Presidente del Instituto Argentino del Petróleo y del Gas. El directivo sostuvo que las operadoras esperan concesiones más largas y acceder al financiamiento.
Por Fernando Castro.
El presidente del Instituto Argentino del Petróleo y del Gas (IAPG), Ernesto López Anadón, manifestó que “hay un gran interés” de las empresas productoras de petróleo para seguir invirtiendo en Argentina. Pero consideró de una importancia relevante que las operadoras puedan acceder a un plazo mayor en las áreas concesionadas para recuperar lo que invierten y que Argentina pueda solucionar el frente externo de acceso a los capitales, con la crisis de los holdouts y el Club de París a la cabeza.
En diálogo con LM Neuquén en Buenos Aires, López Anadón afirmó que es necesario que Nación y las provincias acuerden qué cambios se van a introducir en el sector petrolero, para “dar esa luz verde para todas las empresas que quieren venir” al país.
¿Cómo caracterizaría el actual momento que atraviesan las petroleras y las perspectivas de desarrollo?
Creo que hay un gran interés empresario, en las petroleras, por aumentar las actividades, sobre todo las empresas que ya están. El interés existe. Hay una serie de temas para solucionar.
¿Como cuáles?
Entre ellos, el tiempo que tienen las empresas: muchas de las áreas vencen en breve, diez años, once años, plazos breves para una explotación petrolera. Hay que ver la tendencia de los precios. El tema del financiamiento. Argentina está negociando con el Club de París, afronta el problema de los holdouts, y hay que despejar esos caminos para que venga el financiamiento. En el sector petrolero esto es relevante, porque la inversión es muy importante. Y después, el otro tema es el de la infraestructura en no convencionales, se necesitan sistemas más ágiles; para la importación de materiales no puede ser que un equipo contratado quede seis meses en un puerto.
¿Qué opinión tiene sobre el cambio de condiciones que Nación fijó en su proyecto de ley petrolera?
De eso conocemos los lineamientos generales; creo que son correctos, en el sentido de que hay que dar un panorama de extensión de áreas razonable para recuperar inversiones. Hay que tratar de generar condiciones estables hacia el futuro, porque si vamos cargando las tintas en el momento estamos generando riesgos de inversión; hay que buscar una solución entre las provincias y Nación para dar esa luz verde a estas empresas que quieren venir a invertir.
El texto propone límites al acarreo como mecanismo de participación de las empresas provinciales, ¿está bien?
Pregunta difícil de responder. Es una figura común en la industria. En general, si uno tiene un buen activo y viene algún otro a querer entrar, uno se lo vende por plata o por trabajo. Si es por trabajo, es el famoso acarreo. Creo que la discusión no está en la figura de carry sí o no, sino en la figura de si todas las áreas que se reviertan son de la Provincia y esta las licita en igualdad de condiciones para todo el mundo o se las da a una empresa. Creo que lo sustancial del debate está en esa sutileza. Creo que lo que se está tratando de hacer es abrir el juego a más empresas.
Según su experiencia, ¿qué falta para afianzar los desarrollos en Vaca Muerta?
Estamos en una etapa exploratoria. El tema es buscar cuáles son los mejores lugares para perforar en Vaca Muerta y establecer con qué técnicas se va a hacer para realizarlo de la forma más barata posible, para que los pozos sean más rentables. Se perforaron cerca de 200 pozos y no es nada todavía. Parecen enormes cantidades de inversión, pero hacia adelante queda un camino por recorrer, no sé si será largo o corto. En Estados Unidos se hicieron en los años ochenta pozos a pérdida, y en el 95 recién se hizo el primer pozo económico. Ya se habían perforado 600, y luego 1.000 por año ya en la etapa de industrialización. No van a ser 15 años en el caso de Vaca Muerta, pero es una etapa donde estamos estudiando cómo se van a bajar los costos. Es crucial estar preparados para cuando se inviertan de 10.000 a 13.000 millones de dólares por año, para eso se necesita capacitar y tener una infraestructura que esté a tono con ese momento.