal punto, que ya casi no existe el trabajo golondrina y hasta las aceitunas se cosechan con máquinas neumáticas. Martini se jacta de un fondo conformado por el aporte de 1,5% de los trabajadores y otro tanto de los empleadores que llega a $800 millones y se destina a subsidiar el desempleo, los gastos de sepelio y la asistencia a las familias que quedan desamparadas. Un dato: recibe 15 denuncias por día.
* El grupo Saporiti fabrica desde 1927 ingredientes, sabores, colores, estabilizantes, emulsionantes, enzimas y conservantes para alimentos y bebidas. Exporta y tiene oficinas por toda la región. Ultimamente, estos productos están bajo la lupa de los nutricionistas. Tal vez por eso, Adrián Saporiti impulsó distintas jornadas junto al Conicet para debatir el rol de los conservantes y el futuro de la industria. Esteban Carmuega, director del Centro de Estudios sobre Nutrición Infantil, pronosticó que los alimentos “serán más caros y la proteína animal y el agua serán dos insumos tan críticos cómo hoy lo es la energía”.