El presidente de la Cámara Minera de Chubut, Néstor Álvarez, subrayó que“no podemos perder más tiempo, tenemos que empezar con esta actividad”en la provincia. Puso como ejemplo que de la mano de un proyecto minero como es Navidad, “durante la etapa de construcción se emplearían 3 mil personas en forma directa” mientras que luego, durante la explotación, “se emplearían entre 1500 y 1800 en forma directa y otro tanto en forma indirecta”.
En el marco del debate sobre la cuestión minera en la provincia de Chubut y tras la“Jornada de Minería, Trabajo y Salud” realizada en Trelew, Álvarez valoró el informe brindado por Diego Fridman, autor del informe especial del FUNCEI sobre el impacto de la minería en la salud de las comunidades.
“Dio una charla de casos concretos de estudios hechos en Catamarca sobre proyectos mineros, importante porque desmitifica todo lo que salga de la minería tratado desde el punto de vista de la ciencia“, explicó. Reiteró la necesidad de que se desarrolle la actividad minera en la región al resaltar que, de la mano de un proyecto minero como es el Navidad, por ejemplo,“durante la etapa de construcción se emplearían 3 mil personas en forma directa” mientras que luego, durante la explotación, “se emplearían entre 1500 y 1800 en forma directa y otro tanto en forma indirecta”.
Dijo que “hay gran cantidad de empresas alrededor que proveen de todo tipo de insumos y servicios a las mineras” y puntualizó en contacto con Radio Del Mar:“esto tiene un desborde económico muy importante, no sólo en Gastre y los pueblos aledaños sino que también llega a las ciudades más grandes como Puerto Madryn, Rawson, Trelew y Comodoro Rivadavia”, aseguró.
“Creo que habrá un desborde económico muy importante en toda la provincia. Hay mucha expectativa de la gente de Esquel, de la cordillera”, precisó el presidente de la Cámara. “Por el mal manejo que en su momento hubo por este tema hace 14 años se prohibió la actividad minera en toda la provincia, gracias a un mal manejo de un proyecto”, lamentó. “Venimos viendo que fue un grave error, se habrá manejado mal, no se logró la licencia social donde uno debe explicarle a la gente de qué se trata, qué se va a hacer; es una actividad, una industria lícita, moderna, con todos los cuidados que se tienen respecto al medio ambiente y la cuestión social”.
Negó que la actividad no deje nada a las comunidades involucradas. Dijo que“tiene una carga tributaria muy pesada y es una actividad muy particular porque la inversión comienza a recuperarse en 7, 8 o más años. El inversor pone mucho de entrada y recién recupera a mediano plazo”.“Estamos armando desde la Cámara un plano minero integral de la provincia. No sabría decir todo el potencial porque es muy enorme. Sabemos que tenemos plata, plomo en el Proyecto Navidad, hay oro en el proyecto Suyai, tenemos uno de los yacimientos de uranio más ricos que hay que es Cerro Solo en el que está trabajando la CNEA”, enumeró Álvarez e ilustró que “un yacimiento tiene relevadas 20 mil millones de dólares en plata en bruto”. Indicó que “el 90% de los impuestos de lo que se le cobra a la minería se lo lleva Nación; deja mucho y los propios proveedores y trabajadores pagan impuestos. Es difícil de magnificar todo lo que representan”. Comentó que “próximamente tendremos el mapa minero con todo lo declarado y podemos sacar un número estimativo” al respecto.
“La minería está en los lugares donde más se necesita recurso genuino; esa gente merece tener una oportunidad“, consideró.
Fuente: ADN Sur.
Grupo de Vecinos pidió por la Minería
Diario Jornada
No hay otra alternativa en la Meseta que no sea el desarrollo de actividades mineras”, advirtió el intendente de Trelew, Máximo Pérez Catán, tras su reunión con un grupo de pobladores. “Se necesita un sistema para inyectar inversiones y fondos para que los distintos actores puedan encontrar un modo de volver a otras actividades y fortalecerse cuando se termine la minería”.
Según informó, “vinieron vecinos con la inquietud que postergan sus perspectivas de futuro cuando no se discuten los proyectos mineros. Hablamos de esa percepción y del trabajo que vinieron a hacer. Encontrarse con funcionarios y legisladores con el afán de transmitir la opinión de quienes son pobladores que buscan la apertura del debate de una actividad que le va a permitir tener trabajo y expectativas de seguir en sus pueblos en años venideros”.
Según Pérez Catán, “hasta ahora están en veremos. No se logró recuperar la actividad agropecuaria. Eso lleva al achicamiento de almacenes y proveedurías, talleres de vehículos, imposibilidad de sostener las estaciones de servicio, etcétera”, describió.
Apuntó que los pobladores de la meseta dependen de que el Estado pague los sueldos de los policías, de la gente de escuelas, hospitales y centros de salud. “Dependen del Estado para el combustible y las cooperativas que generan alternativas”, reveló. “Cuentan que los jóvenes terminan o emigrando para capacitarse y una vez capacitados no pueden volver porque no tienen cabida en sus localidades o, en su caso, los que quedan anclados sin oportunidad de empleo con problemas muy graves como adicciones al alcohol como consecuencia de no tener expectativas”.
Consultado respecto a la peligrosidad en el uso del agua y los costos, Pérez Catán aclaró: “La verdad es que no soy un técnico más allá de que me informo y aprendo. Trato de interiorizarme para opinar con propiedad. Lo correcto sería abrir el debate y que antimineros y promineros muestren datos técnicos”.
Precisó que “no hace mucho, la Comisión Nacional de Energía Atómica con la Universidad de La Plata presentaron un informe sobre la ´sobreabundancia´ del agua destinada a la minería o agua industrial en la zona de Cerro Solo, que es más que suficiente para desarrollar actividades mineras y no es apta para el consumo humano”.
