Las delegaciones de Cuba y China han suscrito este martes un total de 29 acuerdos de cooperación en los ámbitos económico, cultural y educativo, en el marco de la visita del presidente chino, Xi Jinping, a la isla, donde se ha reunido con su homólogo cubano, Raúl Castro.
Entre los principales convenios firmados se encuentra el acuerdo marco para la cooperación en el ciberespacio, así como el otorgamiento de una línea de crédito a Cuba para la ejecución de la construcción de una terminal multipropósito en el puerto de Santiago de Cuba, de acuerdo con el portal de noticias 'Cuba Debate'.
Otros proyectos bilaterales pactados durante el encuentro de ambas delegaciones en el Palacio de la Revolución abarcan el intercambio en el campo de la biotecnología, el desarrollo de las energías renovables y el monitoreo ambiental.
En el ámbito económico, se rubricaron protocolos para el control de la calidad del tabaco y del azúcar que Cuba exporta al gigante asiático, mientras que en el campo cultural se ha trazado un plan ejecutivo 2014-2017, así como el fomento de el intercambio educativo entre ambas naciones.
VISITA A FIDEL CASTRO
El presidente de China, Xi Jinping, ha aprovechado su estancia en La Habana para visitar al líder revolucionario cubano Fidel Castro, al que ha mostrado el "respeto" del pueblo chino hacia su persona, a la vez que ha destacado el "buen estado de salud" del que hace gala, cuando se acerca su 88 cumpleaños.
Xi ha afirmado que su visita de Estado a Cuba está destinada a potenciar la amistad tradicional entre los dos países, construida conjuntamente por Castro y las viejas generaciones de líderes chinos, con el fin de dar un nuevo impulso a la cooperación bilateral.
"Usted es el fundador de las causas de la revolución y la construcción de Cuba y también de la relación entre China y Cuba", ha señalado Xi durante la conversación con Castro, con quien ha intercambiado opiniones respecto a la situación internacional y otros temas de interés común.
SU LLEGADA A LA ISLA
El pasado lunes, coincidiendo con su llegada a la isla, el presidente chino aseguró que ve la actualización del modelo económico cubano, que se viene impulsando de forma integral durante los últimos años, como una "importante oportunidad" para el desarrollo de nuevos lazos comerciales con China.
Tras aterrizar en el aeropuerto de La Habana, dentro de su gira por varios países latinoamericanos, Xi alabó "la firmeza" de Cuba en la salvaguarda de su soberanía estatal y destacó a la isla como "un país de peso en América Latina y el Caribe".
"El pueblo cubano ha persistido en el camino del socialismo, salvaguardando con firmeza la soberanía estatal y realizando arduos esfuerzos por impulsar el crecimiento económico, al tiempo que ha venido elevando de continuo el nivel de vida del pueblo", sentenció Xi.
El presidente chino, Xi Jinping, inició ayer las actividades de una visita de dos días a Cuba, en busca de convertir a su país en gran inversionista en la isla, además del segundo socio comercial y primera fuente de créditos.
“Esta visita cumplirá con los propósitos de fomentar la amistad, ahondar la confianza mutua, ampliar la cooperación e impulsar el desarrollo, abriendo una nueva etapa de la cooperación amistosa de beneficio mutuo entre China y Cuba”, dijo Xi, quien llegó el lunes por la noche a La Habana.
Xi fue recibido la tarde de ayer por su homólogo cubano, Raúl Castro, con quien realizará la firma de varios acuerdos entre ambos países comunistas, en una gira centrada en la economía más que en la ideología.
Cuba es la última escala de una gira latinoamericana que lo llevó también a Brasil, Argentina y Venezuela. A estos dos últimos países Xi tendió la mano con diversos acuerdos, mientras sus economías son miradas con recelo por Estados Unidos y Europa.
En coincidencia con su visita, medio centenar de empresarios chinos exploraron el lunes oportunidades de negocios en la isla, atraídos por las nuevas ventajas que ofrece Cuba a la inversión extranjera y por la futura zona franca de Mariel, 45 kilómetros al oeste de La Habana.
“Queremos que los empresarios chinos inviertan en Cuba y que se asocien con empresas cubanas”, dijo Déborah Rivas, directora general de Inversiones Extranjeras de Cuba.
Xi culmina su visita hoy en Santiago de Cuba, al sureste de La Habana, días después de una gira latinoamericana del presidente ruso, Vladimir Putin, quien visitó Cuba, Nicaragua, Argentina y Brasil.
