(Por María José Arias, para EnerNews) Hay conflictos que resultan inevitables. No sólo por los dramas humanitarios sino también por sus implicancias económicas y geopolíticas. Desde hace meses, los militantes sunitas del Estado Islámicos del ISIS han tomando el control de grandes extensiones de Irak. Pero no fue sino hasta que hace poco invadieron territorios cercanos a la capital kurda de Erbil - foco petrolero en el que Chevron y Exxon Mobil tienen inversiones - que la administración Barack Obama decidió autorizar ataques aéreos contra ISIS para volverse a mojar en un conflicto de impredecibles consecuencias.
Como sétimo productor petrolero del mundo, Irak puso en el mercado unos 3.300.000 barriles de petróleo por día (bpd) en abril pasado y el territorio semiautónomo de Kurdistán aporta el 10% del petróleo iraquí. Desde que destronó a Sadam Hussein, las disputas sobre cómo repartir los ingresos del petróleo del Kurdistán son un factor significativo en interminables impasses políticos de Irak. El inédito escenario de la sangre ultra musulmana, tiene como fondo una maraña política y de negocios en la que la administración kurda aspira a vender su petróleo en los mercados mundiales, sin pasar por el fisco de Bagdad.
El hogar de 5.000.000 de kurdos ha sido semi-autónomo desde la Guerra del Golfo de 1991. Tiene un gobierno y un cuerpo militar propio, y después de la invasión de EE.UU a Irak en 2003 su petróleo adquirió relevancia. La región cuenta con dos grandes campos de petróleo, Taq Taq y Tawke. Kurdistán, por sus notables reservas, se ha convertido en un polo atractivo para los inversores, atraídos por las vastas reservas de la región y su relativa estabilidad. En junio pasado, el Kurdistán iraquí estaba produciendo 360.000 bpd - aproximadamente el 10% de la producción de Irak, según la Agencia Internacional de Energía. Erbil, sirve de base para las estadounidenses Exxon- MObil, Chevron, Genel y otras compañías de petróleo y gas, en la región kurda. ISIS se ha ido acercando peligrosamente a la ciudad y EE.UU. no admite perder su control.
“La infraestructura energética sigue estando “muy amenazada. Los combates con el ISIS cerca de la refinería Kalak y el oleoducto Kurmala-Fishkhabour suponen un gran riesgo para la para la infraestructura energética kurda y los planes de expansión potencial” dijo Ayham Kamel, director para el Medio Oriente de la consultora Eurasia Group. El oleoducto Kurmala transporta el crudo de de Taq Taq hasta sistema más amplio de gasoductos de Genel. Tawke, el otro campo explotado por la empresa, está cercano a la frontera con Turquía, mucho más al norte de los enfrentamientos.
ISIS dice tener control sobre siete campos petroleros y dos refinerías en el norte de Irak, así como una parte del oleoducto que une Kirkuk con la ciudad puerto de Ceyhan, en Turquía. Los expertos creen que la venta de alrededor de 10.000 bpd es una pieza clave en el financiamiento del grupo. A pesar esto, la mayor parte de producción de crudo de Irak no ha sido afectada hasta hoy. Los enfrentamientos se dan lejos de los grandes campos petroleros del Sur de Irak, que producen el 75% del crudo del país.
"Si el conflicto se extiende hacia el sur iraquí, la ansiedad se reflejará en el mercado del petróleo” ha dicho Daniel Yergin, vice presidente de la consultora norteamericana IHS. Para el experto, Irak es clave para el crecimiento futuro del mercado mundial de crudo. La producción petrolera de Estados Unidos es más del doble de Irak, pero se espera que se estabilice a principios de la década de 2020. Irak tiene el potencial para seguir creciendo hasta el 2040 antes de ver reducida su producción.
Aunque la OPEP está produciendo 30.000.000 bpd, las interrupciones de suministro en otras partes del mundo hacen la creciente producción iraquí aún más importante. El aumento de la producción de Estados Unidos compensa parcialmente la pérdida de petróleo de Irán y Libia, pero no sería suficiente para balancear el posible corte iraquí que le aporta hoy un 4% por ciento de sus importaciones globales de crudo. “La pérdida no tendría mucho impacto en EE.UU, más si en Europa y Asia donde compran 2.000.000 bpd, lo cual apretaría el mercado” dice Andrew Lipow, presidente de Lipow Oil Associates.
En teoría, todas las ventas de petróleo en Irak son manejadas por el gobierno central de Bagdad, que luego divide los ingresos entre las distintas regiones. Pero recientemente, funcionarios del Kurdistán afirmaron que el gobierno central no ha girado el 17% prometido de participación de los ingresos petroleros. Claramente, los kurdos quieren vender su petróleo sin tributar al gobierno federal. Mientras, el gobierno kurdo subió la apuesta pidiendo una participación del 25%.
