Por Clarisa Ercolano.
Ante una platea de periodistas, funcionarios, profesionales de la minería y algunos vecinos indignados, el gobierno puso en la escena política y económica de la provincia los yacimientos mineros de Cerro Amarillo y Hierro Indio, de cobre y hierro respectivamente, cuyas Declaraciones de Impacto Ambiental ingresarán a la Legislatura para su tratamiento.
El gobierno y las empresas mineras eligieron el escenario malargüino del Centro de Convenciones Thesaurus para la presentación de los proyectos. Y hasta allí viajó una delegación de periodistas de la mayoría de los medios de la provincia, por iniciativa del gobierno provincial, la Municipalidad de Malargüe y las empresas mineras. El operativo forma parte de un “lavado de cara” a la minería como actividad, porque el gobierno ha registrado un cambio de humor en la población respecto de la minería, desde que el propio gobernador Francisco Pérez, cuando era candidato en 2011, pidió a la Legislatura que dejase sin efecto el proyecto San Jorge, por el que aún hay polémica. Ahora, la decisión oficial es avanzar con todo y aprobar las DIA de Cerro Amarillo y Hierro Indio, los yacimientos que fueron “presentados en sociedad” en la tarde de ayer.
Como sea, el escenario minero está montado, y ahora se esperan ásperas polémicas con el ambientalismo aunque el propio ministro de Ambiente Guillermo Elizalde salió ayer a aplacar por anticipado los recelos en el gobierno, cuando anunció que apoyaba ambos avances en la exploración de cobre y hierro, que es exactamente lo que ahora se va a discutir en la Legislatura provincial.
El yacimiento más importante de los dos que se van a explorar es el de Cerro Amarillo. Hay quienes le ven mayor potencialidad que la mina El Teniente, que lleva décadas de explotación en Chile. No habrá problemas con la exploración. Pero habrá discusión cuando haya que explotar la mina y sacar el cobre, ya que la ley 7722 que regula la minería prohíbe sustancias que habitualmente se usan en este tipo de actividad económica, como el cianuro. Sin embargo, el director en Argentina de la firma que explotará Cerro Amarillo –Eugenio Ponte- dijo que se utilizarán “materiales biodegradables”, aunque no especificó cuáles. Ponte dijo además que en el verano comenzarán las perforaciones y que en un principio, las personas empleadas serían 70.
Respecto del yacimiento Hierro Indio, se recordó que los pueblos originarios ya realizaban sus boleadoras con material que extraían en la zona y que las canteras ya están abiertas, así es que el impacto será mínimo. Se trabajarán 500 hectáreas en un principio, y se apuesta a construir una planta.
En ese sentido señaló que el hierro es muy bajo en fósforo (al revés del que se produce, por ejemplo, en Sierra Grande) y que es superior en calidad al de Neuquén. Sobre el recurso hídrico, el propietario de la mina dijo que se afectará “sólo el 0,15 del caudal del río Atuel”, por lo que el proyecto será observado con sumo cuidado en la Legislatura.
En ambas mineras se proyecta trabajar casi todo el año, ya que el terreno es bastante llano y debe haber nevadas muy fuertes para que el acceso quede bloqueado.
La voz oficial
El ministro de Energía Marcos Zandomeni dijo que ni en Las Heras ni en Malargüe el agua que se podría utilizar en minería “compite” con el agro. Y que los proyectos respetarán la ley vigente, es decir, la 7722, un instrumento legal que tiene una decena de planteos de inconstitucionalidad en la Suprema Corte de Justicia de Mendoza. “Pérez nos indicó que se avance con lo que existe, con las leyes que hay, y con los ejes en empleo y desarrollo sustentable; esa es la base”.