Las giras de Putin y Xi a una región donde la influencia de Estados Unidos solía ser omnipresente, fueron calificadas ayer como “una de las proezas más grandes de la historia humana”, por el líder cubano Fidel Castro, de 87 años, retirado del mando desde 2006.
Raúl Castro emprendió reformas económicas en 2008, proceso que algunos analistas consideran inspirado en China, para dar eficiencia al agotado modelo de estilo soviético.
Pero al cabo de seis años de reformas, la economía cubana sigue sin despegar, debido principalmente a la falta de inversiones, por lo que la llegada de capitales frescos es vital.
Cuba puso en vigor en junio una nueva Ley de Inversión Extranjera y promueve la instalación de empresas foráneas en la zona franca del megapuerto de Mariel, inaugurado en enero, que absorberá todo el tráfico de carga de La Habana.
“Cuba ya se encuentra impulsando de forma integral la actualización del modelo económico, lo cual constituye nuevas e importantes oportunidades de desarrollo para los lazos chino-cubanos”, consideró Xi.
Pekín es la principal fuente de créditos de La Habana, que, debido al embargo estadunidense, carece de acceso a los organismos financieros internacionales.
Ambos sistemas se definen a sí mismos como comunistas. Ambos tienen un partido único y son los dos, con características distintas, gobiernos autoritarios. ¿Pero cuánto se parecen los modelos políticos de China y Cuba? ¿Se pueden extrapolar experiencias entre uno y otro?
BBC Mundoexplica en nueve puntos las principales similitudes y diferencias entre ambos modelos.
. CHINA, UN MODELO DIFÍCIL DE CLONAR
"China posee una economía de libre mercado dirigida por el Estado. Ese es, en general -más allá de Cuba- un tema que los países en desarrollo están mirando para saber qué se puede aprender", explica Ariel Armony, director del Centro de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Miami.
"El problema es que China es un caso muy específico. Resulta difícil extraer lecciones que sean aplicables a otros contextos", afirma el también coautor de "From the Great Wall to the New World: China and Latin America in the 21st Century" (De la gran muralla al nuevo mundo: China y América Latina en el siglo 21).
Por su parte, el profesor del Centro de Investigaciones de Economía Internacional de la Universidad de La Habana, Julio Díaz Vázquez, también sostiene que "el modelo chino no es clonable porque responde a otros intereses, a otra cultura. Fue algo distinto siempre", afirma.
Aunque ambos países han mantenido una larga relación bilateral, Cuba no es una referencia para la China actual, como comenta Yuwen Wu, periodista del servicio chino de la BBC. "Se admira a sus médicos y sus servicios de salud, pero no creo que el modelo chino haya aprendido algo del cubano".
Sin embargo, los líderes chinos todavía se refieren a Cuba con camaradería, explica Wu, y esa es para ella una de las razones por las que Xi Jinping visita la isla este martes.
"La ex embajadora de China en Cuba, Liu Yuqin, es citada esta semana por el Diario del Pueblo -periódico oficial del Partido Comunista- diciendo que Cuba es buen amigo, camarada, hermano. Yuqin dice que los cubanos han aprendido de la reforma económica china y que la visita de Xi es una suerte de aprobación de los cambios que están ocurriendo en la isla".
DESCENTRALIZACIÓN VS. CENTRALIZACIÓN
China implementó a finales de la década del 70 un programa de reformas económicas llamado socialismo con características chinas.
El proceso de transformación dirigido por el líder Deng Xiaoping buscaba transformar a la estancada y empobrecida economía planificada en una economía de mercado, capaz de generar mayor crecimiento económico.
"En el proceso de reformas que se llevó a cabo en China, la transformación del Estado involucró la descentralización del proceso de toma de decisiones hacia las autoridades locales y en Cuba no ocurre lo mismo", afirma el profesor Armony.
Entre otras medidas, los chinos implementaron la descolectivización de la agricultura, la apertura del país a la inversión extranjera y el permiso a emprendedores a iniciar empresas.
Reformas muy similares a estas han sido implementadas por el presidente cubano Raúl Castro desde su llegada al poder. Sin embargo, como destaca Mesa Lago, "Raúl ha mantenido el modelo económico socialista, con predominio del plano central y la empresa estatal".
