Cuando en 2010 se aprobó la Ley de Gobierno Corporativo de Codelco, muchas cosas cambiaron en la empresa. Se subió el número de directores y, desde ese año, la compañía comenzó a hacer públicos sus estados financieros y enviarlos a la SVS.
Con esa información, El Mercurio recopiló los datos sobre remuneraciones, dietas y bonos de la alta plana ejecutiva y del directorio de la estatal desde 2009 hasta 2013.
Una de las primeras rentas que subieron en la estatal fue la de su presidente ejecutivo.
La idea, dice Gustavo Lagos, director del Centro de Minería UC, siempre fue que la renta del principal ejecutivo de Codelco se equiparara a la de un cargo similar de las mineras del mismo tamaño, para evitar la grúa, pero también como manera de incentivo, para lograr que los mejores ejecutivos lleguen a la estatal.
En 2013, por ejemplo, Thomas Keller (hoy ex presidente ejecutivo) recibió una remuneración líquida de poco más de $243 millones al año, equivalente a US$ 460 mil. Esto, según lo informado en los estados de Codelco, más que duplica la remuneración de ese cargo en comparación con cinco años atrás.
El sueldo del principal ejecutivo de la empresa, dice el senador (UDI) y miembro de la comisión de Minería y Energía de la Cámara Alta, Jaime Orpis, es alto y ha ido creciendo, pero siempre con el horizonte de equipararlo con los de las empresas privadas. "No es malo que suban (los ingresos del presidente ejecutivo de Codelco), mientras haga bien su trabajo. El límite de su sueldo está en lo que gana un ejecutivo similar en una empresa privada".
Comparado con las dietas de los CEO de compañías similares, como Glencore o BHP (que rondan los US$ 1,4 millones y US$ 1,7 millones), la del presidente ejecutivo de Codelco podría aún tener mucho por crecer.
Sin embargo, la comparación más lógica no es con la renta del jefe de un holding minero con operaciones en varios países y con intereses en variados recursos, sino que con la división de cobre de estas mismas, que es el recurso con que compiten con Codelco. Si se compara la renta, por ejemplo, con la remuneración en 2013 de Peter Beaven, el ex presidente de Metales Base de BHP, un cargo situado en Santiago y concentrado en los negocios de cobre de la minera angloaustraliana, el sueldo del jefe de la estatal es levemente inferior.
Sube la remuneración media de altos cargos
La remuneración en conjunto de los principales ejecutivos de Codelco (incluido al presidente ejecutivo) ha tenido un tránsito similar. Según las cifras en dólares de cada año presentadas por la empresa, la remuneración total de los ejecutivos principales se ha duplicado en el último quinquenio, pasando desde los US$ 5.276.000 de 2009 a los US$ 10.641.000 de 2013.
Una de las explicaciones para esta alza es el aumento, por ejemplo, de las divisiones de la estatal en el período y de la cantidad de ejecutivos de primera línea, que pasaron de 15 al terminar 2009 a 19 durante 2013.
Gran parte de este aumento está explicado por el fuerte avance que han tenido los bonos pagados a los principales ejecutivos de la compañía, los que han subido, en dólares de cada año, 16 veces, pasando desde los US$ 118 mil que la empresa desembolsó en 2009 hasta los US$ 1,9 millones que pagó en 2013, la mitad que en 2012.
Gabriel Salinas, gerente general de la empresa especializada en recursos humanos Activos Chile y con experiencia en el reclutamiento de ejecutivos mineros, dice que este nivel de crecimiento es "anormal" si se compara con otras industrias, pues el componente más relevante de la remuneración de los altos ejecutivos de la estatal es el bono. Pero, además, dice Salinas, aunque en la minería el peso del incentivo variable es mayor, "este avance no se replica en las demás mineras".
Empresas internacionales, por ejemplo, tienen como límite que los bonos no superen el 350% del sueldo fijo. En Codelco la regla es que la remuneración total no exceda "la remuneración total correspondiente al percentil 75 del mercado de referencia".
En promedio, en 2013, los 19 principales ejecutivos de la empresa recibieron por concepto de bonos un promedio de US$ 100 mil, mientras que el jefe de Metales Base de BHP, Peter Beaven, recibió, en el mismo período, un 30% menos por ese concepto.
En el mismo período, el gasto de la minera estatal en dietas al directorio se triplicó. Esto, en parte, se debió a la Ley de Gobierno Corporativo, que llevó a que la empresa buscara acercar los ingresos de su plana mayor a las de compañías similares en Chile y el mundo.Cuando en 2010 se aprobó la Ley de Gobierno Corporativo de Codelco, muchas cosas cambiaron en la empresa. Se subió el número de directores y, desde ese año, la compañía comenzó a hacer públicos sus estados financieros y enviarlos a la SVS.
Con esa información, “El Mercurio” recopiló los datos sobre remuneraciones, dietas y bonos de la alta plana ejecutiva y del directorio de la estatal desde 2009 hasta 2013.
Una de las primeras rentas que subieron en la estatal fue la de su presidente ejecutivo.
La idea, dice Gustavo Lagos, director del Centro de Minería UC, siempre fue que la renta del principal ejecutivo de Codelco se equiparara a la de un cargo similar de las mineras del mismo tamaño, para evitar la grúa, pero también como manera de incentivo, para lograr que los mejores ejecutivos lleguen a la estatal.
En 2013, por ejemplo, Thomas Keller (hoy ex presidente ejecutivo) recibió una remuneración líquida de poco más de $243 millones al año, equivalente a US$ 460 mil. Esto, según lo informado en los estados de Codelco, más que duplica la remuneración de ese cargo en comparación con cinco años atrás.