Luego pareció justificar el avance en proyectos mineros, a causa del desempleo. “La matriz productiva de Mendoza es diversa y amplia. Pero el empleo nos preocupa. No hablamos de salvarnos, pero si en el secano no empezamos a ver qué es lo que hay para extraer, no se avanza. Yo fui Secretario de Medioambiente, soy el primero que quiere cuidar justamente el ambiente”, se justificó, y luego insistió en una línea dictada por Pérez, la de avanzar en la minería proyecto por proyecto. Pidió además a los legisladores que aprueben las Declaraciones de Impacto Ambiental para Cerro Amarillo y Hierro Indio, “porque el año que viene es electoral”. Finalmente aseguró que la intención es avanzar en la minería “de modo consciente”
Otro de los que habló en la primera jornada de presentación, previa al recorrido en el yacimiento que se hará esta mañana, fue el intendente de Malargüe Juan Carlos Agulles. Su pueblo ha sufrido especialmente la desactivación del proyecto Vale, de sal de Potasio. En Mendoza significó un impacto negativo de 6.000 empleos entre directos e indirectos, muchos de ellos, justamente de Malargüe. “Aquí logramos empezar a hablar de minería. Vuelve la esperanza de ver reactivada la actividad del departamento” dijo, y también se puso su propio “escudo” ambiental. “Contrario a lo que se cree, somos respetuosos del medio ambiente” aseguró. “Hay más proyectos, estos dos ya aprobaron la etapa ambiental, pero hay más en carpeta” anunció. El entusiasmo es grande, y tal por eso olvidó el detalle de que las DIA aún deben pasar por la Legislatura. Agülles agradeció además el intendente al ministro de Energía Marcos Zandomeni y a las empresas que apuestan por la exploración. Respecto de darles cabida a los ex trabajadores de Vale que aún permanecen sin trabajo (unos 400), fue cuidadoso, y recordó que “hay un libro de empleos en el municipio con gente que será tenida en cuenta”.
Vecinos enojados
Algunos vecinos que concurrieron al “Thesaurus” manifestaron su preocupación en torno a las exploraciones. “Ustedes en realidad buscan oro”, vociferó uno que participó en la presentación.
A esa voz se sumó la de otro que se identificó como “Pocho” y que recriminó al ministro Marcos Zandomeni que “Neuquén nos maneja el petróleo, y usted no hace nada”. Ese mismo ciudadano le achacó a Zandomeni no conocer el departamento, porque éste dijo que casi no había agricultura: "Producimos el 90 por ciento de la papa del país, también queremos agua pura… y tenemos ganadería y yo le escribí varios mails pero usted nunca contestó" le recriminó.
Por Leandro Abraham.
El desarrollo minero en Mendoza se ha convertido en una industria controversial en los últimos años, luego de que la Legislatura le dijera “no” a San Jorge y bloqueada la discusión sobre cualquier posibilidad de desarrollar esta actividad en la provincia. Sin embargo, dos proyectos ubicados en Malargüe vuelven a abrirle la puerta al debate.
Las iniciativas son Cerro Amarillo y Hierro Indio, ambas ubicadas en el departamento más austral de la provincia, y tienen como objetivo la exploración de minas que ya fueron explotadas años atrás. Esta actividad, generaría una inversión estimada de 100 millones de dólares sólo en la etapa exploratoria, generando 100 puestos de trabajo en un primer momento y respetando íntegramente la legislación vigente.
Si bien los dos proyectos son diferentes, ya que buscan distintos tipos de minerales, los mismos fueron agrupados por estar ubicados en Malargüe y por encontrarse en la misma etapa de avance: ambos necesitan el visto bueno de la Legislatura provincial para poder comenzar a operar.
Sobre la necesidad de la aprobación legislativa el ministro de Energía Marcos Zandomeni, quien presidió la presentación de los proyectos junto con el intendente Juan Antonio Agulles y los referentes de las mineras, dejó en claro que estos desarrollos cumplen absolutamente con la legislación vigente (no violan la ley 7.722), pero dejó en claro que tienen que ser tratados por Diputados y Senadores en breve.
“Las exploraciones tendrían que comenzar este verano. Si, por algún motivo, no salen este verano, entonces posiblemente el año que viene tampoco logremos tener la factibilidad de la Legislatura, ya que es un año electoral”, destacó el funcionario al dirigirse al auditorio del Centro de Congreso y Exposiciones de Malargüe, donde participaron vecinos del departamento y medios de comunicación.