. RENOVACIÓN DE LA BUROCRACIA ESTATAL
La burocracia china no opuso resistencia cuando el presidente chino Deng Xiaoping comenzó el proceso de reformas tras la muerte de Mao y ocurrió una suerte de "purga no violenta" entre los cuadros tradicionales del Estado y del Partido Comunista. "Esto ha sido muy importante. Si se quiere implementar una serie de reformas, hay que garantizar que la burocracia estatal va a sumarse a este proceso y no va a poner obstáculos", sostiene Armony.
Raúl Castro, por su parte, tras asumir el mando en 2006, incorporó a sus viejos compañeros de lucha al alto gobierno, en lugar de renovar los cuadros.
. DESIGUALDADES, CLASE MEDIA Y EMPRENDIMIENTOS
. China previó que iban a producirse desigualdades con las reformas y el presidente Deng aceptó que una minoría se hiciese rica y que emergiera una clase media que concentra la promesa del crecimiento económico futuro. "En China hay un grupo que se ha hecho hiper rico, pero también han salido millones de personas de la pobreza. Ya China no puede sustentar los niveles de crecimiento que tenía hasta ahora en función de un modelo exportador, ahora es el gran momento del consumo interno", explica Armony.
. La cubana, por lo pronto, es una sociedad con pocos recursos que se ha vuelto mucho más desigual de lo que era -entre otras razones, por el efecto de las remesas en dólares y la corrupción- a pesar de que el gobierno no ha dado rienda suelta al emprendimiento.
. "En Cuba, si tengo un comercio y logro ganancias, me puedo comprar un carro. Pero las reformas no me permiten invertir en nuevas iniciativas, ni contratar más trabajadores de los que el gobierno permita. El Estado sigue controlando de una manera muy fuerte y no permite que se desarrolle esta clase media, lo cual es central. ¿La razón? Mantener el poder político", sostiene Armony.
Según el profesor Díaz Vázquez, aún parece lejana en Cuba la idea de dar aliento a la iniciativa individual para desarrollar las fuerzas productivas, como lo hizo China.
"Uno de los problemas que tiene la economía cubana es que tiene un alto nivel educacional de su fuerza de trabajo, que no se refleja en la producción. Cuba tiene más de un millón de graduados universitarios, ¿y dónde está el impacto de esa fuerza de trabajo calificada en la producción? El 36% de los graduados universitarios no trabaja dentro de su especialidad. Si yo fuera Marx, diría que allí se tiró el dinero", opina el catedrático de la Universidad de La Habana.
. LA EXPERIMENTACIÓN Y EL AVANCE
. Cada una de las reformas económicas generales que ejecutó China, fue antes probada localmente, como ocurrió en el caso de las "zonas francas" que comenzaron en el sur de China.
. "La experimentación fue un elemento importante del proceso de transformación. Se pudo ver qué funcionaba y qué no, se pensaba en cómo ajustarlo y una vez que empezaban a funcionar, replicaban experiencias en otros lados. Luego el modelo cambió y se creó un sistema de competencia entre provincias. Nada de esto hay en Cuba. Ninguna de las reformas nos hace pensar en esto", dice Armony. "China comete errores, pero los revisa, analiza y acciona en función de aprender de esos errores. Tiene una estrategia hacia adelante, no da un paso adelante y tres para atrás", finaliza el académico.
. EMPRESAS ESTATALES.Y PRIVADAS
Además de mucha inversión extranjera, en China hay empresas estatales que funcionan, en gran medida, como empresas privadas: su objetivo principal es lograr objetivos económicos. Y estas empresas guardan estrecha relación con la banca, y se comportan a su vez como agentes capitalistas. A partir del año 2000, el Estado pidió a las empresas que exportaran, invirtieran, buscaran negocios y es cuando empezaron a adquirir dimensión global.
Sobre ellas, comenta Armony: "Tienen un acceso directo y en grandes cantidades a financiamientos de los bancos, un elemento fundamental de su éxito en el exterior. Cuando van y compiten por una concesión de minería, petrolera, etc., en muchos casos pueden llevar además una promesa de construcción de infraestructura. Son empresas del Estado, que se mueven como si fueran privadas, pero con dinero estatal. ¿Cómo puede competir con China una empresa privada de Occidente, si no posee un nivel de financiamiento tan fácil y barato?".