Actualmente, Turquía es el principal socio comprador del petróleo kurdo. Alrededor de 120.000 bpd fluyen por el oleoducto al puerto turco de Ceyhan. Kurdistán exporta alrededor de un tercio de su petróleo a Turquía, pero quiere subir la cota. "Con el fin de atender las necesidades del Kurdistán y cubrir el 17% del presupuesto que ha sido cortado por Bagdad durante los últimos 6 meses, necesitamos exportar al menos 400.000 barriles diarios” dijo Safeen Dizayee, vocero del gobierno autónomo. Irak sostiene que el acuerdo de Turquía para cargar petróleo kurdo viola acuerdos entre las dos naciones.
Eso puede ser difícil de lograr para el Gobierno Regional de Kurdistán, por la falta de infraestructura de exportación adecuada. El oleoducto Kirkuk, con 600.000 bpd, representó la mayor parte las exportaciones de crudo del Norte de Irak, y ha sido desconectado desde marzo luego de los ataques insurgentes.
Los EE.UU se oponen a la venta directa del crudo del Kurdistán al mercado extranjero. Si los kurdos pudieran vender y cobrar su petróleo, podrían asegurar la base financiera que necesitan para finalmente declarar su independencia. Está en juego la meta de Estados Unidos de un Irak unificado, y el gobierno de Obama quedó atrapado en medio de la controversia. Después de haber hecho enormes esfuerzos en asegurar el federalismo iraquí y su constitución - que dice que el petróleo pertenece a toda la república - la administración norteamericana ha desalentado a empresas y países de comprar petróleo kurdo.
El tironeo es cada vez más complejo. A 80 km de las costas de Texas está anclado el United Kalavrvta, un barco petrolero con una carga valorada en US$ 100.000.000 de crudo kurdo. Sin embargo, el comprador norteamericano ha dilatado la recepción, debido a que el gobierno central de Irak presentó una demanda en la Corte Federal del Sur de Texas. El gobierno iraquí alega que la carga de crudo pertenece al Ministerio de Petróleo de Bagdad y que nunca fue propiedad del Gobierno Regional de Kurdistán. Pero los kurdos argumentan que el tribunal de Texas no tiene jurisdicción. Michael Howard, asesor del ministro kurdo de los recursos naturales, dijo que "es un tema constitucional que debe determinarse en Irak y no debe ser exportado a los tribunales estadounidenses."
El drama del petróleo kurdo en Texas es sólo una parte de la mecánica que está poniendo en práctica el Gobierno Regional de Kurdistán para buscar el dinero que Bagdad no gira. El United Kalavrvta es uno de los cinco buques que se han cargado con crudo kurdo en el puerto turco de Ceyhan desde finales de mayo. Uno entregó su carga en Israel, con rumores de grandes descuentos. Otro barco, United Emblem, que al igual que el primero pertenece a una empresa griega Marine Management Services, descargó en el puerto de Singapur. Otro petrolero, el Kamari, puso proa a Port Said, Egipto.
El petróleo es también un factor importante en el debate latente sobre quién controla Kirkuk. También hay un debate de larga data dentro de Irak por el control de Kirkuk, ciudad 400.000 habitantes en la frontera entre la región kurda y el resto de Irak. Kirkuk también se sienta al lado de un campo petrolero que contiene un estimado de 10.000.000.000 bpd. Los campos de Kirkuk producen alrededor de 400.000 a 500.000 bpd, mientras que los principales campos en la región de Basora producen entre 2,6 y 2,7 millones bpd, destacó IHS.
Los debates sobre la identidad de Kirkuk tienen una larga historia. La ciudad ha sido habitada por kurdos, turcomanos, asirios y árabes, cada uno con una reivindicación histórica en la región. Los kurdos argumentan que Kirkuk ha sido su capital desde el siglo XVIII. Pero el descubrimiento de crudo cerca de Kirkuk, en la década de 1920 subió considerablemente la apuesta Durante la década de los 70, los kurdos hicieron reclamos formales sobre los masivos yacimientos de petróleo de Kirkuk. El régimen de Sadam lo tomó como una provocación y respondió expulsando a cientos de miles de kurdos y asirios de la ciudad y asentando familias árabes allí.
Desde la invasión estadounidense de Irak en 2003, miles de kurdos desplazados han regresado a la ciudad lo que plantea nuevos interrogantes sobre quién debe gobernarla. La disputa se ha ido endureciendo a medida que ISIS amplía el control sobre Irak. La milicia kurda, los peshmerga, tomaron el control de Kirkuk a mediados de junio, alegando un "vacío de seguridad." En julio, los kurdos empezaron a bombear petróleo de yacimientos de Kirkuk - en desafío al gobierno central de Irak - dando a los kurdos el control de facto sobre el petróleo.