Hace algunas semanas atrás el Ministerio de Energía chileno confirmó la compra a Estados Unidos del primer buque metanero con shale gas que llegará al sur.
Se espera que el cargamento de GNL llegue en los primeros meses del 2016, una vez que entre en operaciones la primera terminal exportadora para el fluido no convencional estadounidense en Sabine Pass, Louisiana.
El gobierno chileno firmó un acuerdo con la British Gas, que será su abastecedora, que ya tiene un acuerdo con la Empresa Nacional de Petróleo (ENAP), Metrogas y Endesa. La petrolera multinacional tiene contratado el primer tren de licuefacción que operará en el puerto shale.
El acuerdo fue sellado, en tierras norteamericanas, por las máximas autoridades de la política energética chilena, el ministro de Energía, Máximo Pacheco, y el gerente de la ENAP, Marcelo Tokman. Los especialistas del país trasandino aseguran que esto permitirá diversificar el origen y la procedencia del GNL que ingresa a Chile.
Además la administración chilena mantiene en vigencia un Tratado de Libre Comercio (TCL) con Estados Unidos, por lo que el gas llegará a los puertos de sus costas sin arancel, lo que representa un ventajoso beneficio económico y para la tarifa del usuario.
Sin embargo, entre los objetivos de la visita de las autoridades chilenas en tierras norteamericanas se buscó además establecer relaciones con las principales petroleras que allí tienen bases, en vista de comenzar a testear el potencial no convencional del subsuelo chileno.
De acuerdo con el informe de la Agencia de Energía Internacional (EAI por sus siglas en inglés), Chile posee uno de los mayores reservorios de petróleo y gas no convencional de Latinoamérica. Las estimaciones indican que el volumen asciende a 49 billones de pies cúbicos de gas y a 2,4 millones de barriles de petróleo.
La principal cuenca no convencional chilena, que comparte en la Patagonia con Argentina, es Magallanes. Allí ENAP ya realizó algunas pruebas en formaciones no convencionales para dimensionar los volúmenes extraíbles.
Según los datos publicados por Energía, la revista especializada del sector en Chile, con tecnología de hidrofractura ya se realizaron alrededor de 10 pozos con "buenos resultados". Con una producción inicial de 60 a 80.000 metros cúbicos/día, la operadora ha podido estabilizarlos en 45.000 metros cúbicos/día.
Sin embargo los directivos de la ENAP piensan ir más a fondo en el desarrollo del gas. En los últimos días reestructuraron la firma y dieron luz verde a la Gerencia de Gas y Energía, para la que pusieron en funciones a un experimentado del mercado eléctrico. De esta manera sumaron la tercera línea de negocios que agrega a exploración y producción y a refinación y comercialización.