Por agua en la zona de Atacama, afectada por una prolongada sequía, Minera Caserones y los grandes agricultores de Copiapó negocian fórmulas para optimizar uso del recurso hídrico.
El agua. O más bien, la falta de ella. Eso es lo que mantiene enfrentados a la minera de capitales japoneses, Caserones, comandada hasta ahora por Nelson Pizarro, con las familias Ruiz Tagle y Prohens, pioneros en la actividad agroindustrial en la Región de Atacama. Como Pizarro partirá en septiembre a Codelco, donde asumirá como presidente ejecutivo, las partes han acordado acelerar el tranco y sellar un acuerdo, o al menos tener avanzado un compromiso, para definir qué hacer con el uso del recurso hídrico en un escenario de sequía prolongada como el que vive Atacama.
Caserones consiguió los derechos de agua para desarrollar su proyecto -sobre los mil litros por segundo-, pero los agricultores alegan que esto podría secar el acuífero y por ello están en una mesa de trabajo integrada además por el intendente de la III Región, Miguel Vargas, para lograr un acuerdo sobre el manejo del recurso hídrico del río Jorquera.
La familia Prohens es dueña de Hacienda Jorquera y los Ruiz Tagle, de Frutícola y Exportadora Atacama. Los dos grupos tienen plantaciones de uva de mesa para exportación en el área cercana a la minera.
Aunque la minera no está obligada a entregar agua a las comunidades, se ha comprometido a hacerlo para mejorar la relación con sus vecinos. Ejecutivos de Caserones dicen que la empresa entrega 50 litros por segundo a Caldera y otros 100 litros a agricultores de la zona del valle.
"Pero pedimos reciprocidad, por ejemplo, que se regule el uso de las aguas y que las empresas agroindustriales contribuyan con los estudios para determinar programas de eficiencia hídrica", comentan ejecutivos que saben del proceso.
Caserones ya había tenido negociaciones anteriores con estos empresarios. En 2008, Rafael Prohens vendió 100 litros por segundo a una sociedad vinculada a Caserones a un precio de US$ 40 mil por cada litro/segundo, lo que totalizó US$ 4 millones. También adquirió derechos de agua de la familia Ruiz Tagle, clan al que pertenece el ex ministro de Deportes del Presidente Sebastián Piñera, Gabriel Ruiz Tagle.
Caserones, que se inauguró en julio, supuso una inversión de US$ 4.200 millones. CASERONES, de capitales japoneses, tiene derechos de agua para operar.