“No lo puedo calificar porque no soy un especialista -subrayó-, tengo que confiar que estas instituciones lo hacen con objetividad y datos técnicos probatorios de lo que transmiten. Hay que poner en debate esta cuestión”.
Los pobladores pidieron al jefe comunal su apoyo para el desarrollo de esa región a través de la minería. “Lo que hay no alcanza para vivir. La gente se va, especialmente la juventud”, dijeron. El vocero fue Francisco Chiquichano, de Blancuntre. “Necesitamos el apoyo del intendente. Manifestó que está a favor de la actividad. Abrimos el debate con respecto a la minería porque no vislumbramos otro futuro. La situación en esa zona es crítica”.
Chiquichano aseguró que la mayoría de los diputados y funcionarios políticos estuvieron en el lugar. “Saben la problemática y lo que vivimos allí. Nos estamos quedando solos, sin la juventud. No hay oportunidades, el que se va no vuelve”, enfatizó. “Las empresas mineras siempre van a hablar con nosotros. Dicen que si se autoriza, van a venir varias. Las que estaban se fueron al prohibirse la actividad; si eso se autorizara, volverían y tomarían mano de obra”, apuntó.
Aclaró Chiquichano que reclaman una “zonificación”. Se refirió a la ley 5001 y enfatizó que en su segundo artículo da esa posibilidad. Se refirió además al uso del agua, fundamento por el cual varios movimientos antimineros se manifiestan en contra de la explotación. “Agua sobra, de muy buena calidad. La que se utilizaría es reciclada”.
El vecino indicó que “la cuenca del Sacanana tiene más agua que el Dique Ameghino” y recordó que la Meseta padece “una sequía prolongada desde hace 10 años” lo que sumado a la caída de ceniza “diezmó los campos y nos puso en una situación muy mala económicamente”.
Afirmó que “la gente subsiste” en esas localidades y aseguró que “lo que nosotros vemos con alarma es que la juventud se va y los mayores nos vamos quedando solos. Si no hay trabajo la juventud se va y no vuelve”.
Además de Chiquichano, estuvieron Mario Vázquez y Oscar Velázquez (Gastre); Héctor Ferrari (Paso del Sapo); Silvia Lefimí y Juan Riera (Gastre); Marcelo Barriocanal (Lagunita Salada); Félix Grenier (Colán Conhué) y Claudio Cancian (Gan Gan).
El intendente de Trelew, Máximo Pérez Catán, recibió ayer a vecinos de la meseta que buscan acelerar el debate sobre la minería en la Legislatura, quienes además expresaron su postura favorable a la zonificación por FM EL CHUBUT, y el jueves presentaron un manifiesto a los diputados Roberto Risso de la UCR, y Oscar Petersen del Polo Social.
Pérez Catán fue contundente al afirmar que «a mi entender hoy no hay ninguna otra alternativa en la meseta que no sea el desarrollo de actividades mineras como un sistema de inyectar inversiones, fondos y actividad económica». Por eso, insistió en la necesidad de impulsar el debate y «contrastar los estudios técnicos de los sectores (promineros y antimineros), porque si no ésta va a ser la discusión del nunca iniciarse, y los pobladores de la meseta son los que se van a joder».
«Lo correcto sería abrir el debate, y que los antimineros y los promineros puedan mostrar datos técnicos», sostuvo Pérez Catán, y adelantó que confía en los estudios recientes efectuados en la meseta por la Universidad Nacional de La Plata y la Comisión de Energía Atómica. «El informe realizado sobre la sobreabundancia de agua destinada a la minería o al agua industrial en la zona de «Cerro Solo», es más que suficiente para desarrollar actividades mineras, y que no es apta para el consumo humano», afirmó el intendente.
LA CRISIS
Por otra parte, Pérez Catán se refirió a la complicada situación económica que le describieron los pobladores de la meseta luego de la crisis ovina y su impacto en otras actividades. «Dependen de que el Estado pague los sueldos porque viven de los sueldos del empleo público, de los policías, de la gente que está en las escuelas, en los hospitales o en los centros de salud, y además como si eso fuese poco, dependen del Estado también para tener combustible y dependen del Estado para que funcione la Cooperativa; porque el Estado paga los salarios de los empleados de las cooperativas que le generan energía», advirtió.
A su vez, sostuvo que hoy los vecinos de la meseta «están en veremos porque no han logrado recuperar la actividad agropecuaria y ellos estaban muy preocupados por esta situación, y eso conlleva necesariamente al achicamiento de las otras actividades conexas, como el desenvolvimiento de las localidades, el achique de los almacenes y de las proveedurías, la imposibilidad de sostener las estaciones de servicio, servicios de todo tipo; hay cada vez menos talleres de reparación de vehículos, que para ellos es casi un tema vital, y se acrecienta la dependencia del Estado».
CARENCIAS
Por su parte, los pobladores mencionaron por FM EL CHUBUT que confían en que los legisladores puedan encontrar un término medio entre las posturas antagónicas que aparecen hoy en pugna. Consideraron que la minería en la actualidad es la única actividad que podría impulsar un desarrollo de infraestructura en la región, que a su vez beneficiaría a otras ciudades como Trelew. Por ello, insistieron en la necesidad de aplicar la zonificación que está contemplada por la Ley 5001.
En tanto, Pérez Catán sostuvo con preocupación que en la meseta «cada vez son menos los jóvenes que se quedan, y los que se quedan son jóvenes que no llevan la mejor vida; terminan emigrando para capacitarse y una vez capacitados no pueden volver porque no tienen, obviamente, cabida en sus localidades», concluyó.