La industria del GNC vive una nueva era dorada. Se asemeja a la de principios del 2000, cuando el país estaba inmerso en una profunda crisis económica y los automovilistas optaban por el gas como estrategia para ahorrar en transporte. Ahora las causas y los efectos se repiten, aunque a un ritmo menor.
Según indica Hugo Lamy, titular de CAPEC, las transformaciones de automóviles venían siendo desde principios de año en promedio de entre 15 y 16 mil unidades. En julio, sin embargo, destacó que se alcanzó un mayor nivel de actividad “entre 18 y 19 mil colocaciones”, la mayor marca de los últimos tiempos. El 70 por ciento se trató de equipos de quinta generación.
Si bien esto significa una reactivación de la industria y un incremento de la utilización de la capacidad instalada por parte de los talleres, también Lamy explica que obliga a realizar mayores controles para evitar que haya anomalías en el sistema y que ciertas operaciones no transiten por todos los senderos correspondientes de la cadena comercial.
Sobre este punto Lamy está trabajando con el Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS). Tal es así que en septiembre estaría en condiciones de anunciar actualizaciones tecnológicas y de uso del software. “Son mejoras en el proceso de información que estamos revisando”, adelantó.
No obstante, el dirigente aclara que “el cliente tiene garantizado el servicio, no está desde ningún punto de vista en riesgo; los productos que se venden son correctos, están habilitados y certificados; lo que ocurre es que en algunos casos las operaciones no pasan por el circuito correcto en su totalidad”.
Por eso, Lamy explica que “se están analizando soluciones para facilitar la trazabilidad de los productos”. La propuesta apunta a conocer en qué circuito se han movido los equipos, para detectar posibles movimientos en el mercado negro. “Queremos profundizar las fiscalizaciones en el proceso intermedio”, puntualizó. En su visión sería importante acelerar el proceso.
“Las perspectivas son muy buenas”, reconoce el empresario. Todas las variables del negocio están alineadas para que el futuro sea próspero: bocas de expendio distribuidas por todo el país, petroleras haciendo inversiones para aumentar la producción y buena relación de precio con las naftas.