El empleo formal de la construcción, uno de los sectores más golpeados por la recesión en 2014, se contrajo un 2,4% en el primer semestre contra el mismo período de 2013, según el informe de coyuntura que publicó el Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (IERIC), una entidad pública no estatal. La primera parte del año tuvo un promedio de 383.703 puestos de trabajo.
El estudio destacó que "el empleo formal en la construcción permaneció constante en junio respecto al mes anterior". Aunque el volumen de empleo sectorial resultó un 1,8% inferior al de junio de 2013, la dinámica interanual "continuó con la tendencia de una marcada desaceleración del ritmo de caída por segundo mes consecutivo".
La dinámica laboral es heterogénea en el país. La mitad de las jurisdicciones exhibe un volumen de empleo igual o superior al de junio del año pasado, mientras que en la otra mitad la situación es la inversa, y el volumen de empleo muestra un retroceso. Las provincias con mejor desempeño son San Luis y La Rioja, con un crecimiento del 18,3% y 18% respectivamente en la comparativa interanual.
La cantidad de empresas que tiene el sector sigue cayendo, aunque la baja se desacelera mes a mes. La contracción en el número de compañías fue del 12,2% en mayo, del 10% en junio y del 8,9% en julio, el último mes en el que hay registros disponibles.
Durante junio, el salario promedio de los trabajadores en el sector fue de $9.807 –valor que incluye el proporcional del medio aguinaldo, lo que marca un incremento del 21,5% anual. El porcentaje evidencia una clara pérdida del poder adquisitivo, ya que la inflación superó la actualización de los sueldos en la industria.
A nivel territorial, el impacto salarial más significativo se registró en la Región Centro, donde las remuneraciones pasaron de exhibir una tasa de crecimiento interanual del 20% a una del 33% entre el primero y el segundo trimestre del año. Con todo, los máximos niveles de expansión salarial interanual en junio se concentraron en Santiago del Estero (34,5%), Neuquén (34,1%), Río Negro (30,6%), Tucumán (29,9%) y Mendoza (29,6%).
El presidente de la Cámara Argentina de la Construcción (CAC), Gustavo Weiss, había asegurado que la obra pública provincial es la más comprometida, porque hay obras de vialidad que están atrasadas por aumentos en el asfalto. En el último año, la construcción perdió 18.000 puestos de trabajo, porque es un sector que reacciona con los ciclos económicos. Cuando es positivo, el sector duplica o triplica el ciclo, pero cuando es negativo, la construcción hiperreacciona", había especificado en una entrevista en InfobaeTV.