A pesar de que Arica y Parinacota es una región que posee muchas reservas mineras de metales como cobre, plata y oro, además de no metales como el azufre; los proyectos de la industria recién están partiendo en la zona, principalmente impulsados por la pequeña y mediana minería.
Viendo dicho potencial, es que Fundación Chile (FCh) está proyectando a la décimo quinta región como una zona estratégica para desarrollar proyectos y diversas soluciones de Investigación y Desarrollo (I+D) en torno a la eficiencia energética en minería, las que, incluso, pueden ser implementadas en etapas tempranas, es decir, en la misma fase de diseño de las faenas.
Ya dieron el primer paso. Acaban de iniciar el proyecto “Aplicación de medidas de eficiencia e innovación energética para la minería de la región de Arica y Parinacota”, junto a Minera Pampa Camarones, la cual está pronta a iniciar su producción de cobre - estimada en 8 mil toneladas anuales - y con Quiborax, una de las productoras de ácido bórico más importantes del mundo.
La iniciativa, que es financiada por el Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC) del gobierno regional, en conjunto con FCh, considera la creación de un mapa de oportunidades de eficiencia energética para luego definir, desarrollar e implementar diversas soluciones.
“Con el mapa energético hicimos una categorización para saber dónde se consume más energía. Descubrimos que era en los procesos de molienda y de transporte de mineral, además del consumo propio de combustible en el proceso minero, donde se encontraban las mayores oportunidades”, señala Juan Carlos López, director de proyecto de Sustentabilidad de FCh.
Desde la gran minería
Explica que uno de los objetivos de FCh es transferir conocimiento desde la gran minería hacia la mediana y la pequeña empresa, “que también es uno de los propósitos de ser parte del cluster del Programa de Proveedores de Clase Mundial”. Acota que el know how obtenido en proyectos con grandes empresas como BHP Billiton y Anglo American, se puede adaptar a la realidad de las más pequeñas, con soluciones que permiten ahorros desde US$1 millón hasta US$ 12 millones anuales.
De esta manera, es que en la subgerencia de Eficiencia Energética de Fundación Chile cuentan con una cartera de siete proyectos, que involucran recursos por US$ 2 millones, pero que para su implementación, es necesaria una inversión adicional de US$ 15 millones por parte de los privados.
Entre las iniciativas, se destaca una que baja el consumo de combustibles fósiles en procesos productivos, aumentando a la vez la productividad. Están incorporando la energía solar en distintas etapas del sistema productivo y están removiendo la concentración de impurezas en las soluciones del circuito, sin afectar las concentraciones de cobre.