Un nuevo estudio de datos de los últimos 19 años revela que el agua dulce de deshielo de los glaciares ha provocado que el nivel del mar alrededor de la costa de la Antártida se eleve 2 centímetros más que el promedio mundial de 6 centímetros. Sus autores, científicos de la Universidad de Southampton, en Reino Unido, detectaron el rápido aumento del nivel del mar mediante el análisis de las exploraciones por satélite de una región que se extiende a lo largo de más de un millón de kilómetros cuadrados.
El derretimiento de la capa de hielo de la Antártida y el adelgazamiento de las plataformas de hielo flotantes ha contribuido a aportar un excedente de alrededor de 350 gigatoneladas de agua dulce al océano circundante, lo que ha llevado a una reducción de la salinidad en los océanos circundantes que ha sido corroborada por estudios del agua en barcos.
"El agua dulce es menos densa que el agua salada, por lo que en las regiones donde se ha acumulado un exceso de agua dulce se espera un incremento localizado del nivel del mar", afirma Craig Rye, uno de los principales autores de este trabajo, que se realizó en colaboración con científicos del Centro Nacional de Oceanografía y el 'British Antarctic Survey', en Reino Unido, y cuyas conclusiones se publican en la revista 'Nature Geoscience'.
Además de las observaciones por satélite, los investigadores también llevaron a cabo simulaciones por ordenador de los efectos de la fusión de los glaciares en el Océano Antártico. Los resultados de esta simulación reflejan fielmente la imagen del mundo real presentada por los datos satelitales.
"El modelo por ordenador apoya nuestra teoría de que el aumento del nivel del mar que vemos en nuestros datos satelitales se debe casi en su totalidad a un refrescamiento (una reducción de la salinidad del agua) por el derretimiento de la capa de hielo y sus plataformas de franja de hielo", explica Craig.
"La interacción entre el aire, el mar y el hielo en estos mares es fundamental para la estabilidad de la capa de hielo antártico y los niveles globales del mar, así como otros procesos ambientales, por ejemplo, la generación de agua del fondo de la Antártida, que enfría y airea la mayor parte del abismo oceánico global", agrega.