El mexicano Rodrigo Rueda Terrazas, miembro del consejo de la Sociedad de Ingenieros Petroleros (SPE, por sus siglas en inglés) en Brasil, estimó que la mayor posibilidad de cooperación se da en el campo de la tecnología y la gestión.
"Petrobras es una de las empresas que más petróleo extrae de yacimientos en aguas ultraprofundas. Es pionera en este tipo de tecnología y conocimiento y podría suministrarlo a Pemex", estimó el ingeniero, que vive en Río de Janeiro desde hace más de una década y trabaja para una petrolera occidental.
Señaló que, por las imposiciones de la ley brasileña a Petrobras en Brasil, que le obliga a tener una participación de 30 por ciento y ser operadora en todos los nuevos yacimientos en la zona llamada Pre-sal, es poco probable que la petrolera estatal brasileña participe en las licitaciones en México tras la reforma energética.
"En el corto plazo Petrobras se está focalizando en Brasil, sobre todo por el nuevo régimen que establece que sea operadora en los campos Pre-sal. Si Petrobras tuviera excedente de presupuesto para explorar campos fuera de Brasil sí que se podría dar, pero la imposición de estar en todos los contratos de Brasil le limita", agregó la fuente.
Petrobras no quiso hacer declaraciones respecto a un eventual interés de la compañía por participar en licitaciones convocadas en el Golfo de México tras la reforma energética.
Rueda Terrazas también estimó que existe la posibilidad de que empresas internacionales que establecieron su sede regional en Río de Janeiro, la "capital petrolera" de Brasil, puedan moverse ahora a México.
"Mi impresión es que operadoras que tienen interés en Brasil se puedan ir ahora a México, por la cercanía con Estados Unidos y la ventaja logística que ello supone", explicó.
Brasil produce actualmente unos dos millones de barriles de petróleo diariamente, y en torno a una cuarta parte de esa cifra procede de los pozos ultraprofundos, descubiertos en 2006 en el litoral brasileño.
La petrolera estatal brasileña anunció unas inversiones confirmadas de 102 mil millones de dólares hasta 2018 para explotar esos pozos petrolíferos ultraprofundos, un desembolso comprometido que limita la acción de la empresa en inversiones en el exterior.
Las previsiones de Petrobras empresa controlada por el Estado que se encuentra en el centro de una gran polémica por corrupción y sobrecostos que ha afectado a la imagen del gobierno de Dilma Rousseff- es que Brasil produzca 4.2 millones de barriles diarios en 2020, el doble de la cifra actual.