El sueldo del principal ejecutivo de la empresa, dice el senador (UDI) y miembro de la comisión de Minería y Energía de la Cámara Alta, Jaime Orpis, es alto y ha ido creciendo, pero siempre con el horizonte de equipararlo con los de las empresas privadas. “No es malo que suban (los ingresos del presidente ejecutivo de Codelco), mientras haga bien su trabajo. El límite de su sueldo está en lo que gana un ejecutivo similar en una empresa privada”.
Comparado con las dietas de los CEO de compañías similares, como Glencore o BHP (que rondan los US$ 1,4 millones y US$ 1,7 millones), la del presidente ejecutivo de Codelco podría aún tener mucho por crecer.
Sin embargo, la comparación más lógica no es con la renta del jefe de un holding minero con operaciones en varios países y con intereses en variados recursos, sino que con la división de cobre de estas mismas, que es el recurso con que compiten con Codelco. Si se compara la renta, por ejemplo, con la remuneración en 2013 de Peter Beaven, el ex presidente de Metales Base de BHP, un cargo situado en Santiago y concentrado en los negocios de cobre de la minera angloaustraliana, el sueldo del jefe de la estatal es levemente inferior.
Según la información pública disponible, los ingresos de Beaven sumaron US$ 485 mil, incluyendo sueldo, bonos y prima en acciones de BHP, además de un monto para la pensión del ejecutivo. No se cuentan en los ingresos de este cargo las regalías y gastos adicionales que hace la empresa en el ejecutivo, como casa y viáticos. En el caso de Codelco, la firma reportó el pago de solo $682 mil en viáticos en 2013.
La remuneración en conjunto de los principales ejecutivos de Codelco (incluido al presidente ejecutivo) ha tenido un tránsito similar. Según las cifras en dólares de cada año presentadas por la empresa, la remuneración total de los ejecutivos principales se ha duplicado en el último quinquenio, pasando desde los US$ 5.276.000 de 2009 a los US$ 10.641.000 de 2013.
Una de las explicaciones para esta alza es el aumento, por ejemplo, de las divisiones de la estatal en el período y de la cantidad de ejecutivos de primera línea, que pasaron de 15 al terminar 2009 a 19 durante 2013.
Si se corrige la cifra por la variación del tipo de cambio, ya que la empresa paga sus sueldos en pesos, pero los informa en dólares, la remuneración en conjunto de la primera plana ejecutiva de la estatal crece en 86%, hasta sumar $5.601 millones de 2013.
Gran parte de este aumento está explicado por el fuerte avance que han tenido los bonos pagados a los principales ejecutivos de la compañía, los que han subido, en dólares de cada año, 16 veces, pasando desde los US$ 118 mil que la empresa desembolsó en 2009 hasta los US$ 1,9 millones que pagó en 2013, la mitad que en 2012 (ver infografía). En 2012 la minera informó que este pago creció hasta los US$ 3,9 millones de ese año.
Corrigiendo por el tipo de cambio, los bonos pagados por la minera crecieron casi 17 veces, al pasar desde los $60 millones que la empresa informa haber pagado a su plana ejecutiva en 2009 hasta los $1.001 millones del año pasado, todo en pesos de 2013.
Gabriel Salinas, gerente general de la empresa especializada en recursos humanos Activos Chile y con experiencia en el reclutamiento de ejecutivos mineros, dice que este nivel de crecimiento es “anormal” si se compara con otras industrias, pues el componente más relevante de la remuneración de los altos ejecutivos de la estatal es el bono. Pero, además, dice Salinas, aunque en la minería el peso del incentivo variable es mayor, “este avance no se replica en las demás mineras”.
Empresas internacionales, por ejemplo, tienen como límite que los bonos no superen el 350% del sueldo fijo. En Codelco la regla es que la remuneración total no exceda “la remuneración total correspondiente al percentil 75 del mercado de referencia”.
En promedio, en 2013 los 19 principales ejecutivos de la empresa recibieron por concepto de bonos un promedio de US$ 100 mil, mientras que el jefe de Metales Base de BHP, Peter Beaven, recibió, en el mismo período, un 30% menos por ese concepto.
Para el senador Orpis, el problema de esta alza está en el pie en que quedan los ejecutivos al momento de negociar con los trabajadores incentivos a la producción. “Porque este aumento está muy por sobre el resto de quienes trabajan en Codelco. Aquí la presión es por qué a ellos no les dan un bono si en la plana ejecutiva pasa justamente lo contrario”.
“Yo creo que la caridad tiene que empezar por los trabajadores, los que producen el sueldo de Chile”, señala Luis Gómez, vocero del Sindicato de El Teniente, faena de la VI Región.
El dirigente pone acento en el directorio de la minera, y en que sus dietas son mucho más altas.
Según la información reportada por la empresa, en dólares de cada año, los recursos se triplicaron en cinco años, hasta los US$ 954 mil en 2013. Ese año hubo cambio de directores, por lo que el pago se distribuyó entre los dos miembros que ocuparon el mismo sillón.
Entre 2009 y 2010 se ve la mayor alza, y más que se duplicaron los recursos destinados de la empresa a estas dietas. Una de las explicaciones de esto es el cambio de gobierno corporativo, que sumó a un director más a la mesa de la estatal, pero también porque las remuneraciones subieron. En todo caso, uno de los directores, Marcos Büchi, dice la estatal, renunció a dichos pagos y “a cualquier acción de cobro presente o futura por tal concepto”.
Por ejemplo, mientras en 2009 el presidente de la minera, el ex ministro de Minería Santiago González, recibió una dieta por este rol de US$ 19 mil, un año después, el nuevo presidente de la mesa, Gerardo Jofré, obtuvo US$ 115 mil, pero eso sí el cargo es ahora de dedicación exclusiva a la compañía.