La inversión extranjera materializada (IED) ingresada al país entre enero y marzo de este año vía Decreto Ley 600 llegó a los US$ 2.107 millones, el monto más alto desde 2009 para ese período y con un aumento de 41% respecto al mismo lapso del año anterior, según cifras del Comité de Inversiones Extranjeras (CIE).
Los sectores donde se recibieron los capitales extranjeros fueron comercio, con US$ 1.500 millones (71% del total); seguros, con US$ 341 millones; minería, con US$ 170 millones; y Comunicaciones, con US$ 28,6 millones.
En términos de países de origen de los montos, Estados Unidos con US$ 1.538 millones; España con US$ 364 millones y Japón con US$ 133 millones, encabezan la lista de las naciones cuyas compañías invirtieron en el país.
Con la totalidad de la inversión en retail, la estadounidense Walmart encabeza la lista del capital extranjero traspasado vía DL 600 a Inversiones Australes Dos Limitada. Le sigue el Grupo Bupa Sanitas Chile Uno SpA, que adquirió un 56 % de la propiedad de Cruz Blanca, con US$ 340 millones y Minera Lumina Copper, que recibió US$ 132 millones desde Pan Pacific Copper Co./Mitsui Bussan Copper Investment.
Los datos de ingreso de capitales son distintos a las cifras de solicitudes de inversión aprobadas, también al alero del DL 600. Estas últimas alcanzaron los US$ 15.454 millones en los primeros tres meses del año, según cifras del CIE, y reflejan sólo montos de proyectos aprobados por la autoridad, que normalmente se ejecutan a mediano plazo.
“Cuando las empresas solicitan invertir un monto determinado en el país, este puede ingresar en un plazo variable de entre tres y ocho años o más. Es decir, el flujo de ingreso en un período no dice relación con que eso vaya a ser todo el capital que va a entrar”, explicó un abogado de la plaza que conoce de estos temas.
El CIE y el Banco Central están trabajando en la metodología de las cifras de inversión materializada, vía DL 600, hasta junio de este año.
Desde 1974 -cuando se creó el “estratégico” instrumento que regula la inversión foránea en Chile-, al día de hoy, han ingresado capitales por US$ 102.864 millones por medio de este decreto.
Capital total
En tanto, la inversión extranjera total registrada en Chile ascendió a US$ 7.131 durante los primeros cuatro meses del año, un 82,3% más que en igual periodo del año anterior y el monto más alto desde 2008, según estadísticas del Banco Central.
Para el vicepresidente ejecutivo del CIE, Jorge Pizarro Cristi, “la inversión extranjera en Chile goza de muy buena salud (…) Si bien nuestra proyección para este año es que la IED tenga un comportamiento bajo rangos de normalidad, en línea con lo que espera la Cepal para América Latina, sin duda esta es una buena señal”.
En lo que se refiere al uso del Decreto Ley 600, el personero señaló que “hemos visto un flujo normal de capitales. Es relevante destacar que durante estos meses, no hemos tenido una variación sustancial en las solicitudes para acogerse a este mecanismo de transferencia”.
El protocolo de acuerdo de la reforma tributaria mantiene la derogación del DL 600, la cual de acuerdo al texto original del proyecto correrá desde el año 2016. También incorporó la creación de un comité de espertos, que propondrá una nueva institucionalidad para la inversión extranjera en Chile.
A juicio del ex vicepresidente del CIE, Matías Mori, los datos del primer trimestre indican que “el DL 600 es una muy buena herramienta de política pública y que es efectivamente utilizada, a diferencia de lo que se ha manifestado en el debate”.
Un ejecutivo vinculado al retail dice que la mayor recepción de inversión en esta industria se explica porque “es el último sector que se va a frenar, pues está muy vinculado al consumo y este se ha desacelerado más lento”.
OPERATIVIDAD DEL DL 600
El Decreto Ley 600 es un mecanismo de transferencia de capitales hacia Chile. Bajo este régimen voluntario, los inversionistas extranjeros que ingresen capitales, bienes físicos u otras formas de inversión, solicitan suscribir un contrato de inversión extranjera con el Estado de Chile. Desde su entrada en vigencia en 1974, la mayoría de los inversionistas ha utilizado este mecanismo. A la fecha, se han materializado US$ 102.864 millones a través del DL 600. Pueden acogerse a este régimen personas naturales y jurídicas extranjeras.
El inversionista también podrá optar por un régimen de invariabilidad tributaria, en el que el impuesto adicional a la remesa de utilidades será de 42% y se mantendrá invariable por 10 años. A este beneficio se puede renunciar en cualquier momento por una sola vez, quedando el inversionista sometido al régimen común aplicable en el momento de la remesa y que hoy alcanza a 35%. La reforma tributaria considera la derogación del DL 600. Los titulares de los contratos ya suscritos seguirán rigiéndose por las normas vigentes de sus convenios.