En Cuba, en cambio, el gobierno ha reconocido la necesidad de replantear el funcionamiento de las empresas del Estado, que son mayoritariamente improductivas y representan una gran carga burocrática. En la actualidad, Cuba se proyecta internacionalmente de una manera muy limitada, con el envío de misiones médicas, por ejemplo. Desde el punto de vista económico, la isla ha reemplazado parte del antiguo subsidio de la Unión Soviética con el venezolano y depende de ese dinero.
. LIBERTAD DE EXPRESIÓN
"En mi experiencia personal enseñando en China, a pesar de que hay muchas cosas que no se pueden hacer, existen espacios abiertos a la discusión y la controversia. El control existe, hay un monitoreo muy fuerte de las comunicaciones, pero se dan espacios para que los jóvenes debatan, critiquen. Uno de ellos: las universidades", dice Armony.
En un informe publicado por la revista de comunicación Infoamérica en 2009, se asegura que la evolución de Cuba en materia de libertad de expresión es mínima. "La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en su Relatoría Especial para la Libertad de Expresión, sostiene que es el único país de América donde no existe tal libertad y donde hay más periodistas encarcelados por motivos profesionales", se lee en el texto.
Cinco años después, en 2014, puede decirse que el acceso a internet -aunque muy limitado- ha jugado un papel importante en la creación de espacios para la discusión en la isla.
. LOS JÓVENES
. Para los académicos, la idea de pensar que los chinos aspiran a una democracia es una falsa creencia que se tiene en Occidente sin realmente conocer la realidad del país. "Eso no es una necesidad", señala Armony.
. "Mi experiencia es que los jóvenes chinos sobre todo están interesados en afirmar su pertenencia a la clase media. Eso es lo que les importa. Trabajo estable, vivienda, un auto. Acceso a los bienes de consumo", explica. "Este escenario le preocupa al partido Comunista porque si se contrae la economía y no hay trabajos que respondan a la expansión increíble de la educación superior, puede haber problemas: si voy a la universidad, no quiero trabajar en una fábrica".
. Tras décadas de la política del hijo único, en un país que no tiene sistema de pensión, los jóvenes chinos tienen una preocupación extra: saben que se tienen que encargar de los padres.
En Cuba, los jóvenes que impulsan las reformas en la actualidad apuestan por métodos diversos. Su atrevimiento, en un país donde disentir puede ser penado incluso con cárcel, es un signo de que los tiempos están cambiando.
. LA CORRUPCIÓN
Si en algo se parecen los modelos de ambos países, es en este punto.
El presidente Xi Jinping ha lanzado una campaña muy fuerte contra la corrupción en el Estado y en el partido. "Es gigante, terrible y está teniendo una influencia muy negativa", dice Armony. "A la gente le enoja saber que los funcionarios públicos -a todos niveles- viven mejor y que la gente rica esté por encima de la ley".
En Cuba, el gobierno de Raúl Castro emprendió una campaña de castigo a la corrupción luego de suceder a su hermano. Él ha dicho que se trata de uno de los principales enemigos de la revolución..
El presidente chino, Xi Jinping, comenzó ayer una visita oficia de dos día a Cuba donde busca de convertir a China en gran inversor en la isla, además de segundo socio comercial y primera fuente de créditos.
Esta visita cumplirá con los propósitos de fomentar la amistad, ahondar la confianza mutua, ampliar la cooperación e impulsar el desarrollo, abriendo una nueva etapa de la cooperación amistosa de beneficio mutuo entre China y Cuba, dijo Xi, quien se encuentra desde el lunes en la noche en La Habana.
Xi fue recibido en la tarde por su par cubano, Raúl Castro, con quien asistió a la firma de varios acuerdos entre ambos países comunistas, en una gira centrada en la economía más que en la ideología.
Cuba es la última escala de una gira latinoamericana que lo llevó también a Brasil, Argentina y Venezuela. A estos dos últimos países Xi tendió la mano con diversos acuerdos, mientras sus economías son miradas con recelo por Estados Unidos y Europa.
En coincidencia con su visita, medio centenar de empresarios chinos exploraron el lunes oportunidades de negocios en la isla, atraídos por las nuevas ventajas que ofrece Cuba a la inversión extranjera y por la futura zona franca de Mariel, 45 km al oeste de La Habana.
Las giras de Putin y Xi a una región donde la influencia de Estados Unidos solía ser omnipresente, fueron calificadas este martes como una de las proezas más grandes de la historia humana, por el líder cubano Fidel Castro, de 87 años, retirado del mando desde 2006.