En cuanto a estos proyectos y la controversia generada en la provincia por la minería, Zandomeni resaltó: “Estoy totalmente tranquilo de que lo que estamos haciendo está bien” y destacó que existen otras iniciativas mineras en la zona, pero por ahora sólo se estudiarán estas dos.
Por su parte, el intendente Agulles también habló a favor de estos proyectos y se quejó de que en la legislación vigente “cada etapa minera tiene que pasar por el filtro de la legislatura”. “Existe una discriminación, la minería es la única industria que tiene que pasar por la Legislatura en cada etapa. En el agro, por ejemplo, también se utilizan químicos y mayores cantidades de agua, pero la Legislatura no interviene. Los legisladores están para legislar, no para controlar los proyectos”, resaltó el jefe comunal.
Así, si bien Cerro Amarillo y Hierro Indio todavía tienen filtros que pasar, ambos proyectos muestran su factibilidad económica y apoyo político para ver la luz y comenzar a operar en Mendoza, donde en principio sólo realizarían trabajos de exploración para buscar riquezas bajo el suelo.
Los dos proyectos, en detalle.
Cerro Amarillo
Se trata de un proyecto ubicado en Malargüe que busca cobre para posteriormente explotarlo. Según las estimaciones de la empresa, en el lugar podría existir una de las reservas más grandes del mundo de este mineral, todavía mayor a la de El Teniente, ubicada en Chile.
La inversión que se prevé para la exploración supera los 70 millones de dólares y tomaría unos 70 puestos de trabajo. Detallan que, por el lugar donde están ubicadas las minas, sólo se pude trabajar durante los meses de verano. Es por eso que tienen apuro en que el tratamiento legislativo sea breve.
La historia de la mina Cerro Amarillo es vieja, pero breve. Es que la idea de buscar cobre en el lugar no es una novedad. Ya entre los años 1969 y 1973 la cantera se encontró operativa, pero dejó de utilizarse por una notable baja en el precio internacional del cobre.
Según prometen sus adjudicatarios, quienes son de capitales canadienses pero ya tienen distintos emprendimientos en Perú y otras provincias argentinas, este proyecto cumpliría con la ley 7.722, ya que no utilizaría cianuro ni otro elemento tóxico para la extracción de los minerales.
Además, según el compromiso que tomó la empresa en la presentación del proyecto, la misma cumpliría con el “compre mendocino”, implementaría una política de transparencia donde cualquier vecino podría ingresar a ver los trabajos y generaría un mínimo impacto ambiental.
Sobre la potencialidad de esta mina, desde la minera se destaca que la misma podría ser un de las mayores del mundo en explotación de cobre, ya que se encuentra en una zona estratégica de la cordillera de Los Andes. Teniendo en cuenta que la mina más grande se encuentra en Chile y se llama “El Teniente”, los directivos de Meryllion Argentina, adjudicataria del proyecto, están ilusionados con que Cerro Amarillo, en un corto plazo, pase a ser “El General” de la explotación de cobre a nivel mundial.
Hierro Indio
Este es el otro proyecto de exploración que busca el apoyo legislativo para poder explorar. Es menos ambicioso, pero promete traer importantes beneficios para la economía provincial y nacional.
Sucede que esta minera busca Hierro, uno de los elementos que actualmente son importados en Argentina prácticamente en su totalidad. Por esto, prometen sustituir importaciones si logran encontrar materiales bajo la tierra.
La expectativas son muchas, ya que las primeras exploraciones visuales les indican que en las minas de Malargüe se encuentra uno de los yacimientos de mayor riqueza del país, no tanto por su tamaño, sino por la calidad del hierro.
Para este proyecto, que ya fue explorado y explotado hace más de 60 años por militares argentinos, la empresa de capitales nacionales pretende invertir 2 millones de dólares en una primera etapa.
Lo interesante de este proyecto es que tendría por los menos 22 años de vida y lograría sustituir un tercio del total de importaciones de hiero que actualmente realiza Argentina.